En el marco de la presentación del Fondo Agropecuario, realizada en la ciudad santafesina de Rafaela y cuando se le preguntó si aspira a gobernar su provincia, Buzzi sostuvo: “Por supuesto que sí. ¿A qué monaguillo no le gustaría ser obispo?”.
De todas formas, aclaró que “no he hablado del tema” con el actual mandatario, el socialista Hermes Binner. “Ustedes conocen mejor que yo a Binner y saben que no habla” de estas cuestiones, remarcó.
Por otra parte, el dirigente ruralista reconoció que “el Congreso de la Nación volvió a prender las luces que antes estaban apagadas y llenas de telarañas, lo manejaban a control remoto”. Luego, afirmó que “se está trabajando muy bien desde las Comisiones de Agricultura, como no se hacía en años, y las asambleas con legisladores se están dando en distintos puntos del país, no hay ya una ley que decrete la felicidad del productor agropecuario, pero hay en marcha procesos que llevarán su tiempo, se está jugando un papel que habilita nuestras expectativas a futuro”.
Al ser consultado sobre el estado en que se encuentra el conflicto del campo con la Casa Rosada, Buzzi manifestó que “han cambiado las formas, no hay declaraciones altisonantes de parte del gobierno”.
“Pero no se habrá superado si se siguen llevando por delante la capacidad del pequeño y mediano productor”, indicó, tras lo cual adelantó que “no vamos a resignar la posibilidad de hablar con la presidenta; si atiende a los empresarios, puede hacerlo con nosotros”.
El dirigente remarcó que aún con “la fenomenal cosecha sojera que se viene” hay “muchos productores, aún con 3.500 ó 4.500 kilos por hectáreas” que se verán obligados a “arrendar o liquidar sus campos”.
“El kirchnerismo ha llevado a que en la Argentina a la agricultura la hagan entre tres mil grandes grupos, esto es lo dramático, que no se siga promoviendo un esquema de concentración”, resaltó.