El Litoral
Declararon un ex espía de la Side, Fernando Esteche, ex líder de Quebracho, y Jorge Khalil representante iraní en el país.
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Télam
Un supuesto "espía inorgánico" de la ex Side, Ramón "Alan" Bogado, aseguró este miércoles que el objetivo de la firma del Memorándum de Entendimiento entre la Argentina e Irán, en el marco de la causa AMIA, era en verdad llegar a un "acuerdo de colaboración" en materia de tecnología nuclear.
Bogado se presentó en los tribunales federales de Comodoro Py, al igual que el ex líder de Quebracho Fernando Esteche y el referente de la comunidad islámica en el país Jorge Khalil, quienes negaron haber sido parte de un plan de encubrimiento de los imputados por el atentado contra la mutual judía, ocurrido en 1994.
Bogado le dijo al juez federal Claudio Bonadio que, como espía inorgánico, se infiltró en una "red" iraní en la Argentina y así tomó conocimiento de los supuestos intereses que existían detrás de la firma del memorándum, que nunca entró en vigencia.
El supuesto espía dijo, en presencia también del fiscal Eduardo Taiano, que tras el pacto con Irán había un "acuerdo de intercambio de tecnología entre Buenos Aires y Teherán en materia nuclear", del cual estaba al tanto "la Comisión Nacional de Energía Atómica (Conea)", según informaron fuentes judiciales.
Bogado presentó unos 18 anexos documentales para que sean tenidos como prueba, que ahora deberán ser examinados por la Justicia para determinar su autenticidad.
Télam contrastó la declaración de Bogado con la de un especialista vinculado a la Conea, que sostuvo que lo dicho por el supuesto espía era "un delirio" ya que Irán está mucho más avanzado que la Argentina en materia de energía nuclear, por lo que el país no está en condiciones de transferir tecnología.
El otro motivo invocado por la fuente fue que la empresa estatal de alta tecnología Invap tiene "mucha relación comercial" con países del Golfo Pérsico, como Arabia Saudita, que no seguirían su relación comercial con la Argentina si el hiciera negocios con Irán.
Esta causa se originó en la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman, quien dijo que el memorándum tenía por objetivo dotar de impunidad a los iraníes imputados por el atentado a la AMIA a cambio de que se reflotaran las relaciones comerciales entre la Argentina e Irán.
Indagatorias
También se presentaron a declarar Khalil, sindicado por Nisman como un agente iraní que negoció el memorándum, y Esteche, que según el fiscal fue uno de los gestores argentinos, junto con Luis D´Elía, del acuerdo de entendimiento.
Esteche sólo hizo una breve exposición en la que rechazó los cargos de encubrimiento, dijo que no estaba de acuerdo con la política exterior del gobierno anterior, y negó conocer a los demás acusados del caso, pero no respondió preguntas.
"No tengo vínculo con los demás imputados ni con las maniobras que se me imputan, fui un perseguido del gobierno anterior y, además, el memorándum me parecía una mala política porque implicaba una cesión de soberanía por parte de la Argentina", dijo Esteche al salir del juzgado, en el cuarto piso de los tribunales de Retiro.
El ex líder de Quebracho, la fuerza política a la que Nisman siempre acusaba de querer intimidarlo, reconoció su vínculo con D´Elía, y dijo que a Khalil lo conoció como dirigente de la comunidad islámica argentina, por su trabajo como docente de relaciones internacionales.
Khalil, por su parte, fue el primero en arribar a Comodoro Py 2002 y si bien hizo extensas declaraciones a la prensa antes de ingresar al juzgado de Bonadio, una vez allí se negó a prestar declaración indagatoria.
Ante la prensa y en el pasillo de Tribunales, Khalil afirmó que nunca representó al gobierno de Irán: "La palabra autorizada es el embajador. A mí me calificaron como 'embajador paralelo', que tenía más poder que el embajador. Yo no tengo relación con ellos desde hace tres años".
También calificó de "insólitas" las denuncias en su contra, que lo ubican como supuesto lobbista entre los argentinos e iraníes en las tratativas para la firma del Memorándum.