Por más de dos horas y cuarto, esta vez casi sin referencias al gobierno anterior y con un interesante número de objetivos a llevar a cabo en 2021, el gobernador Omar Perotti trazó un repaso de su primer año y pudo por fin mirar hacia adelante. Era la última oportunidad de hacerlo, en poco tiempo habrá elecciones nacionales para renovar el Congreso de medio término y de autoridades municipales y comunales en la provincia. Cuando repita esta ceremonia, en 2022, se comenzará a hablar de los años que le restarán a su gobierno.
El mensaje a las Cámaras de la Legislatura santafesina se cumplió como bastante más que un acto señalado en el calendario institucional de Santa Fe. Fue significativo, aún sin la escenografía acostumbrada de barras colmadas, los aplaudidores oficialistas y los cañones listos para las críticas en la oposición. Faltó la belleza de la plaza soleada y cargada de gente de otras oportunidades pero hubo contenido político que leer. Escribir ayuda a pensar. Eso se espera de los días de retiro del gobernador para preparar su discurso.
Tenés que leerPerotti repasó la gestión en pandemia y reafirmó sus proyectos políticosPuede ser para el gobierno del justicialismo que ha vuelto a la Casa Gris, el inicio de un período en el que logre demostrar que tiene un proyecto de provincia, más allá de las urgencias de la gestión de la pandemia, y del rosario de quejas por la situación con que dijo haber encontrado el Estado.
Había además en este primero de mayo, la expectativa de que Perotti lograra dar un golpe de timón a su relación con las dos Cámaras, donde no tiene los números necesarios para imponer criterios. Tiene que hablar. Se verá si del gesto pasa a los hechos.
Esta vez no hubo más que una cita textual, muy bien elegida, de Adolfo Pérez Esquivel el premio nobel de la paz, y ninguna de las que suelen poblar discursos de campaña en el PJ. "Los puños cerrados no siembran", resonó en el recinto. El gobernador acudió a esa imagen en una de sus reflexiones finales y fue dicha de cara a los legisladores, lo que ciertamente marcan un cambio de actitud.
Los dos discursos tan confrontativos anteriores en el Palacio Legislativo, el del 1ro de mayo de 2020 y sobre todo el de su asunción, en diciembre de 2019, se llevaron los primeros meses de la gestión (siempre importantes porque cuentan con la ventaja del romance recién iniciado con los votantes), hasta la irrupción de la pandemia que sumó otra crisis a los dramas económicos y sociales del país.
Es verdad que a la hora de hablar de la inseguridad reiteró que es su gobierno el que marca una límite contra la "connivencia con el delito" que "tanto dolor ha causado", pero esta vez de inmediato expuso lo hecho para que la Policía sea mejor, con controles, agencias y mejoras salariales, más allá de los resultados en los índices delictivos que obviamente no figuraron en su mensaje.
El propio Perotti dijo que "falta mucho por hacer" y fue lo que más se pareció a una autocrítica en su exposición. También, que confía en ir en la dirección correcta al enumerar inversiones, móviles y búsqueda de una fuerza que "cuide mejor" a los santafesinos. Además de pedir debate y sanción de los tres proyectos de ley, enviados durante 2020, anunció un cuarto proyecto para "regular la seguridad privada y sacar a Santa Fe del rezago normativo en el que está".
Pidió "a ustedes, legisladoras y legisladores, que demos el debate. Seamos artífices de esta reforma que amerita del trabajo en común con el poder legislativo y el judicial".
También adelantó que enviará un nuevo Código Procesal Penal Juvenil, "elaborado por la secretaría de Justicia a partir de los proyectos presentados en ambas Cámaras" que "representa una clara demostración de voluntad de diálogo con el Poder Judicial, con el Poder Legislativo, con las universidades, con los colegios profesionales de abogados y de procuradores para alcanzar una prestación de justicia eficiente e igualitaria". Es decir, la contracara de lo que ocurrió con los otros tres mensajes para reformar a la Policía, donde no primaron los consensos previos.
Fue cuidadoso con las miradas de la oposición hasta para comparar las tasas de interés con que los gobiernos del Frente Progresista tomaron préstamos en dólares en el exterior y el que pide ahora para poder llevar a cabo el plan de Conectividad: 7% antes 2% ahora, si se lo autoriza. Tres veces habló de ese objetivo al comentar su gestión en educación, producción y lucha contra la pandemia.
Tenés que leerPerotti y un mensaje al "luchador" Miguel LifschitzOtro punto destacado fue el de los plazos fijos. Ahí Perotti dejó los papeles que no siempre lograron guiarlo en su exposición e improvisó sobre lo que mejor le sale a los contadores: hablar de números. Y de las ideas que son tan aceptadas en una parte del justicialismo santafesino a la hora de manejar el flujo de recursos del Estado: el déficit "como excepción". Seguramente el ministro de Economía Walter Agosto habrá sonreído cuando Perotti negó que hubiera plazos fijos por 70 mil millones de pesos. "Se busca", bromeó. Y explicó que lo que hay en esos instrumentos bancarios es equivalente a lo que necesita su gobierno cada mes para pagar sueldos y jubilaciones, unos 21 mil millones. Mostró esos ahorros como un salvavidas que nadie quiere usar pero hay que tener a mano.
El discurso escrito por el gobernador fue rico en refranes populares. Y en esa dirección puede decirse que Perotti ha preferido ahora sí, saldar cuentas, y una suerte de borrón y cuenta nueva para que de su gobierno haya un legado.
Lo dijo antes de finalizar: "a todos nosotros, cada uno en sus funciones, nos tocan inmensos desafíos que nadie enfrentó. Espero que seamos recordados como aquellos a los que les tocó legislar, administrar justicia y en mi caso gobernar, luchando contra el covid".
"Créanme que será una tranquilidad enorme, porque esto significará que quienes nos sucedan, ya no tendrán detrás la sombra de la pandemia", insistió.
Y expresó "que esta nueva conciencia sobre nuestra fragilidad, nos ayude a humanizar la política y a encontrar los acuerdos que nuestro pueblo merece y espera".
Fue un final adecuado para una exposición que comenzó con una muestra de solidaridad y preocupación por la salud del ex gobernador Lifschitz.
Las imágenes curiosas del inicio de Sesiones Ordinarias
"Aquí mismo, al lado mío, debería estar sentado quien me antecediera en el cargo, el presidente de esta Cámara: el ingeniero Miguel Lifschitz, un luchador que le está dando pelea al covid. Quiero desearle, fervientemente, una pronta mejoría y recuperación", lo que arrancó sinceros aplausos en cuanto comenzaba el acto.
"Esta pandemia, entre tanto dolor e incertidumbre, también nos recordó una certeza que siempre tuvimos pero que, en estos tiempos veloces y en los que el individualismo ha ganado terreno, por momentos perdemos de vista. Somos una comunidad, que compartimos una época y un destino que necesitamos sea de progreso para todos y para todas", dijo el jefe del Estado provincial. "Nadie se salva solo. Quiero agradecerles a las santafesinas y santafesinos el enorme esfuerzo que realizan", expresó.