Rubén Sánchez | rsanchez@ellitoral.com
Así lo afirmó el gobernador Miguel Lisfchitz, quien encabezó las celebraciones por el 25 de mayo, que incluyeron el Te Deum y el tradicional desfile.
Rubén Sánchez | rsanchez@ellitoral.com
El gobernador de la provincia Miguel Lifschitz, encabezó esta mañana el acto por el aniversario numero 208 de la Revolución de Mayo, al mismo tiempo que se inauguraron las obras realizadas en la Plaza 25 de Mayo. Junto a él estuvieron el indendente José Corral, el Presidente de la Cámara de Diputados Antonio Bonfatti, y gran parte de su gabinete de ministros, así como concejales de la ciudad.
“Nada ha sido sencillo en nuestra historia. Desde los años de la revolución, Argentina fue surgiendo entre encuentros y desencuentros, ciclos tumultuosos, algunos más incluyentes y otros más excluyentes. Sin embargo en pocos momentos de esa historia logramos consolidar una idea común, un proyecto nacional que de respuestas a las demandas del pueblo, que genere consensos y acuerdos”dijo Lifschitz a los presentes, reflexionando mientras hacía un revisionismo histórico.
“La falta de objetivos claros y metas compartidas genera incertidumbre en el futuro. Pero no podemos mirar la historia como espectadores, conformándonos con mirar los problemas y dificultades. Pensar en resignarnos no es una posibilidad. Es faltar al compromiso con quienes nos precedieron y al porvenir de nuestros hijos”
Llamó a “confiar en la sabiduría de los pueblos para cambiar la realidad y su destino”, y aseveró que “de los que tenemos mayor responsabilidades se requiere una mirada estadista para reconocer con franqueza y sin especulaciones los problemas que afrontamos como sociedad” porque “negarlos o ignorarlos demora las soluciones.”
Para finalizar, y previamente agradeciendo a los “santafesinos anónimos que todos los días en sus trabajos demuestran su vocación para servir a los demás”, el gobernador citó al poeta uruguayo Mario Benedetti, considerando que “Quizá mi única noción de patria sea esta urgencia de decir ‘nosotros’”
Reinauguraron la Plaza 25 de mayo
El último Te Deum
Previamente al acto, el grueso de la presencia oficial, encabezados por Lisfchitz y Corral, asistieron al tradicional Te Deum en la Catedral Metropolitana Todos los Santos. El mismo contó con la peculiaridad de ser la última celebración de este tipo que brindó el ahora ex-arzobispo de la ciudad, monseñor José María Arancedo.
Arancedo brindó una homilía centrándose en cuatro pilares: la fe en Dios, la familia, la educación y el trabajo, considerandolos valores sólidos de la sociedad santafesina y que hay que seguir profundizándolos y promoviéndolos.
En un posterior diálogo con la prensa, Arancedo aseguró sentir “emociones muy especiales” por finalizar su labor como Arzobispo tras 15 años, y estar “muy agradecido” por la experiencia.
También pidió que “Dios y la gente perdone aquellos que quizás uno no haya hecho bien”. Profundizando esta autocrítica, aseveró que “no somos dioses, somos criaturas con debilidades y dudas. Somos frágiles, y hay que vivirlo con la verdad de la humildad.”
Monseñor dejará Santa Fe en los próximos días para radicarse en Buenos Aires, y será reemplazado por monseñor Sergio Fenoy.
Un diagnóstico es un punto de partida ineludible para construir proyectos colectivos de largo plazo. Es indispensable recuperar una noción de patria que nos ampare a todos”
Miguel Lifschitz
Gobernador de Santa Fe