El Gobierno Nacional promete la cárcel federal de Coronda, pero no anticipa plazos
El gobernador Pullaro ofreció hacerse cargo de la terminación y puesta en funcionamiento del penal, pero no recibió una respuesta formal. De todos modos, la misma sería negativa, según resulta de las declaraciones periodísticas de un funcionario del área.
El Gobierno Nacional promete la cárcel federal de Coronda, pero no anticipa plazos
El gobierno santafesino no recibió una respuesta positiva a la propuesta que hizo de hacerse cargo de la terminación y puesta en funcionamiento de la cárcel federal de Coronda, que continúa así en el limbo del compromiso de estar en condiciones de operar "en breve". Una situación que mantiene desde hace años y con el paso de sucesivos gobiernos, pero que la gestión Maximiliano Pullaro esperaba revertir en lo inmediato, acelerándola con recursos propios.
Peor aún: a falta de respuesta oficial de Patricia Bullrich, a quien Pullaro llevó la propuesta luego de que el área penitenciaria pasara de la órbita del Ministerio de Justicia al de Seguridad, los funcionarios santafesinos se encontraron con una negativa indirectamente formulada por el subsecretario de Asuntos Penitenciarios, Julián Curi, a través de declaraciones periodísticas.
"Le pedí (a Bullrich) que nos ceda la cárcel federal que no está terminada; y nos hacemos responsables económicamente para terminarla y ponerla en funcionamiento con hombres y mujeres del Servicio Penitenciario de la provincia", había dicho Pullaro el 18 de diciembre, luego de hablar al respecto con la ministra en Rosario, en el lanzamiento del Plan Bandera.
La posibilidad fue alentada por la propia funcionaria, también en declaraciones periodísticas formuladas en la ocasión: "Estamos para cerrar en estos días la posibilidad de que la provincia tenga la potestad sobre la Cárcel de Coronda".
El planteo de Pullaro, que según revelaron en su momento funcionarios de la provincia, ya se estaba trabajando con los equipos técnicos del ministerio nacional, no recibió una respuesta definitiva formal. Pero una variación inesperada al aparente curso de los acontecimientos se registró cuando Curi fue entrevistado por un medio rosarino y se lo consultó sobre el destino inmediato del Centro Federal Penitenciario Litoral Argentino; tal el nombre que recibió desde hace una década, cuando empezó a trabajarse en el proyecto. "Lo vamos a terminar prontamente y vamos a administrarlo", dijo Curi, para sorpresa del gobierno provincial.
"Nosotros trabajamos con la provincia de Santa Fe mancomunadamente, apoyamos en todo lo que podemos y estamos comprometidos porque la lucha de Santa Fe y del gobernador Pullaro es nuestra batalla también. En relación al complejo penitenciario, nosotros lo vamos a terminar prontamente y lo vamos a administrar, es un complejo federal", completó Curi, en declaraciones a Radio 2.
"Sabemos que la provincia tiene internos que son del sistema federal, en la medida en la que podamos ir terminando esa cárcel vamos a ir incorporando a esos detenidos federales que son de la jurisdicción de Rosario a ese establecimiento", amplió el funcionario, aunque sin dar precisiones de plazos.
En declaraciones posteriores al sitio Letra P, hizo hincapié en los fundamentos para no aceptar el planteo del mandatario provincial. "Es una cárcel federal, fue construida con fondos federales y la vamos a ejecutar", dijo el funcionario, quien contó que la cárcel está terminada en un 97%, pero que "el gobierno anterior hizo un desastre, hay que hacer redeterminaciones" (de precios).
Sin embargo, sostuvo que para terminarla falta "un plazo corto porque no le falta mucho". Además, informó que ya tienen reclutado "alrededor del 80% del personal necesario" para operar el centro penitenciario, otro de los factores que incide en los términos de la puesta en marcha, y del que el gobierno santafesino había ofrecido ocuparse.
Otro escenario
Desde la Provincia, en tanto, y ante la consulta de El Litoral, no hubo pronunciamientos oficiales al respecto, dado que tampoco cuentan con una respuesta oficial. En todo caso, lamentan no contar con una fecha cierta de concreción, que sí hubiese podido tenerse si se cedía el control a la provincia.
La otra medida que seguramente se tomará en este escenario es una actualización del reclamo por los gastos de manutención de los casi 700 presos federales que están actualmente en las cárceles provinciales (colaborando así con la sobrepoblación y el alojamiento de detenidos en comisarías), que conforma una deuda acumulada durante varios lustros y que también Pullaro había ofrecido condonar en caso de que se accediese a su petición de contar de inmediato con las instalaciones de Coronda.
"Sabemos que la provincia tiene internos que son del sistema federal, en la medida en la que podamos ir terminando esa cárcel vamos a ir incorporando a esos detenidos federales que son de la jurisdicción de Rosario a ese establecimiento".
Julián Curi, subsecretario de Asuntos Penitenciarios de la Nación
La obra
El futuro Centro Federal Penitenciario Litoral Argentino, está emplazado en un predio de más de 62 hectáreas que se encuentra en el conocido "camino de Las Moras", ubicado a la vera de la ruta provincial 64, entre la ciudad de Coronda y la comuna de Larrechea.
El proyecto contempló la construcción de cuatro pabellones que albergarán a 462 presos, como así también áreas para programas y servicios. En tanto, el predio contará con una capilla y una escuela y un edificio externo que será utilizado para servicios generales para el personal de la unidad carcelaria.
La construcción comenzó el 1 de diciembre del 2015, tres meses después de que el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación de ese momento, Julio Alak, desembarcó en la ciudad de Santa Fe y mediante un acto que tuvo lugar en el salón de actos de la Corte Suprema de Justicia provincial, adjudicó la obra a una UTE conformada por las empresas Iecsa y Ocsa.
Desde ese entonces, la obra marchó en distintos tramos, ritmos y, con sucesivos anuncios y postergaciones, abarcó el paso de tres gobiernos nacionales: el tramo final del mandato de Cristina Fernández, los cuatro años de Mauricio Macri y el de Alberto Fernández.