Sábado 26.3.2022
/Última actualización 6:16
Santiago Cafiero mantendrá en su cargo a Pablo Tettamanti, secretario de Relaciones Exteriores, pese a desobedecer su orden directa respecto a la posición que debería tener Argentina cuando se tratara la guerra de Rusia contra Ucrania en la Asamblea General de las Naciones Unidas, según publicó Infobae.
El canciller conoce la profundidad de la crisis que protagonizan Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, y en este sentido, eligió mantener en el cargo al secretario de Relaciones Exteriores para evitar que el conflicto político interno alcance un mayor grado de intensidad.
Tettamanti responde a las instrucciones de Cristina Fernández de Kirchner, y consideró que no era apropiado condenar la guerra ilegal de Vladimir Putin en la ONU. En este contexto, cuando Cafiero ya había abandonado el Palacio de San Martín, envió un cable "secreto" y "muy urgente" a la embajadora, la santafesina, María del Carmen Squeff, representante Permanente ante ese organismo multilateral, sostiene la nota firmada por Román Lejtman y Eduardo Menegazzi.
Ese cable respondía más a la agenda diplomática de CFK que a la mirada que tiene Alberto Fernández sobre la invasión de Rusia a Ucrania. El Presidente considera que hay que condenar las acciones ilegales del Kremlin, cuando el mundo enfrenta un conflicto que puede desembocar en la Tercera Guerra Mundial.
"En tanto el proyecto presentado por Sudáfrica mantenga su redacción actual y sea sometido a votación, la DA (delegada argentina) votará a favor del mismo, expresando que se considera que el proyecto apoya los principios generales del derecho internacional humanitario, sin desmedro de los aspectos y circunstancias destacadas en el proyecto de resolución presentado por Francia y México", dice el texto del cable que envió Tettamanti.
La resolución propuesta por Sudáfrica ante el organismo internacional no condenaba a Rusia, y el canciller rechazó -una y otra vez- los argumentos de Tettamanti, que exigía apoyar la resolución presentada por Sudáfrica y avalada por el embajador ruso ante la ONU, Vasily Nebenzya. La iniciativa sudafricana refería a la necesidad de ayuda humanitaria, pero sin condenar a la invasión ilegal ejecutada por Vladimir Putin, ni mencionar a Rusia como país agresor de Ucrania, desde el 24 de febrero de este 2022.
Argentina, en consonancia con la postura que ya había votado el 2 de marzo en la ONU, tenía decidido copatrocinar y votar el proyecto de Francia y México, que también apuntaba a la cuestión humanitaria pero que condenaba a Rusia y llamaba a un cese inmediato de las hostilidades entre rusos y ucranianos.
Cuando la discusión parecía terminada, y había quedado establecida la posición oficial que asumiría la embajadora en la ONU, Tettamanti decidió desobedecer las instrucciones directas de Cafiero.
Y remitió el cable a la embajadora Squeff.
La representante permanente en la ONU leyó el cable enviado por Tettamanti y llamó al canciller. Cafiero no podía creer lo que contaba Squeff desde Nueva York, e inmediatamente ordenó que se anulara la instrucción irregular enviada por el secretario de Relaciones Exteriores.
Tettamanti atendió la llamada urgente del canciller, mantuvo una larga discusión con Cafiero, y a continuación avanzó contra Squeff, a quien le recordó que había llegado a la ONU por su alineamiento con la vicepresidente.
Sin embargo, y frente a la orden vertical del ministro de Relaciones Exteriores, al secretario no le quedó otra alternativa que anular su cable y escribir uno nuevo con las instrucciones de Cafiero.
Alberto Fernández ya estaba al tanto de la operación clandestina que intentó ejecutar el alfil de CFK en el Palacio San Martín.
A las 9.58 del miércoles 23 de marzo, doce horas después de iniciar su maniobra a espaldas de la Cancillería, el propio Tettamanti envió otro cable "reservado" y "urgente" rectificando su posición.
"En relación al proyecto presentado por Sudáfrica rectificase lo mencionado en Punto IV de CA REF A). De llegar este texto a ser sometido a votación, la DA (delegada argentina) lo hará en abstención, aclarando la posición para indicar se considera que ese proyecto apoya los principios generales del derecho internacional humanitario pero que la posición argentina queda expresada en la que fuera copatrocinada por nuestro país", escribió Tettamanti por orden de Cafiero.
En la Asamblea General de la ONU, ocurrida el miércoles pasado, 140 naciones apoyaron el proyecto presentado por Francia y México, 5 se opusieron (Rusia, Bielorrusia, Corea del Norte, Eritrea y Siria), y 38 estados miembros se abstuvieron.
Esta noticia publicada en exclusiva por Infobae causó una sucesión de efectos políticos. En la Cámara de Diputados, el bloque de la Coalición Cívica -el partido de Elisa Carrió- pidió citar al ministro para que dé explicaciones sobre la posición argentina en relación a la invasión rusa a Ucrania y cuestionó en duros términos a Tettamanti.
"El accionar del Secretario constituye una deshonra al puesto que ocupa y reviste una gravedad inusitada en el contexto geopolítico actual y que puede derivar en graves consecuencias para nuestro país y la región", sostienen los diputados de la CC en los fundamentos de la iniciativa.
Mientras tanto, la Cancillería aseguró que se trataba de información "sesgada" y abrió una investigación interna para descubrir cómo se filtraron los cables secretos que confirman las diferencias entre el Canciller y el secretario que responde a CFK.
En el Palacio San Martin reconocen que, en otro contexto político, Tettamanti ya estaría vaciando los cajones de su escritorio.