Las redes socialistas y especialmente Twitter pasaron a ser el ámbito de la discusión política santafesina y allí dos son los dos integrantes del gabinete de Omar Perotti que dan la discusión que las bancadas legislativas no dan, especialmente en Diputados donde la orfandad oficialista es alarmante.
El ministro de Gestión Pública, Marcos Corach, y el jefe de asesores, Rubén Michlig, son los que permanentemente están atentos a críticas opositoras y cruzan a dirigentes opositores especialmente aquellos que ya están en campaña electoral.
Twitter reemplaza en este caso al debate legislativo porque en Senado llega al recinto todo lo acordado y se plantean temas distritales como quejas. En cambio, en Diputados las voces opositoras dominan el recinto ante el desinterés de los justicialistas en defender la gestión de la cual muchos se sienten lejanos.
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