Dos testigos directos del ataque a Cristina Kirchner sembraron dudas sobre el accionar de la custodia
Elgueta fue quien registró el momento en que Sabag Montiel le gatilló a la vicepresidenta y señaló que desde la seguridad le pidieron que lo elimine de su celular. García, militante kirchnerista, fue quien atrapó al atacante y deslizó que había deficiencias en la protección oficial.
Dos testigos directos del ataque a Cristina Kirchner sembraron dudas sobre el accionar de la custodia
Este miércoles se desarrolló una nueva ronda de declaraciones en el juicio por el intento de asesinato de Cristina Fernández de Kirchner, ocurrido el pasado 1 de septiembre de 2022. Tras el testimonio de los imputados Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo, comenzó el turno de los primeros testigos del ataque en el barrio de la Recoleta porteña.
En el Tribunal Oral Federal 6, dos declaraciones llamaron la atención este miércoles por el accionar de custodia de la por entonces vicepresidenta: un joven reveló que un agente le pidió que elimine de su teléfono el video (que luego fue el más difundido en los medios) donde había registrado en primera persona el momento exacto en que el arma gatillaba sobre el rostro. Luego, otro testigo, militante kirchnerista, aseveró que los custodios no se interponían si algún manifestante quería tocar a Cristina Fernández de Kirchner.
Luego de la audiencia de este miércoles, el juicio pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo miércoles 1 de agosto, por la feria judicial de invierno. En total, se espera que declaren más de 250 personas a lo largo de todo el debate, aunque no se descarta que la lista se reduzca y se acorten los tiempos del juicio oral ya que estiman podría durar más de un año.
El joven que filmó el ataque
El primero de los testigos fue Cristóbal Elgueta, de 28 años, estudiante de medicina. El joven contó que ese día se acercó al departamento de Cristina Kirchner para “apoyarla” junto a un grupo de amigos. Al acercarse al vicepresidenta hacia donde él estaba, comenzó a grabar un video que luego resultaría clave en la investigación de lo ocurrido aquel día en ataque perpetrado por Fernando Sabag Montiel.
“Me pongo a grabar, Cristina se baja del auto, cruza la calle y se pone a saludar a todo el cordón. Cuando viene hacia nosotros, a través de la pantalla del celular, veo cómo ocurre toda esta secuencia”, explicó.
En su declaración, tras detallar el momento del ataque, Elgueta contó los momentos posteriores a esa secuencia. Fue ahí donde comentó que un custodio de la expresidenta -"hombre canoso de saco negro", lo describió- lo llevó al hall del edificio donde le pidió que le muestre el video y, luego, que lo borre de su celular. Mismo pedido que le hizo a su amiga, Sofía Manusovich, a quien le había compartido su video al darse cuenta de lo sucedido.
Las declaraciones del joven despertaron cierta sorpresa en la sala de audiencias. Fue la defensa de Carrizo quien pidió volver a exhibir el video en cuestión para que identificar quién era la persona que le pidió el borrado, algo que la fiscalía cuestionó. El testigo mostró a un hombre canoso, de saco azul y camisa celeste.
Ante la solicitud de la presidenta del tribunal, Sabrina Namer para que diera mayores precisiones, el joven hipotetizó que el accionar estaba justificado en la propia custodia para poder "salvarse" por cómo se habían manejado en el entorno de CFK, intentando "custodiar la información". Resaltó, de todas maneras, que el video tenía un respaldo: "Me pareció raro, claramente. Igual tenía en mente que no se iba a eliminar", sostuvo.
Cabe recordar que una de las líneas de investigación abiertas buscaba determinar si la custodia de Cristina Kirchner, a cargo de la Policía Federal, había cometido algún delito penal. El jefe de la custodia aquel día, según señaló Infobae de acuerdo a fuentes consultadas, era el subcomisario Gallo.
El militante que atrapó a Sabag Montiel
Antes de Elgueta, declaró Guillermo Federico García, un militante kirchnerista y concejal por el Frente de Todos en el municipio de Presidente Perón de Guernica. Este hombre de 41 años fue quien redujo a Fernando Sabag Montiel tras el ataque contra Cristina Fernández de Kirchner y que custodió el arma hasta que llegara la policía.
Las consultas a García apuntaron también a la custodia oficial que tenía la exvicepresidenta. La fiscal Gabriela Baigún interrogó sobre cómo custodiaban a Fernández de Kirchner y si dejaba que sus seguidores se acercaran a ella; a lo que el testigo afirmó de forma positiva.
-¿Los custodios dejaban tocar a Cristina Kirchner?, preguntó la fiscal Gabriela Baigún
-Sí, respondió
-¿Dejaban acariciarla?, insistió.
-Sí, lo que ella permitía, aseguró.
-¿Los custodios no se interponían si Cristina avalaba el acercamiento de alguien?
-No, no, ratificó.
Además, García detalló que con un grupo de militantes colaboraban en la contención de las personas que concurrían a ver a la vicepresidenta y querían saludarla. Dijo que estos cordones de seguridad eran "improvisados" y no estaban "coordinados" con la custodia personal.
Por otra parte, García comentó cómo vivió el momento del ataque de Sabag Montiel: “Empecé a escuchar gritos a unos cinco, seis metros y a otra persona decir puntualmente ‘tiene un fierro’. Corrí, le puse la mano debajo del cuello, lo levanté, por así decir, y me lo llevé a la vuelta mientras, en un intento de zafar, repetía ‘soy compañero’”, recordó.
Según su declaración, luego de que la Policía detuviese a Sabag Montiel, García volvió al lugar del hecho y otro militante le indicó donde estaba el arma con la que había gatillado; el concejal puso su pie arriba y se la entregó a la custodia de la ex vicepresidenta.
Por este suceso, García fue citado, junto a otro militante Matías Larroca Coutinho, para el intento de apertura del celular de Sabag Montiel en el juzgado de la jueza María Eugenia Capuchetti, en la madrugada posterior al hecho. "Sacaron el teléfono y estaba con la memoria y el chip pegado, pagado en la parte de atrás. Lo intentaron prender. Se apagó automáticamente y lo pusieron a cargar. La apertura del sobre no demoró más de 10 minutos", relató al respecto García. Y agregó: "Quedó ahí cargando y nos pidieron que nos retiremos".
El bloqueo del celular del principal imputado es eje de otra investigación en el juzgado de María Servini. García reveló, en la audiencia de este miércoles, que recibió amenazas después de su declaración. “Tras declarar personalmente en el juzgado de Servini, a los días recibe vía messenger una amenaza como diciendo que me deje de joder con venir a testificar y que tenga cuidado porque sabia donde andaba. Vine a radicar la denuncia”, dijo.