“Hace un mes fue noticia que en lo que iba del año se habían secuestrado 3.800 celulares en las cárceles de la Provincia. Hoy es noticia que ese número ascendió a 5.000. Teniendo en cuenta que muchos crímenes son operados desde el interior de las instituciones penitenciarias, no podemos dejar de decir que la situación de alta gravedad”, afirmó el Diputado Oscar “Cachi” Martínez.
Sobre la situación de las cárceles en la Provincia, Martínez sostiene: “Es un tema sobre el cual venimos advirtiendo hace mucho tiempo. La fuga de Piñeiro puso en la luz algo que ya era sabido, que es que nuestras cárceles no están preparadas para garantizar la seguridad de la ciudadanía. Lo mismo pasa con la cantidad de celulares que se secuestran, que son utilizados para continuar delinquiendo desde el interior de las penitenciarías. Al respecto, el 21 de mayo del 2020 nosotros habíamos presentado en la Legislatura un proyecto de ley para declarar la emergencia en materia penitenciaria y destinar los fondos necesarios para abordar este problema”.
Respecto de la iniciativa sobre los celulares, Martínez señala que “la pandemia ha traído como efecto colateral la aceleración de la incorporación de las TICs a la educación. Si bien hoy hemos vuelto a la presencialidad plena en la mayoría de los casos, se trata de una presencialidad donde las herramientas virtuales se han incorporado como parte fundamental del proceso de enseñanza y aprendizaje. Sin embargo, sabemos muy bien que muchos sectores de la población no tienen acceso a los dispositivos necesarios para hacer uso de esas herramientas, y eso agranda la brecha de la desigualdad educativa, que ya venía acrecentada por la pandemia y que en la pre-pandemia también era bastante importante”.
“Por eso – sostiene Martínez – hemos presentado una iniciativa que modifica la Ley Provincial N° 13.579, que es la que establece el destino de los bienes incautados. Si bien dicha ley enumera taxativamente el destino de muchos bienes, no dice nada al respecto de los celulares secuestrados en ocasión de requisas carcelarias. Nosotros queremos incorporar un inciso para que esos dispositivos, una vez formateados, sean puestos a disposición del Ministerio de Educación, y que este a su vez lo ponga en manos de las instituciones o personas que los necesitan para estudiar”.
Sobre el contenido del proyecto, Martínez reflexiona: “No podemos permitir que mientras los delincuentes tienen celulares y operan acciones criminales desde las cárceles nuestros chicos y chicas no tengan acceso a dispositivos que les permitan transitar una educación de mejor calidad. Por otra parte, 5.000 celulares en 9 meses es muchísimo. A nuestro entender, es un desperdicio que esos teléfonos estén tirados en alguna dependencia judicial o policial en lugar de estar en las escuelas o en las casas de los chicos y las chicas que quieren estudiar para salir adelante. En ese sentido, entendemos que nuestro proyecto propone un círculo virtuoso: quitarle la herramienta que el delincuente usa para delinquir, y dársela al estudiante para que pueda usarla para estudiar. De esta manera, combatimos la delincuencia por partida doble: reducimos las posibilidades de la acción criminal y promovemos el estudio y el trabajo como única forma de progreso”.
Para concluir, el Diputado Oscar Martínez agrega: “A esta iniciativa se suman múltiples propuestas que hemos presentado en materia de seguridad y de educación. A la ya mencionada declaración de emergencia carcelaria, se agrega la iniciativa de dictaminar prisión preventiva para quien comete un delito portando un arma o para quien viola una perimetral, entre otras. En relación a la educación, además de haber presentado Santa Fe Conectada, que es un proyecto que prevé llevar conectividad de calidad a toda la Provincia, hemos presentado también una iniciativa para dotar de dispositivos móviles a estudiantes y otra de créditos a tasa 0 para que los y las docentes puedan adquirir tecnología. Estas dos últimas cuentan con media sanción. Estamos convencidos de que promover el estudio y el trabajo, y a la vez combatir la delincuencia, es el camino necesario para una Santa Fe próspera y en paz, que es lo que la gente nos está demandando fuertemente a la clase dirigente”.