Gran Bretaña negó hoy "enérgicamente" haber expulsado colonos argentinos de las Islas Malvinas en 1833 e insistió con que "no puede haber negociaciones sobre la soberanía" del archipiélago "a menos que los isleños así lo deseen".
Según un vocero del Foreign Office citado por el periódico londinense The Telegraph, los malvinenses "son británicos y han optado por ser así. Ellos son libres de elegir su propio futuro, tanto política como económicamente, y tienen derecho a la libre determinación, consagrada en la Carta de la ONU".
Ayer, la presidenta Cristina Fernández envió una carta al primer ministro británico, David Cameron, para reclamarle poner "fin al colonialismo" sobre las Islas Malvinas, que fue publicada hoy en varios diarios nacionales de Inglaterra. (DyN)