Este lunes renunció el secretario de Transformación del Estado y Función Pública, Armando Guibert, a través de una carta dirigida al presidente Javier Milei.
Armando Guibert se desempañaba en la secretaría de Transformación y estuvo involucrado en los aumentos del Ejecutivo. También resignó el cargo Geraldine Calvella.
Este lunes renunció el secretario de Transformación del Estado y Función Pública, Armando Guibert, a través de una carta dirigida al presidente Javier Milei.
Guibert, de 75 años e ingeniero industrial de profesión, tenía un vínculo estrecho con el jefe de Gabinete, Gustavo Posse, y con Federico Sturzenegger, quien está a cargo la Unidad Transitoria para la Desregulación de la Economía.
Su salida se produjo antes de que el Gobierno deba resolver qué hacer con los contratos de unos 70 mil empleados públicos a los que se les había prorrogado sus contratos en diciembre por tres meses.
El ahora ex funcionario estaba encomendado a licuar parcialmente los ingresos de la dotación estatal y a planificar los despidos o la no renovación de los contratos de estos mismos.
"Por medio de la presente, me dirijo a usted a fin de comunicarle mi renuncia indeclinable, por motivos estrictamente personales, al cargo de Secretario de Transformación del Estado y Función Pública a partir del día de la fecha", señaló Guibert en su texto.
Guibert había asumido su cargo en diciembre pasado y en febrero fue también nombrado, ad honorem, como uno de los directores del Banco Nación.
Había quedado envuelto en la polémica por las subas del 48% en los sueldos del Presidente, la vicepresidenta, los ministros y secretarios de Estado del gobierno libertario, por la cual Milei al final desplazó sólo al secretario de Trabajo, Omar Yasin.
La militante libertaria Geraldine Calvella, quien fue designada al frente de la Dirección de Fiscalización de Centros de Documentación del Registro Nacional de las Personas (Renaper), desistió de asumir en el cargo.
Calvella tomó la decisión por el gran revuelo que generó su arribo al Renaper en redes sociales, según pudo saber Noticias Argentinas. Es que su sueldo millonario a sus jóvenes 23 años, por lo que casi no tenía experiencia laboral, generaron fuertes críticas.
La joven es oriunda del partido bonaerense de Saladillo y su única experiencia laboral es haber sido "asesora político" en la Cámara de Diputados, según su perfil en la red social Linkedin.
Además, allí también precisó que estudió dos años Medicina en la Universidad Maimónides y luego dejó la carrera para comenzar en diciembre pasado a cursar Derecho en la Universidad Siglo 21.
Según trascendió, había sido designada al frente de una Dirección en el Renaper el 15 de enero, y su sueldo bruto iba a ser de 2.732.002,60 pesos. Los furiosos usuarios de X, la red social antes conocida como Twitter, apuntaron contra el jefe de Estado y criticaron que públicamente se queja de que se haya utilizado al Estado como “búnker” de militantes.