La Cámara de Senadores de la Nación aprobó este jueves, y giró a Diputados, el proyecto que modifica la Ley de Movilidad Jubilatoria y establece cuatro aumentos anuales para el sector pasivo, uno de cada tres meses, con un índice basado en la suba de la recaudación de la Anses y los ajustes salariales.
El proyecto obtuvo 41 votos a favor y 26 en contra, gracias al apoyo del Frente de Todos y de sus aliados, en tanto que Juntos por el Cambio rechazó la medida tras un debate que duró más de cuatro horas.
La iniciativa prevé que en la actualización de las remuneraciones del sector pasivo se aplique un índice combinado entre un 50 por ciento a la evolución de los salarios, medidos por el índice RIPTE (Remuneración Imponible de Trabajadores Estables) en función de los trabajadores formales registrados por el Ministerio de Trabajo, y otro 50 por ciento de la recaudación tributaria de ANSES.
El proyecto recibió dictamen favorable la semana pasada, durante una reunión de las Comisiones de Trabajo y Previsión Social y de Presupuesto y Hacienda a la que asistieron el ministro de Trabajo, Claudio Moroni; y la titular de ANSES, Fernanda Raverta, quien festejó en el recinto de la Cámara alta el resultado de la votación.
La iniciativa fue enviada al Congreso por el Poder Ejecutivo y, a sugerencia del Frente de Todos, se le hicieron algunos cambios sustanciales para que, entre otros aspectos, los aumentos previsionales sean trimestrales, con lo cual habrá cuatro incrementos por año.
En el proyecto original, los cambios en la fórmula de movilidad se iban a producir cada seis meses. La decisión se tomó para "empalmar" los meses de "enero, febrero y marzo", que estaban "afuera" de la actualización, porque la fórmula del anterior Gobierno de Mauricio Macri se aprobó en diciembre de 2017, pero empezó a regir en marzo de 2018.
Además, la bancada oficialista impulsó que el incremento previsional del 5% otorgado recientemente no fuera a cuenta del aumento que se otorgará en marzo próximo, tal como estaba previsto originalmente. De tal modo, ese aumento no será a cuenta del de marzo sino que se sumará al nuevo incremento.
El proyecto de ley modifica el índice de movilidad jubilatoria, elaborado en base al trabajo de una comisión mixta, y comenzará a utilizarse desde 2021, cuando venza el actual período de emergencia en la materia.
El Frente de Todos aprovechó el debate para cuestionar al gobierno de Cambiemos, al que acusó por haber “destruido” el Sistema Previsional Argentino.
Tenés que leerEl Gobierno modificará el proyecto de Movilidad Jubilatoria para que los aumentos sean trimestrales“El sistema previsional argentino fue totalmente destruido por la gestión de Cambiemos. Sin la gestión de ese equipo, no estaríamos acá. Dejaron al estado con la capacidad agotada. Lamentablemente para el país, al macrismo le siguió la pandemia”, dijo el presidente de la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado, el peronista pampeano Daniel Lovera.
El legislador agregó que el gobierno de Alberto Fernández “en el peor año de la historia económica argentina, protegió a los jubilados y les dio aumentos por encima de la inflación”.
“Estamos dando respuesta una necesidad concreta de nuestros jubilados y aportando sostenibilidad al sistema. No hay fórmula de movilidad que soporte si no hay crecimiento. Y para ello debe ser equilibrado. Y este esquema es una fórmula que ya la probamos y dio grandes resultados”, recordó Lovera.
En cambio, el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, el cordobés Carlos Caserio, fue más duro con la oposición por haber pedido “diálogo” para confeccionar la nueva fórmula. “¿El gobierno anterior nos habla de consenso? No tienen nada para mostrar. Fue todo malo y por eso la gente no los votó más”, expresó.
Asimismo, destacó que “ninguna fórmula es la perfecta” pero que la que impulsa el oficialismo “como es por la recaudación de ANSES le da sustentabilidad”.
Desde el interbloque de senadores de Juntos por el Cambio, en cambio, justificaron su negativa al proyecto argumentando que la inflación afectará los ingresos de los jubilados, al reclamar que los aumentos se otorguen en base al índice de precios y no de recaudación.
“Esta fórmula tiene problemas: es poco transparente, es más volátil para mantener el poder adquisitivo de los jubilados y por eso muchos países usan e la inflación para realizar los ajustes”, enumeró el porteño Martín Lousteau. El economista, además, advirtió que “si no se trata en serio el sistema previsional nunca” se podrá “resolver la coparticipación de las provincias”.
A su turno, la radical santacruceña María Belén Tapia se preguntó “dónde está el dinero de los jubilados al término de un año de la suspensión de la anterior fórmula de movilidad” utilizada por el gobierno de Mauricio Macri desde 2017 y suspendida por el de Alberto Fernández en 2019.
“¿Cómo resolvemos el problema del índice de la inflación en los haberes de los jubilados? Esta fórmula sólo atiende a la sustentabilidad del sistema porque no se puede mantener el ingreso de los jubilados con un índice de inflación del 32 por ciento”, afirmó Tapia.