Lunes 24.4.2023
/Última actualización 2:05
"Honrado de visitar, junto con mi colega @USAmbassadorARG, Marc Stanley, una draga de @Jandenulgroup en Corrientes. Me impresionó el trabajo de calidad que la compañía belga está haciendo desde hace varias décadas en la Argentina y la región. #Hidrovia".
El tuit de Karl Dhaene, embajador del Reino de Bélgica en la Argentina, Uruguay y Paraguay, hizo pública la visita de ambos diplomáticos a bordo de la draga Alfonso de Albuquerque, una de las 5 que la Compañía Sudamericana de Dragados -del grupo belga Jan de Nul- tiene destinadas a sus operaciones en la región.
El buque, bajo bandera y con tripulación argentinas, es reconocido por ser el primero en el mundo que cuenta con un sistema de filtrado de gases que logra una reducción certificada del 99% de las partículas residuales de la combustión, cumpliendo de esa manera con normas medioambientales Euro V.
El embajador Stanley, también vía twitter, destacó por su parte: "Qué gran oportunidad para aprender de primera mano sobre el importante trabajo de dragado que hace del río Paraná una vía eficaz y eficiente para el transporte de bienes dentro y fuera del país. Gracias a @jandenulgroup por la invitación y al Emb. @KarlDhaene por acompañarnos".
El gesto de Stanley tiene lectura geopolítica, ya que Estados Unidos viene desarrollando una intensa gestión -desde Washington- para disputarle a China espacios contractuales de la Argentina. La vía navegable troncal del Paraná, por donde sale 80% de las exportaciones agroindustriales del país, es la comprendida entre el kilómetro 1238 del río Paraná, punto denominado Confluencia, hasta la Zona de Aguas Profundas Naturales, en el Río de la Plata exterior.
El trabajo de Dragado de esa vía lo viene desarrollando Jan De Nul bajo contrato con la Administración General de Puertos. La empresa fue protagonista del salto exportador del país tras las inversiones de puertos privados en los '90. El ministerio de Transporte -a través del Ente de Control de la Vía Navegable Troncal- elabora los pliegos para licitar a largo plazo los trabajos de dragado y balizamiento.
La empresa belga pasó con éxito los desafíos de la sequía, que redujeron el caudal del Paraná y condicionaron las profundidades de navegación requeridas para los buques, en especial los que operan entre los puertos del sur santafesino y el Río de la Plata.
Cabe recordar que de Santa Fe al sur, el dragado permite la navegación de buques Panamax con relativo grado de carga según calado y altura del río, en tanto que desde la capital santafesina hacia el norte la vía navegable requiere el mantenimiento de profundidad a 10 pies, para permitir el paso de trenes de barcaza.
La Vía Navegable Troncal permite transportar graneles agrícolas, graneles minerales, combustibles, contenedores y automóviles, además de trasbordos y fletes de cabotaje mayormente ligados al traslado de combustibles y fertilizantes.
En el año 2020, la Subsecretaría de Puertos, Vías Navegables y Marina Mercante registró un total de carga contenerizada de 1.917.000 TEU (unidades de carga equivalentes a contenedores de 20 pies), y 160.743.000 t de carga no contenerizada, según los informes disponibles del ministerio de Transporte de la Nación.