La diputada Marlen Espíndola (UCR - Evolución) advirtió en el recinto que la propuesta de ir al crown down en el concurso preventivo de Vicentin "no es un salvataje, es un desprendimiento forzoso de la empresa hacia el Estado" y se preguntó si el Banco Nación va a poner los 800 millones de dólares que necesita la firma para ponerse en marcha nuevamente.
Espíndola -oriunda de Reconquista- habló ayer después de que el presidente de la Comisión de Seguimiento del caso, Luis Rubeo (PJ) presentara el informe sobre la reunión que habían mantenido con el fiscal federal de Reconquista, Roberto Salum, y de la reunión con el directorio del Banco Nación.
La diputada norteña destacó la importancia que tiene Vicentin para la provincia, subrayó que pese a la convocatoria no ha despedido personal, ha cumplido con las cargas sociales y valoró la tarea del juez de esa ciudad, Fabián Lorenzini, en el trámite concursal que ahora está en manos de la Corte.
Pero además cuestionó que "se quiera intervenir desde la política en la marcha del concurso judicial" cuestionando la tarea de la comisión.
La postura de Espíndola mereció réplicas de Rubén Giustiniani (Igualdad), Fabián Palo Oliver y Carlos Del Frade (Frente Social y Popular) los que advirtieron que la propuesta de Vicentin en el concurso no contempla la situación de las plantas del norte y ratificaron que Banco Nación no acepta dicha propuesta.
Antes, Rubeo había hecho un pedido público a la Corte para que resuelva el tema del avocamiento del concurso recordando que el 31 de diciembre vencen los contratos de fasón que tiene la firma.