A pesar de los incrementos registrados por el Icasfe en marzo y abril, técnicamente la actividad económica provincial ya ha iniciado una nueva fase de contracción desde el cuarto trimestre de 2011. El punto de giro ha sido fechado en octubre de 2011, dando término a una expansión económica de 26 meses de duración, con una amplitud total del 11,5%.
A diferencia de la recesión 2008/2009 -de corte fundamentalmente internacional-, la recesión actual encuentra sus principales causas ligadas a cuestiones domésticas: la inflación desde 2007, el atraso cambiario con consecuente aparición de la cotización doble del tipo de cambio de la moneda nacional con el dólar, y persistentes regulaciones sectoriales. Esto ha redundado en menor
competitividad internacional del sector exportador (principalmente el industrial), lo que sumado a la falta de previsibilidad, implicaron un fuerte desincentivo a la inversión.
Tal como se observa en los inicios de recesiones anteriores, la variación interanual del Icasfe se mantiene en terreno positivo pero marcando la fuerte disminución del ritmo de crecimiento en la actividad económica provincial.