A los 84 años, el abogado laboralista Héctor Pedro Recalde encabeza la lista 2 'Compromiso con la Constitución' para las elecciones de cuatro integrantes de la abogacía, para los próximos cuatro años en el Consejo de la Magistratura. En la anterior composición de 13 miembros, Recalde estuvo dos años representando a la Cámara de Diputados.
- ¿Cuál es su aspiración para llegar al Consejo de la Magistratura por los abogados?
- Ser abogado de los abogados. Mi especialidad es el derecho laboral, toda mi vida defendí a trabajadores pero a los abogados quién los defiende. Es un buen rol para ver qué pasa con la actividad cotidiana de los abogados, que puedo mejorar desde el Consejo de la Magistratura lo que tiene que ver con la administración de justicia y ver qué jueces merecen ser sostenidos en el cargo y quienes puede ser desalojados por razones justificadas y probadas. Para el caso de la expulsión rigen los principios básicos republicanos y democráticos: presunción de inocencia, defensa del juicio y el debido proceso para el juzgamiento.
- ¿Qué opina del actual formato del Consejo?. Usted integró el de 13 integrantes
- Tengo mis objeciones, una de ellas es que el presidente de la Corte sea presidente del Consejo. Y discutir el número, podrá ser 20, creo que pueden ser más, no menos. Me gustaría una Corte de 25 miembros que merecería un Consejo de la Magistratura que siguiera ese lineamiento. La especialización es importante. Respaldo el proyecto de los senadores oficialistas. Estuve en el Consejo, hice una experiencia corta; es casi seguro que estaré, vamos a hacer una buena elección. Estoy recorriendo el país, me asombra que no solo quienes tienen una ideología como la mía sino muchos independientes ven bien mi acceso al Consejo y lo quiero justificar cuando llegue.
- Santa Fe tiene un serio problema de mapa judicial y de vacantes de la justicia federal
- Esto tiene que ver con lo que será mi actitud: Dios tiene domicilio constituido en CABA y quiero que el Consejo sea federal, plantearé que las reuniones se hagan en forma regional para salir de Capital y con mucha publicidad. Que todo sea filmado y expuesto en un canal propio, recursos hay. Que el Consejo no sea una institución ajena al pueblo, distinta y que el pueblo vea que es importante para las personas. Las personas deben ver quienes son las personas que la pueden juzgar en lo penal, comercial, en familia.
- El interior tiene muchas necesidades en materia de justicia federal
- Por eso hablo de regionalización, después veremos qué regiones hacemos porque se necesita un trabajo interdisciplinario para determinarlas y dónde se establezcan. Debemos discutirlo ampliamente
- Designar a un juez implica darle un mandato extenso en el tiempo
- Un juez es eterno. La selección es un proceso muy serio, yo estuve en esa comisión, fui presidente. Es un trabajo muy serio, muy difícil y profundo. Se designa a una persona que va a juzgar a la gente.
- Para designarlos se necesitan acuerdos
- Por supuesto, pero acuerdos institucionales, no políticos. No hay otra posibilidad que acordar para conseguir mayorías. Para que sea efectivo hay que constituir mayorías, en un Consejo integrado por personas que tienen distintos pensamientos, orígenes y pertenencias. Los laboralistas sabemos acordar, negociar, es nuestra rutina.
- Es una lista oficialista la de ustedes
- Se puede llamar lista del oficialismo. No soy de La Cámpora -mi hijo está allí-, soy peronista. Estuve cuatro veces, en Madrid, con el general Perón en la década del 60. Soy peronista en el más profundo sentido de la palabra y de la ideología. Estar cuatro días con el general Perón es un recuerdo muy profundo para mí. Hasta ese momento era un peronista racional, con el carisma del general me convertí además en un peronista emocional.
El Consejo es un lugar de debate intenso. Modificaría la ley, no creo prudente que el presidente de la Corte presida el Consejo de la Magistratura, lo dijo con respeto al doctor (Horacio) Rosatti más allá de que también tengo un cuestionamiento a él y a (Carlos) Rosenkratz porque entraron nombrados por un decreto del Poder Ejecutivo, en comisión. Después se compuso el tema pero incluso jurídicamente tiene sus cuestionamientos. ¿No era de nulidad absoluta la designación que después no debió convalidarse?. Son interrogantes para polemizar jurídicamente.
Lista
Compromiso con la Constitución lleva como miembros titulares a Héctor Recalde, Adriana Coliqueo, Horacio Erbes y Noemí Isasmendi. Los suplentes son César Grau, Itatí Demarchi, Marcelo Alvarez y Natalia Salvo. Grau, rosarino, acompañó a Recalde en su visita a esta capital y recordó las cuatro funciones del Consejo: selección de magistrados, inicia el proceso disciplinario para jueces , administrar recursos del Poder Judicial y allí hay colisión con la Corte y elabora los reglamentos, entre ellos el Mapa Judicial que es de 1904 la última gran modificación cuando se crearon las cámaras en el interior.
Uno de los objetivos es modificar el mapa y recuerda la media sanción del Senado al proyecto de ley que, entre otras cosas, crea la Cámara Federal de Santa Fe que evitaría que la apelación del juzgado de Reconquista sea Resistencia, Chaco, por ejemplo.
Marca las falencias del mapa y una serie de provincias sin tribunales federales de alzada "que atentan contra el acceso a la justicia" y advierte que el 85% del presupuesto de la justicia federal se queda en CABA y el conurbano bonaerense-
Grau marca dos propósitos de la lista: trabajar para mejorar la imagen del Poder Judicial, hoy muy atrás en la consideración ciudadana y revertir el proceso endogámico para la designación de magistrados. "Hay que revertir esto y poner políticas activas -así como fue de género- para la incorporación de abogados de la profesión al Poder Judicial", anuncia.
"Soy reformista"
A la hora de charlar con Recalde sobre derecho laboral, el abogado dice ser reformista en la materia "aunque cuando algunas hablan de reforma laboral tiemblo. Soy reformista en el sentido de reformar en serio, sin ideologismos y sin falsos prejuicio. Por ejemplo, la jornada laboral que tiene casi cien años de vigencia. Está probado científicamente que una jornada disminuida tiene dos efectos: aumenta la productividad y disminuye los accidentes de trabajo. Mire si deberían estar interesados los empresarios en disminuir la jornada, bajaría el costo. Tenemos poco más de 6 millones de trabajadores en relación de dependencia en la actividad privada. Si dejaran de trabajar una hora, no creamos trabajo, empleo, pero si podemos distribuir empleo entre 900.000 hombres o mujeres que no lo tienen. Aumenta la productividad, disminuyen los accidentes deberían ser aliados los empresarios. Fui doce años diputado nacional, presidente de la Comisión y con timidez y exceso de prudencia quise bajar la jornada de trabajo de 48 a 45 horas que en realidad es mucha gente la que trabaje 9 horas por cinco jornadas y no lo logré. En el mundo hay jornadas de 40 horas semanas en los principales países desarrollados, seguimos con 48 horas".