Jueves 17.3.2022
/Última actualización 22:45
En el momento de las manifestaciones, cuando generalmente se habla sobre aniversarios o temas de candente actualidad, el senador por San Lorenzo Armando Traferri habló sobre las revelaciones que, sobre su persona, contiene la acusación contra una alta funcionaria del Organismo de Investigaciones del Ministerio Público de la Acusación.
Un Tribunal de Disciplina en el Poder Judicial deberá decidir qué hacer con la Jefa del Departamento de Inteligencia Criminal Zona Sur del OI del MPA, Débora Cotichini, una psicóloga acusada por la auditora del órgano de la Acusación, Cecilia Vranicich, de haber enviado información y copias de escuchas judiciales al Poder Ejecutivo, cuando Marcelo Sain era también su jefe en uso de licencia además del ministro de Seguridad de la Provincia. Como se recordará, Sain fue tiempo después apartado por la Legislatura provincial de su cargo como jefe del Organismo de Investigaciones del MPA.
En un discurso a sus pares, Traferri sostuvo que la acusación contra Cotichini (proveniente del propio MPA) lo habilita a que como víctima de espionaje ilegal sea parte en la causa por ese motivo, a cargo de los fiscales Jiménez y Hernández, conocida por los voluminosos sacos con papeles que fueron salvados de su destrucción y forman parte de la investigación respecto de la existencia de centenares de "perfiles" sobre dirigentes políticos, empresarios de medios, de las finanzas y periodistas que se encontraron en el Ministerio de Seguridad.
Traferri leyó tramos de la acusación de Vranicich contra Cotichini, de un documento que contiene detalles notable: una de las pruebas de que la jefa de Inteligencia Criminal Sur recibía órdenes del entonces ministro Sain proviene de un pedido en un grupo de whatsapp de trabajo del Organismo de Investigaciones, también los testimonios (y las comunicaciones por ese medio) con un técnico al que le solicitó que cambie el formato de un audio para que Sain pueda abrirlo con mayor facilidad.
El texto firmado por la auditoría del MPA llegó a manos de Traferri porque el abogado defensor de Cotichini había pedido que el senador no sea uno de los integrantes de ese Tribunal de Disciplina, pese a su designación por el Senado y que otro legislador lo sustituya. Obviamente el representante pidió más explicaciones y entre ellas se le comunicó oficialmente que conversaciones suyas (algunas sobre política partidaria interna del justicialismo) fueron a parar al celular del ministro.
A esta altura, parece un detalle menor si Traferri integrará o no el Tribunal de Disciplina Fiscal, que encabeza el titular del MPA, el fiscal general Jorge Baclini.
El informe de la Auditoría del MPA que pide remover de su cargo y preventivamente dejar sin salario a Cotichini tiene más de 70 páginas y abundante documentación probatoria: en una decena de páginas se habla de las escuchas a Traferri (en el marco de una causa judicial) que van al Poder Ejecutivo y refieren a cómo el senador ve la situación política o la gestión de gobierno.