Los dos se llaman Jorge y ambos provienen del justicialismo. Solo hasta allí es posible encontrar parecidos entre los pliegos propuestos por el gobernador Omar Perotti para el directorio del Ente Regulador de Servicios Sanitarios.
El ex ministro de Seguridad de la Provincia y un asesor del equipo del diputado provincial Oscar Martínez son los elegidos por el gobernador Omar Perotti. Los pliegos aún no tienen fecha de convocatoria para su tratamiento por la Asamblea Legislativa. ¿Qué dice la ley sobre sus requisitos'.
Los dos se llaman Jorge y ambos provienen del justicialismo. Solo hasta allí es posible encontrar parecidos entre los pliegos propuestos por el gobernador Omar Perotti para el directorio del Ente Regulador de Servicios Sanitarios.
Jorge Lagna y Jorge Raúl Hurani, el ex ministro de Seguridad y un contador del equipo de trabajo del diputado provincial Oscar Martínez, son los nombres que el Poder Ejecutivo Provincial ha enviado a la Legislatura.
La noticia se conoció el miércoles 2 de noviembre, medio día después de que la ministra de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat, Sivina Frana dijera a El Litoral que habría un envío de dos pliegos, lo que daba por tierra con la posibilidad de que se proceda a nombrar por decreto a dos directores transitorios o interinos, de entre los actuales gerentes del Enress.
En el fondo, más allá de los nombres propuestos y el debate que se producirá hasta su tratamiento, en juego está la posibilidad de que el ente regulador recupere la plenitud de sus facultades.
Hoy el directorio del organismo encargado de controlar la calidad del agua potable y de regular los servicios sanitarios tiene solo un miembro: Leonel Marmiroli, y al no tener el quórum (de tres sobre cinco integrantes) no se pueden dictar resoluciones, por ejemplo, para que unas cien cooperativas puedan actualizar sus tarifas. (Aguas Santafesinas resuelve esas situaciones con financiación del Estado Provincial).
Los dos pliegos ya están en la Comisión de Acuerdos y el paso siguiente es que se fije una fecha para invitar a los propuestos a una entrevista con sus doce integrantes (ocho diputados y cuatro senadores) así como fijar, desde la presidencia del Senado, la convocatoria respectiva a la Asamblea Legislativa que podrá aceptarlos o rechazarlos. De no hacerlo, procederá la aprobación ficta o de hecho, por el mero paso del tiempo.
Son muy diferentes los perfiles de ambos Jorge. Mientras de Lagna abundan apariciones en cualquier búsqueda por internet, de Hurani poco se sabe además de su labor técnica para el legislador de 100% santafesino y el Frente Renovador, y de su trabajo como secretario de la Cámara baja santafesina, durante la presidencia del cuerpo a cargo de Luis Rubeo. Su nombre se repite en las resoluciones de carácter interno y administrativo del cuerpo durante ese período.
Lagna es un protagonista de la vida política santafesina desde hace años, con una alta exposición pública desde que era diputado provincial, y más a partir de su aporte al debate con su libro "La Secta Socialista, apuntes para la militancia" sobre los dirigentes del PS en la provincia, a cuya presentación acudió el por entonces diputado nacional Hermes Binner (en 2006).
Lagna fue ministro de Seguridad entre marzo de 2021 y agosto de 2022. Había sido convocado por la Cámara de Diputados de Santa Fe para que rindiera cuentas del uso de los fondos previstos por la Ley de Emergencia en Seguridad, lo que finalmente no sucedió luego de un par de postergaciones pedidas por el secretario de Gobierno, Oscar Urruty, que los diputados de la oposición aceptaron.
Lagna renunció y finalmente a esa labor prevista por la norma la debió llevar adelante el actual ministro de Seguridad, Rubén Rimoldi, en dos visitas que mostraron su enfrentamiento con la secretaria del área logística, Ana Morel. Aparentemente, luego de varias semanas de tensiones que presagiaban cambios de nombres ambos han encontrado la forma de convivir sin que haya renuncias, a pedido del gobernador Perotti.
Aunque los pliegos aún no tienen fecha de convocatoria para su tratamiento por la Asamblea Legislativa, ya asoma el debate sobre quienes tienen la responsabilidad de tomar decisiones en el Enress.
Lo primero que debe decirse es que en Santa Fe es una tradición arraigada, que no distingue partidos políticos ni gestiones, el contar con directores que no cuenten con numerosos antecedentes calificados en la materia de que debe ocuparse el Enress: la regulación de los servicios públicos sanitarios.
Cualquiera que revise el perfil de los últimos directores e incluso de los últimos presidentes del ente verá que hay más casos de dirigentes políticos que de cuadros técnicos. O que posean ambas características.
La Ley 11.220 define un objetivo que luego cada Ejecutivo (y cada negociación política con el Legislativo) interpreta. Conviene repasar qué dice la letra fría de la norma sobre los cinco directores, con mandatos por cuatro años: "en todos los casos los miembros propuestos deberán contar con experiencia e idoneidad, acorde con la naturaleza e importancia de la actividad que deberán cumplir". No se establece cómo merituar la experiencia y la idoneidad, aunque se fijan las prohibiciones en ocho incisos del artículo 22 a partir de incompatibilidades para el cargo.