A través de la Resolución 54/2021, publicada este viernes en el Boletín Oficial, el Gobierno Nacional estableció que “el Régimen Legal del Contrato de Teletrabajo entrará en vigencia el 1° de abril del 2021″.
Fue confirmado a través del Boletín Oficial. La ley no se aplicará si el trabajo remoto se realiza de forma "esporádica y ocasional en el domicilio de la persona que trabaja, ya sea a pedido de esta o por alguna circunstancia excepcional”.
A través de la Resolución 54/2021, publicada este viernes en el Boletín Oficial, el Gobierno Nacional estableció que “el Régimen Legal del Contrato de Teletrabajo entrará en vigencia el 1° de abril del 2021″.
De esta manera, el Poder Ejecutivo confirmó que dentro de dos meses se aplicará la ley de teletrabajo en todo el país.
El primer artículo de la norma establece que “las disposiciones de la Ley Nº 27.555 no serán aplicables cuando la prestación laboral se lleve a cabo en los establecimientos, dependencias o sucursales de las y los clientes a quienes el empleador o la empleadora preste servicios de manera continuada o regular”. Tampoco “en los casos en los cuales la labor se realice en forma esporádica y ocasional en el domicilio de la persona que trabaja, ya sea a pedido de esta o por alguna circunstancia excepcional”.
La ley otorga al empleado la posibilidad de solicitar al empleador volver a desarrollar tareas en la empresa sin posibilidad de que el empleador rechace el pedido. En la reglamentación publicada a mediados de enero, se determinó que este derecho deberá ajustarse a los artículos 9 y 10 del Código Civil y Comercial de la Nación y 62 y 63 de la Ley de Contrato de Trabajo. “Recibida la solicitud de la persona que trabaja, con la sola invocación de una motivación razonable y sobreviniente, el empleador o la empleadora deberá cumplir con su obligación en el menor plazo que permita la situación del o de los establecimientos al momento del pedido”, dice el texto oficial. En ningún caso dicho plazo podrá ser superior a 30 días.
El derecho a la desconexión digital establece que cuando la actividad de la empresa se realice en diferentes husos horarios o en aquellos casos en que resulte indispensable “por alguna razón objetiva, se admitirá la remisión de comunicaciones fuera de la jornada laboral”. “En todos los supuestos, la persona que trabaja no estará obligada a responder hasta el inicio de su jornada”. Y agrega que “no se podrán establecer incentivos condicionados al no ejercicio del derecho a la desconexión” y “los incrementos vinculados a la retribución de las horas suplementarias no serán considerados incentivos”.