Miércoles 25.5.2022
/Última actualización 12:28
La irrupción de la cuarta ola, el aumento de contagios aunque no deriven en internaciones, y la proliferación de enfermedades respiratorias obligan al gobierno de la provincia a revisar algunas medidas y decisiones adoptadas, por ejemplo, respecto del uso del barbijo. Como se sabe, el 20 de abril y tras una reunión de expertos con el gobernador Omar Perotti, la Casa Gris anunciaba que el uso del tapabocas dejaba de ser obligatorio, aunque se sostenía que seguía siendo "altamente recomendable". Su utilización voluntaria se tradujo en los hechos en una fuerte relajación de los cuidados; el barbijo prácticamente desapareció de la escena pública y de los ámbitos cerrados no privados.
Frente a la nueva coyuntura sanitaria, ya hay escuelas – particularmente de la ciudad de Rosario- que vuelven a exigir a su alumnado el uso del tapaboca. Y desde el gobierno, se decidió "instar a la población" a que lo utilice en recintos cerrados.
Nueva instancia
La exhortación del gobierno llegó a través del ministro de Trabajo, Juan Pusineri, quien ante la consulta, admitió que de cara a las nuevas circunstancias, se considera "necesario instar" a la ciudadanía a utilizar el barbijo.
"Lo que venimos conversando en el marco del gobierno, particularmente con autoridades sanitarias, es que estamos en un momento en el que es necesario instar a la población a que en lugares cerrados el barbijo se use", dijo el funcionario. "Esto tiene que ver – acotó- con el aumento de casos, pero también con otras enfermedades respiratorias que no son Covid y que también están teniendo fuerte preponderancia. Esto es lógico, luego de dos años en los que estuvimos con situaciones de distanciamiento, aislamiento y con cuidados; las autoridades sanitarias nos explican que las defensas en la población han bajado y hoy al tenerse una vida plena, repercuten mucho más las enfermedades respiratorias. El tema aquí – advirtió- es que como consecuencia de esto, hay muchas derivaciones al sistema de salud".
Frente a ello, consideró que "una disposición tan simple y fácil como la de usar un barbijo en un lugar cerrado donde hay posibilidades de aglomeración o se reúnen muchas personas, nos parece que es una cuestión razonable para que la población la lleve adelante. Por eso estamos instando fuertemente a que en este momento particular en el que empiezan a llegar los primeros fríos y tenemos este cuadro, el barbijo se use en lugares cerrados", enfatizó.
¿Obligatorio?
Pusineri no descartó que este "instar" a la población a que utilice el barbijo en lugares cerrados, sea un paso previo para volver a exigirlo como obligatorio, al menos en determinados ámbitos. "No hay que descartar nada. Las decisiones en materia sanitaria se adoptan en el marco del comité de expertos. Pero es una posibilidad que si los especialistas son convocados y se da una observación en ese sentido, se pueda volver. Cuando dijimos que se recomendaba el uso de barbijo pero que no era obligatorio, también en esa ocasión dijimos que era una medida que se podía revisar en función del avance de la situación sanitaria. Hoy instamos, y habrá que ver la evolución y resultados de cómo se va dando en los próximos días el aumento de los contagios, cuarta ola y otras enfermedades, como para tomar otro tipo de decisiones, si fuese necesario", concluyó.