El gobernador Maximiliano Pullaro y la ministra de Seguridad de la Nación, compartieron un balance positivo de la implementación del Plan Bandera para la reducción de la violencia en Rosario, y se comprometieron a seguir adelante con el accionar del comando conjunto. El mandatario santafesino remarcó el inicio de una "segunda etapa" y la fuerte inversión prevista.
Luego de una reunión de trabajo en la sede de Gobierno en Rosario, ambos brindaron una conferencia de prensa, con la participación del ministro de Justicia y Seguridad provincial, Pablo Cococcioni; y por parte de Nación con la asistencia de Alejandra Monteoliva, secretaria de Seguridad, y Martín Verrier, secretario de Lucha contra el Narcotráfico.
En el inicio de la presentación ante los periodistas (donde la ministra nacional evitó prolijamente cualquier cuestión no vinculada a la temática, como el escándalo de la visita de legisladores libertarios a represores encarcelados o preguntas vinculadas al rol político de Mauricio Macri), Monteoliva puso en cifras el balance, con estadísticas actualizadas al sábado pasado: una baja de casi el 74 % de los homicios dolosos en las zonas donde hay fuerzas federales, y del 63 % en toda la ciudad de Rosario. También, paralelamente, una significativa reducción de las balaceras.
"Estamos en un buen momento, pero no podemos bajar la guardia, y esto nos lleva a mirar de manera permanente todas las zonas, reajustar la presencia de las fuerzas federales, seguir con los operativos conjuntos y coordinados y fortalecer las instancias de investigación", añadió.
A su turno, Cococcioni destacó la tarea mancomunada de "los tres niveles y los tres poderes del Estado" y, dentro de ello, "el amplísimo respaldo en un paquete de leyes que nos ha dado la Legislatura, atravesando todos los partidos políticos". Y abogó porque estas reformas sean acompañadas a nivel nacional por iniciativas como la baja en la edad de imputabilidad y la ley antimafia.
Fortalecimiento
Bullrich destacó la impronta y la decisión de Pullaro, a efectos de trabajar de manera conjunta. "Es muy importante, porque se temía que la situación de Rosario se extendiera al resto del país. Esto no pasó, lo hemos encapsulado aquí, pero además con una fuerte decisión de retomar el control territorial".
"Los datos son inéditos, es el número más importante de los últimos 17 años, como dijo el gobernador. En Rosario y también en la ciudad de Santa Fe. Y esto es producto de una planificación semanal, que permitió avanzar sobre barrios en los que las fuerzas federales no estaban, a partir de la pacificación de aquéllos en los que sí estaban. Y también a que los principales líderes de bandas están detenidos y aislados en las cárceles, donde las operaciones que se hacen allí se han reducido a la mínima expresión, por los controles permanentes y con alta tecnología que llevamos a cabo", añadió.
La funcionaria estuvo acompañada por el gobernador Pullaro. Foto: Marcelo Manera
Al momento de aludir a los operativos que se desarrollan, mencionó que "hemos incrementado 500 % las incautaciones de cocaína" y la detención de 555 personas, que no pertenecen al narcomenudeo (ahora en manos de la provincia), sino a "segundas y terceras líneas de las bandas".
"Estamos contentos, pero vigilantes", sintetizó la ministra. "Sabemos que estas organizaciones siguen teniendo recursos, y nosotros vamos a ir con todo contra eso", completó.
A su turno, Pullaro agradeció el compromiso y el acompañamiento de la Nación. "Nunca vamos a olvidar que en el momento más duro que nos tocó vivir, cuando el narcoterrorismo atacó a los ciudadanos civiles para revertir decisiones del gobierno constitucional, no nos abandonaron, vinieron y se hicieron cargo junto con nosotros".
También destacó que "esto no es un punto de llegada, sino de partida" y que "viene una segunda etapa, fortaleciendo niveles operativos, mejorando las investigaciones". En ese punto mencionó la apertura del concurso para 52 cargos de fiscales para cubrir las vacantes, sumar personal y también la licitación de 5 mil cámaras de seguridad con inteligencia artificial para Rosario, que va ser "la ciudad más monitoreada del país".
Por otra parte, volvió a remarcar la inversión de 400 millones de dólares en obra pública carcelaria y policial, generando 4260 plazas (casi lo mismo que en los 40 años anteriores) y culminando las cuatro estaciones policiales previstas para Rosario y tres para Santa Fe, que permitan "terminar con la policía administrativa, y tenerla en la calle".
En el diálogo con la prensa, la ministra Bullrich no dio fecha para el cese de la intervención de fuerzas federales en Rosario, sino que habló de "continuidad del comando unificado" y de mantener las fuerzas, no solo en beneficio de esa ciudad, sino también para mostrar que "en cualquier parte del país donde se intente una toma territorial por medio de bandas de crimen organizado, les va a pasar lo mismo que les está pasando acá".
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