Seguridad: denuncias cruzadas por el caso Morel, audios y renuncias en suspenso
Se reunieron Perotti, Rimoldi y Corach en Rosario. Se esperaban definiciones después de la bochornosa exposición de la subsecretaria de Logística en Diputados. Pero no habrá desplazamientos en lo inmediato.
Seguridad: denuncias cruzadas por el caso Morel, audios y renuncias en suspenso
"Sin definiciones en lo inmediato". Así terminó la reunión que este jueves por la noche mantuvieron en Rosario el gobernador Omar Perotti y los ministros de Seguridad, Rubén Rimoldi; y de Gestión, Marcos Corach. Era el corolario de una situación política que venía siendo de controversia y escaló en tensión después de la bochornosa exposición de Ana Morel en la Cámara de Diputados. La crisis interna que generó en el seno del Poder Ejecutivo el desafortunado paso por el recinto de la subsecretaria de Logística del Ministerio de Seguridad, hacía pensar que la de anoche sería una suerte de reunión cumbre en la que se definirían renuncias o ratificaciones. Pero no se tomó ninguna decisión que vaya a tener impacto en lo inmediato.
El miércoles, cuando la actividad parlamentaria había finalizado, Rimoldi intentó buscar directamente en la Casa de Gobierno la definición que tampoco se adoptó ayer. El ministro fue a plantear que era imprescindible una decisión política que descomprimiese la situación en su cartera. El desenlace parecía inminente; o se iba de su cargo Ana Morel, o se iba Rimoldi. O ambos. Ese día lo contuvieron otros funcionarios. Con Perotti recién habló este jueves. El encuentro terminó sin una decisión concreta para anunciar, aunque crecen las chances de que en el corto plazo sea Morel quien deba dejar su cargo.
Escándalo
Morel debía explicar el miércoles en la Cámara de Diputados cómo se habían ejecutado los 3.380 millones de pesos que el Ministerio de Seguridad tenía asignado a partir de la vigencia de la Ley de Emergencia. Pero la vehemencia y prepotencia de la funcionaria dificultaron hasta la cuestión de forma. Los legisladores se sintieron "ofendidos en su inteligencia" y en reiteradas oportunidades, se quejaron del "manejo irrespetuoso". Hubo gritos, chicanas y referentes tanto de la oposición como del oficialismo que abandonaron sus bancas. El abordaje de la cuestión de fondo tampoco fue exitoso. La solidez que no había tenido Rimoldi ante los integrantes de la Comisión de Seguimiento para rendir los gastos, tampoco la tuvo Morel; repitió insistentemente argumentos que no sumaron claridad y confundió datos. Se escudó en ser una funcionaria técnica pero a minutos del inicio de su exposición, le reprochó a los diputados con una arenga política, que la cámara "ya había comenzado la campaña".
Rimoldi evitó ratificar a Morel en público, cuando Maximiliano Pullaro le preguntó desde su banca si después de la penosa sesión, le pediría la renuncia. "Lo vamos a analizar con el gobernador", contestó. La respuesta sonó a desautorización, pero es otra la interpretación si se repara en las desafiantes declaraciones a la prensa que tuvo la funcionaria cuando se retiró del recinto. "Si no sirvo, me tienen que echar. Jamás me pidieron la renuncia y bajo ningún punto de vista tengo previsto presentarla. Por qué le voy a dar entidad a la oposición ¿¡Estamos todos locos?!", se preguntó para responder a la consulta de El Litoral.
Si Rimoldi tiene que hablar con Perotti para definir el futuro de su subordinada – aun cuando públicamente su respuesta haya sonado a desautorización-, es porque carece de poder político para desplazarla. Y ése es el verdadero problema de fondo; quién conduce el Ministerio de Seguridad.
Morel fue por más, e implícitamente aludió en la entrevista a la otra situación controvertida que se había generada semanas atrás cuando, precisamente por no participar con Rimoldi de la reunión con la comisión de seguimiento, le hicieron llegar un pedido de renuncia que se desvaneció cuatro horas después. "Como funcionaria política, mi renuncia está a disposición del gobernador desde el 15 de diciembre de 2021. Pero a mí nadie, ni el ministro, ni el gobernador ni ningún otro ministro que no debiera bajo ningún punto de vista meterse en mi gestión, me pidieron la renuncia", contestó ante otra consulta de este diario. El "otro ministro que no debiera meterse en mi gestión" es Marcos Corach, quien había verbalizado semanas atrás – y así, cumplido una instrucción emanada del propio Poder Ejecutivo- el pedido a Morel para que dejara su cargo.
Denuncias y el audio
La situación, que debiera tener como eje el grado de eficiencia con el que se usaron los fondos para seguridad, deja expuesto un ministerio con serios problemas internos y denuncias judiciales cruzadas. Pesan sobre Morel las que advierten sobre maltrato laboral y hasta han motivado que el personal del Ministerio a través de una decisión de UPCN se declarase en estado de asamblea permanente. Y encuentra otra presentada en el fuero penal por un familiar directo de la subsecretaria – personal también del Ministerio- contra el Coordinador de Gabinete del Ministerio, Miguel Portillo.
Morel acredita una extensa carrera administrativa en el estado provincial; había sido Logística de Roberto Rosúa durante la gestión de Jorge Obeid, cuando la institución policial dependía todavía del Ministerio de Gobierno. Ese antecedente le valió la recomendación de Walter Agosto a Perotti para que ocupase el estratégico cargo de Logística, en esta nueva etapa, del Ministerio de Seguridad. Pero como ministro asumió Sain. Morel permaneció menos de cuatro meses en el cargo, y por pedido de Sain, fue desplazada. Volvió, según ella misma precisó, el 15 de diciembre de 2021. Y fue por pedido expreso de Jorge Lagna, sucesor de Sain. Para entonces, su relación con Agosto ya estaba desgastada.
Consultada por este diario, Morel evitó hablar de Sain y de lo que le representó ese corrimiento en términos personales y profesionales. Pero sin que la pregunta de El Litoral aludiese al tema, Morel incorporó en su repuesta la polémica sobre los audios de Sain. Es que uno de los difundidos, de hecho, la menciona. "Hay que buscar un caso, tipo Ana Morel; detenerla y ahí producir el escándalo", se le escucha decir a Sain. El Litoral la había consultado a Morel sobre por qué no formó parte de la gestión de Sain; Morel respondió con una alusión deliberada a los audios.
"No voy a hacer declaraciones sobre ello porque hay audios que son públicos. Hay audios, sí, y son públicos pero no voy a referirme al Dr. Sain. A mí no me pidieron la renuncia - insistió-. Miren, el audio en el que él (Sain) expresa que me querían hacer una causa, un escándalo… En realidad, yo soy directamente damnificada… ¿Y yo dije algo sobre eso? No, porque yo no hablo con los medios".
Como quien necesitara recordar algunos elementos para advertir a quien quiera escucharla que su desempeño no ha sido lo suficientemente valorado, Morel dejó en claro que se encuentra en la condición de víctima por los dichos de quien prefirió echarla del equipo. Pero aclaró que sobre eso, prefiere callar.