El texto girado al Senado pretende limitar la suspensión de actividades en las escuelas. Boscarol señaló que desde 2010 el Consejo Federal de Educación recomienda ese piso de exigencia.
El objetivo es recomponer calendarios, contenidos y unidades pedagógicas. Crédito: Flavio Raina
"Consideramos indispensable garantizar un mínimo de 190 días de clases como una medida que mejora las posibilidades de todos los estudiantes. Diversos estudios explican que el tiempo de exposición de los estudiantes al aprendizaje escolar efectivo se constituye en un elemento esencial en la construcción de un sistema educativo igualitario" afirmó Alejandro Boscarol (UCR - Juntos por el Cambio) al fundamentar la votación del proyecto de ley que "fija el ciclo lectivo educativo anual mínimo de 190 días efectivos de clases, establecido para todos los establecimientos educativos, sean éstos de gestión estatal o privada, en los todos los niveles de educación obligatoria (inicial, primario y secundario)".
Con largos debates previos en las comisiones de Educación y de Asuntos Constitucionales, el proyecto de ley del radical llegó al recinto en la última sesión y fue votado por los escasos 25 diputados sentados en sus bancas más el presidente del cuerpo, Pablo Farías, quien no vota salvo en caso de empate.
Para el cómputo de los 190 días "se considera 'día de clase' aquel que se completa con la mitad de la cantidad de horas reloj establecidas para la jornada escolar" y ante un eventual incumplimiento, se ordena al Ministerio de Educación que "debe adoptar las medidas necesarias a fin de compensar los días de clases perdidos hasta completar el mínimo establecido". Más adelante, el texto le impone a la cartera educativa "tomar los recaudos necesarios para que los feriados locales o provinciales en ningún caso vulneren el calendario oficial, y asegurar que las celebraciones escolares referidas a estos feriados, u otras efemérides, tengan en todos los casos un carácter eminentemente educativo y no impliquen la suspensión de clases". Además aclara el texto girado al Senado que "la suspensión de clases en los establecimientos educativos sólo puede efectivizarse con la disposición expresa de la autoridad competente y por motivos de fuerza mayor debidamente fundamentados".
El objetivo es que la medida entre en vigencia en el ciclo lectivo 2023, subrayando el texto aprobado va en línea con las disposiciones de la Ley Nacional 26061 de Protección integral de los derechos de niñas, niños y adolescentes, y se aclara que las disposiciones "no pueden afectar los derechos y garantías laborales, individuales y colectivas, de los trabajadores de la educación".
"Si tuviésemos ley de Educación esto no haría falta" señaló Boscarol quien explicó que las últimas leyes nacionales en materia educativa apuntan a recomponer el desastre que ocasionó la ley federal de los 90. Mencionó la nueva ley de Educación, la norma sobre financiamiento y la que fija 180 días como mínimo. "El objetivo es recomponer calendarios, contenidos y unidades pedagógicas para lograr una uniformidad que se veía amenazada", justificó. Pero además destacó que el Consejo Federal de Educación, desde 2010, recomienda a las provincias calendarios de 190 días de clase.
Alejandro Boscarol. Crédito: Pablo Aguirre
"La Argentina y dentro de ella Santa Fe, es uno de los países que menos días de clases tiene en primario y secundario; estamos lejos incluso de vecinos como Chile o Uruguay". Para el legislador "los 190 días deben ser un piso, la cantidad no tiene que ver con la calidad pero ambos están asociados porque la cantidad disponible de un chico frente a los contenidos tiene que ver con la planificación, dedicación de docentes".
En el 2003, la Ley nacional Nº 25.864 fijó un ciclo lectivo anual mínimo de 180 días efectivos de clase en establecimientos en los que se imparta educación inicial, primaria y secundaria. En el año 2010 el Consejo Federal de Educación (reúne en asamblea al ministro de Educación de la nación y a todos los ministros de las provincias) decidió de forma unánime - Resolución Nº 94/10- que a partir del año siguiente, las provincias confeccionarían sus calendarios escolares de manera que superen l80 días con el objetivo de alcanzar 190 días de clases en los niveles de educación obligatoria. En el año 2011, también el Consejo Federal de Educación, mediante la Resolución Nº 165/11, establece directamente que a partir del año siguiente, todas las jurisdicciones del país confeccionarán sus calendarios escolares previendo una extensión mínima de 190 días efectivos de clases.