Ivana Fux
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Tres sujetos fueron detenidos cuando quisieron cometer un asalto. Uno de ellos sorprendió cuando reveló que su arma había sido alquilada.
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La detención de un sujeto hoy en barrio Los Troncos de esta ciudad dejó en evidencia cómo llegan, muchas veces, las armas oficiales de la policía a manos de los delincuentes. Según relató a El Litoral este medio día el secretario de Control de la fuerza de seguridad, David Reniero, todo surgió a partir de un procedimiento policial que se realizó esta mañana en barrio Los Troncos, tras un intento de robo a una mujer en la vía pública.
“A partir de ese hecho, las fuerzas detuvieron a tres sujetos y se constata que uno de ellos estaba armado con un arma reglamentaria. Cuando se lo consulta acerca de ello, responde que el arma se la alquilaba un policía en ejercicio”, relató. Reniero confirmó que administrativamente, el Ministerio de Seguridad pudo constatar, en primer lugar, que el arma encontrada, efectivamente pertenecía a un efectivo policial. Y en segunda instancia, dijo que también pudieron corroborar que dicho agente no había realizado “denuncia por extravío ni robo” de su arma. “En consecuencia, el uniformado ya fue detenido”, dijo Reniero al cierre de la presente edición.
Práctica “habitual”
Por la mañana y en diálogo con la prensa, Reniero ya había admitido la existencia del hecho. “Algo que se siempre se suponía que podía pasar, que era el alquiler de las armas oficiales de las fuerzas por parte de los delincuentes, se estaría dando en este caso. Por eso vamos a investigar primero, y luego a aplicar las sanciones para ser en la pena lo más duro posible. En caso de ser comprobada la cuestión, el policía será separado de la fuerza”, advertía.
- ¿Qué fue lo que dijo el sujeto detenido, concretamente? -preguntó El Litoral.
- Lo que dijo era que había un alquiler; que había un policía que le cobraba un cierto dinero por alquilar el arma, y en este caso que hasta (el policía) le había aumentado ese ‘canon’, con lo cual el caso es de extrema gravedad porque se trata de un policía nuevo también en las fuerzas.
- ¿El arma efectivamente la tenía la persona detenida? -insistió este diario.
- Exactamente. Era un arma reglamentaria. Por eso fue que se inicia toda la investigación.
- ¿Se pudo comprobar que el arma pertenecía, efectivamente, a ese policía?
- Sí. La primera cuestión e información que surge es ésa, que el arma efectivamente era un arma reglamentaria y pertenecía a ese policía. Ahora hay que investigar y chequear todo esto porque tiene que ver con un proceso judicial, por un lado; y con el proceso nuestro interno vinculado con todo lo administrativo sobre el policía.
- ¿Sirve para esto el Registro Balístico que se estableció hace poco para todos los efectivos que ingresan a la fuerza?
- Exactamente. Desde 2014 hay un ADN del arma y en este caso eso sirve porque ya tenemos entre las que se habían hecho desde ese año hasta las nuevas unas siete mil armas peritadas, lo cual en un contexto de veinte mil policías es un buen número.
¿Cuánto?
Según fuentes oficiales consultadas por El Litoral, los montos que pagan los delincuentes a policías por el “alquiler” de las armas pueden ser diversos, pero estiman que llegan “hasta mil pesos por uso”. Según se sabe, los efectivos que incurren en esa práctica “alquilan su arma en los días de descanso”.
Entregan armas a Nación
El ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, entregó esta mañana casi tres mil armas en desuso que pertenecían a la policía, a la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC - ex Renar) para su posterior destrucción.
En diálogo con la prensa, Pullaro admitió que la provincia se ha ceñido ahora a estos protocolos en el afán de evitar situaciones inexplicables como las de comienzos de año, cuando armas entregadas al Poder Judicial que debían ser destruidas se encontraron posteriormente en manos de delincuentes.
“Estamos convencidos de que tenemos que trabajar fuertemente en protocolos para que esas situaciones que lamentamos tanto el año pasado no se repitan. Por eso agradecemos al gobierno nacional que vino a colaborar para que estas cosas no vuelvan a suceder. Trabajar juntos significó estar en contacto permanente -dijo-. Tiempo atrás empezamos primero cargando estas armas para que no exista ninguna posibilidad de que pasen al circuito ilegal. En segundo lugar se procedió al precinto y etiquetado, y finalmente se dará la destrucción dentro de algunos días, conjuntamente con otras armas que se están recolectando”. Pullaro dijo que de acuerdo con la información que suministró Nación, “serían unas 25 mil armas en total. Eso significa que estamos teniendo una política de control de armas que no se tuvo durante mucho tiempo”, destacó. Al acto asistió Natalia Gambaro, directora ejecutiva de ANMAC.