El presidente Alberto Fernández advirtió este viernes que no tolerará una "rebelión", al cuestionar a quienes rechazan las medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo para intentar frenar la segunda ola de coronavirus.
El presidente Alberto Fernández advirtió este viernes que no tolerará una "rebelión", al cuestionar a quienes rechazan las medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo para intentar frenar la segunda ola de coronavirus.
El jefe de Estado sostuvo que "las leyes se hacen para ser cumplidas", por lo que enfatizó: "A los que no les gustan, que recurran a la Justicia".
"A mí, la rebelión no. En un Estado de derecho las leyes se cumplen. No estoy para tolerar la indisciplina de muchos restaurantes colmados de gente", recalcó Fernández.
En una rueda de prensa en la que se mostró con tono calmado pero lanzó duras críticas a la oposición, el Presidente señaló que "seguirá asistiendo" a los comercios gastronómicos que resulten afectados económicamente por las restricciones que, por el momento, rigen hasta el 30 de abril.
"El que está en desacuerdo que vaya a la Justicia y consiga que un juez diga que lo que hice está mal", insistió el mandatario nacional.
Y agregó: "Estoy para ayudarlos en la emergencia en las que estamos viviendo, pero no estoy para tolerarlos que hagan lo que quieran, la indisciplina que he visto en muchos restaurantes colmando de gente".
El Presidente se expresó así al brindar una conferencia en la Quinta de Olivos, poco después de mantener una reunión a solas con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en medio de una tensión extrema, ya que la Ciudad irá a la Corte Suprema para rechazar la suspensión de las clases.
Más allá de la resistencia del dirigente de Juntos por el Cambio, Fernández ratificó sus medidas, en particular, la decisión de suspender las clases presenciales hasta el próximo 30 de abril en la zona metropolitana.
Entre las medidas que habían despertado críticas también está la restricción nocturna a la circulación entre las 20:00 y las 6:00.