Se trata de la resolución 672/21 que firmó Massa este jueves y la misma establece un Protocolo de Recinto Protegido, algo que la oposición considera que fue determinado "unilateralmente, excediendo las facultades que tiene la Presidencia de la Cámara de Diputados".
"La resolución implica un cambio al Reglamento y esto exige no sólo la participación de los bloques en su redacción si no que tres cuartas partes de los presentes en una sesión voten afirmativamente", se quejaron los integrantes del bloque opositor.
Además, el interbloque que lidera el radical Mario Negri "no está de acuerdo en el trabajo remoto de las comisiones, salvo que sean reuniones informativas para lo cual ya estaba establecida esta opción en el Reglamento (no hace falta introducir nada)".
"En 2020, el Protocolo de Funcionamiento Remoto fue redactado en comisiones, puesto a consideración de Labor Parlamentaria y luego aprobado por 3/4 partes en la sesión del 13 de mayo. Massa de ninguna manera puede ahora arrogarse todas esas potestades a sola firma", se quejaron los legisladores del frente opositor.
En ese marco, el interbloque pidió que Massa revoque la resolución de este jueves y por ello se le presentó una carta con la firma de los jefes de bloques Mario Negri (UCR), Cristian Ritondo (PRO) y Juan López (CC).
Massa firmó la resolución que dispone la vuelta a la presencialidad en las sesiones convocadas por el cuerpo, aunque habrá grupos de legisladores exceptuados que por razones de riesgo sanitario podrán participar de forma remota como a lo largo de la pandemia.
En tanto, se autorizó también la vuelta a la presencialidad de las reuniones de comisión, aunque en este caso no es obligatorio y se definirá por común acuerdo de la autoridades de cada uno de estos cuerpos.
"En virtud del actual descenso sostenido en el número de casos y en el mero de camas ocupadas y la situación de coberturas de vacunación, esta Cámara se encuentra en condiciones de establecer un nuevo protocolo denominado Funcionamiento Parlamentario con Recinto Protegido ", señala la resolución en sus fundamentos.
Para ser admitidos y ocupar las bancas en el recinto, los diputados deberán asistir con un test de PCR por hisopado nasofaríngeo o por saliva en las 72 horas previas al inicio de la sesión, o bien presentar un test rápido antigénico en las 48 horas previas.