Mario Cáffaro | mcaffaro@ellitoral
Lo señaló Gustavo Segré, consultor especialista en negocios con Brasil. El impacto de la política en la economía y el caso Odebrecht con ramificaciones en la Argentina.
Mario Cáffaro | mcaffaro@ellitoral
Ametralla con números de la economía de Brasil y también de las implicancias judiciales del Lava Jato. Gustavo Segré es economista y dirige Center Group, una consultora instalada en San Pablo donde interactúa con la Argentina en materia de comercio.
- La economía argentina tiene expectativa en la recuperación de Brasil para mejorar el comercio. ¿Cómo está hoy Brasil tras el escándalo político del Lava Jato?
- La economía brasilera se disoció de la política de los casos de corrupción que ahora estamos viviendo aquí. El año pasado, Brasil hizo un punto de inflexión en la economía. Venía bajando en 2014, 2015, 2016 y en 2017 comienza un crecimiento, 1%. Este año estará alrededor del 2% pero con valores e indicadores macroeconómicos muy interesantes.
Ejemplos: la tasa de interés es del 6% anual; inflación 4% anual; superávit comercial importante; cantidad de inversiones directivas, productivas, generadoras de empleo, y eso configura un abastecimiento permanente a la oferta de dólares. Hoy Brasil tiene en reservas internacionales de 382 mil millones de dólares y la deuda externa, pública y privada, es de 317 mil millones. Es acreedor internacional. Tiene algunas deficiencias: continúa con déficit fiscal lo debe equilibrar en el 2020-2021; tasa de desempleo no es de las mejores, pero ha hecho reformas estructurales importantes como la ley de la reforma laboral, congelamiento del gasto público. Estas dos cosas nos han generado a los argentinos la responsabilidad de tener que hacerlo atrás de ellos porque si no nos vamos a quedar afuera.
Macroeconómicamente están mucho mejor que nosotros; la inflación anual de Brasil es la mensual de Argentina.
- Cómo hacemos para asociarnos si además competimos hacia afuera
- Los valores se ajustan. Argentina tiene una muy buena oportunidad con Brasil para aprovechar un momento interesante. Faltan dos meses para octubre donde Brasil resolverá quien será el próximo presidente. Allí se van a ajustar mucho más los proyectos económicos, planes sociales, fiscales, en relación a la política monetaria y a la política fiscal. Esto puede ser bueno, pero el problema es que nosotros no aprovechamos que Brasil aumentó sus exportaciones tres veces desde el año 2000 en que nosotros ocupábamos el 12,25% de todo lo que Brasil le compraba al mundo y hoy que compran tres veces más, nosotros le vendemos la mitad de aquél porcentaje
- Esto por nuestros errores de política exterior
- Por nuestros errores de política exterior y porque no tenemos precios competitivos. En el 2000 teníamos el 12,25% de lo que Brasil le compraba al mundo y hoy es menos del 6%. Claramente hemos hecho algo mal porque Brasil le compra a otros.
- ¿El problema de la exportación es solo el tipo de cambio?
- No, el concepto argentino es que si el tipo de cambio está valorizado, el peso se desvaloriza entonces podemos exportar. El dólar es una de las seis variables que componen el costo de un producto: insumos, mano de obra, tributos, energía, infraestructura, logística y tipo de cambio. Culturalmente el argentino identifica que si el dólar está caro entonces podemos exportar, si el dólar está barato podemos importar. No es así. Hay que cambiar esa mentalidad. El gran problema que complementa la falta de mercados por la falta de competitividad del producto, del bien o del servicio, es que está muy concentrada la exportación de productos. En la Argentina existen 829.531 empresas de las cuales 9.637 están registradas como exportadoras y, de ellas, 4.531 son continuadoras de exportación por tres años al menos. Y a Brasil exportan 2.600 de las cuales el 3% de ellas tienen el 80% del valor exportable. Hay una concentración gigantesca en pocas empresas y muchos productos y la pyme no encuentra el lugar. Esto es un problema a solucionar.
- Y allí debe estar el Estado apoyando
- Sin ninguna duda, pero el Estado conductor, el privado debe hacer su parte. Para tener un proyecto exportador, una idea de un país exportador serio necesitas un producto, una empresa que exporte y que esa empresa tenga un proyecto exportador y que haya una política de estado. Sin política de estado no sirve; pero si no hay un producto y una empresa que exporta tampoco sirve.
Lava Jato y Argentina
Segré no duda en afirmar que habrá impacto en Argentina de causas que se tramitaron en Brasil vinculados a negociados entre empresarios y funcionarios estatales. “Los sistemas se cruzan. Nombres que aparecerán en diversas causas y por eso sería importante que acá, al igual que en Brasil, algunos jueces solo investiguen corrupción. Respiran corrupción cuando se levantan, cuando almuerzan y cuando se van a dormir. Tienen un grupo de fiscales que trabajan en esas causas y la policía judicial que los apoya en esas causas. Acá Stornelli y Bonadío tienen miles de causas, y mezclan corrupción con asaltos, asesinatos, drogas”.
También diferencia lo que se conoce de Argentina con el financiamiento a la política que se hacía en Brasil, incluso con directores de varios partidos en empresas estatales que ‘robaban’ para su fuerza.
El consultor imagina mucha gente detenida también en Argentina y expone números del Lava Jato cuatro años después del 17 de marzo de 2014: 1.965 allanamientos, 204 personas ya sentenciadas, 134 sentencias que sumadas dan 1.983 años 4 meses y 20 días de prisión; 174 arrepentidos del Lava Jato, 293 en total la jurisprudencia brasilera y se ha recuperado gracias a la ley de extinción de dominio -Brasil la tiene aunque con otro nombre- 3.200 millones de dólares y la justicia está reclamando 10 mil millones de dólares, incluyendo multas.
¿Lava Jato y Gloria son diferentes? le preguntó El Litoral. “Son diferentes por el contexto, Gloria son los relatos de un chofer, Lava Jato es un montón desde estas gerencias de operaciones estructuradas, el club de la obra pública, partidos políticos, personajes de empresas estatales. Brasil lo tenía más sofisticado porque no se robaba para uno nada más, vos tenías un partido que tenía una dirección en una empresa estatal donde robaba para el partido y para ellos y lo mismos los otros directores de otros partidos. Era una organización criminal, pero se repiten los conceptos”
- Argentina accede a la documentación de Odebrech. ¿Qué consecuencias jurídicas puede tener?
- Van a venir pruebas, no es solamente la declaración de los empresarios, vienen transferencias, copias de transferencias de dineros al exterior, nombres, cuentas, países, viene de qué obra. Va a ser muy interesante...