El gobierno de Santa Fe no tiene previsto, al menos por ahora, trasladar al personal público de Santa Fe los beneficios que anunció el presidente Mauricio Macri para los estatales nacionales. Así lo adelantó en diálogo con la prensa, el ministro de Gobierno, Pablo Farías.
“Las medidas son muy recientes y resta hacer un análisis más detallado”, aclaró en primera instancia el funcionario. “Lo anunciado por el presidente -continuó- respecto de bonos a empleados estatales se refiere exclusivamente a trabajadores del ámbito nacional. No es trasladable eso, en principio, a las administraciones provinciales, excepto que haya una intención del gobierno central de cumplir con algunas obligaciones o de girar fondos que ayuden a pagar esas diferencias”, explicó.
Asimismo, Farías advirtió que “la situación de la provincia y sus municipios “es distinta” a la de Nación “desde el momento que aquí se paga una actualización mensual de los salarios, merced a la cláusula gatillo”. Sobre el particular, el ministro apuntó que ése fue uno de los ítems abordados también con preocupación en la reunión que mantuvo este miércoles con senadores del oficialismo y la oposición (ver pág. 4), para analizar la situación financiera de pueblos y ciudades.
“Los legisladores están muy preocupados porque los intendentes tienen serias dificultades para cumplir con esa actualización salarial en municipios y comunas que, inclusive, es bastante más onerosa que lo que se ha presentado a nivel provincial. Ése es un tema de discusión”, admitió. A modo de síntesis, Farías planteó que “no creemos trasladable, en principio, a las administraciones provinciales, lo que ha planteado el presidente Mauricio Macri”.
En otro orden, el funcionario también manifestó su preocupación por el impacto que puedan tener los anuncios de Mauricio Macri en los índices de coparticipación federal.
“Nos interesaría saber cómo van a impactar estas medidas en la coparticipación, fundamentalmente por el Impuesto a las Ganancias, que es coparticipable. Queremos saber qué impacto va a tener esta reducción de la recaudación que se está planteando, a partir de la modificación (aumento) del mínimo no imponible”, observó.
El ministro aclaró que se comparte el espíritu de la medida, pero insistió en conocer el impacto que tendrá en los ingresos fiscales. “Más allá de que estamos de acuerdo con medidas de este tipo para incentivar el consumo, y de ayudar a quienes percibimos sueldos fijos para tener mayores posibilidades de consumo y que eso active la economía; creemos que también hay que mirar el impacto que van a tener esas decisiones sobre todo en los municipios, comunas y provincias, que muchas veces están marginadas de decisiones económicas y que les impactan fuertemente”, concluyó.
El futuro de la cláusula gatillo
En medio de una transición en la que la gestión entrante sugirió a la actual convocar a paritarias para revisar la política salarial del último tramo del año, el gobernador Miguel Lifschitz ratificó la vigencia de la cláusula gatillo. “Asumimos la decisión política de no parar la obra pública, de pagar la cláusula gatillo y de pagar el 82% móvil a los jubilados”, sostuvo el mandatario en declaraciones radiales.
Aún así, admitió preocupación por la caída de la recaudación tanto nacional como la proveniente de impuestos de emisión provincial.
“El ministro de Economía (Gonzalo Saglione) está más preocupado que nunca porque en estos procesos de devaluación se desata la inflación. La devaluación se traslada a precios y ya vemos cómo supermercados remarcan y mayoristas retiran productos. Cuando la gente está apretada, no paga impuestos, tasas, ni tarifas y va a repercutir no solo en la provincia sino en los municipios”, sentenció.
“El gobierno nacional ahora, tarde, está tomando decisiones que hace rato tomamos en Santa Fe, como la cláusula gatillo”. Gonzalo Saglione. Ministro de Economía.