Luis Rodrigo
Aguas Santafesinas propondrá una suba de entre el 33 y 40%. El incremento operará en 2017.
Luis Rodrigo
La empresa Aguas Santafesinas SA (ASSA) define un pedido de aumento de tarifas que, de acuerdo a lo manifestado en declaraciones radiales por el ministro de Infraestructura y Transporte, José Garibay, tendrá como base de cálculo un índice de inflación de entre el 33 y 40 por ciento.
Esta mañana, Garibay admitió que el tema está en estudio y explicó que la empresa estatal producirá “un informe” respecto de qué aumento necesitan ambos servicios, bajo la premisa de poder sostenerlos sin el auxilio del Estado para sostenerlos.
El dato estará “en los próximos días”, dijo el funcionario que además comentó que había ordenado al directorio de ASSA trabajar en un presupuesto interno que también fije como prioridad una baja en el gasto.
Las declaraciones de Garibay a la prensa esta mañana en la apertura de sobres de una licitación en San José del Rincón se sumaron a otras expresiones que van en la misma dirección.
Ayer, en la ciudad de Rosario el presidente del directorio de Aguas Sebastián Bonet dijo que el déficit estimado para todo el ejercicio 2016 suma $ 600 millones de pesos.
El titular de ASSA habló de la devaluación de la moneda frente al dólar, en una actividad que requiere de gastos en agentes químicos que siguen las variaciones del billete estadounidense, del impacto de la inflación en otros costos y de la actualización de los salarios de la empresa que presta sus servicios en 15 distritos de la provincia.
La energía, al triple
“Nosotros hemos atravesado este año 2016. El año pasado se hicieron audiencias públicas donde se terminó actualizando la tarifa para este año en función del año 2014, atravesamos todo el 2015 y en diciembre el Estado nacional, dentro de las medidas económicas, provocó una devaluación en la moneda del orden del 60 %. Nosotros tenemos muchísimos insumos, químicos, bombas y motores dolarizados y en marzo tuvimos un segundo fuerte impacto. Triplicamos el costo de la energía eléctrica, lo que afectó de lleno a la compañía”, dijo el funcionario.
“Estamos trabajando con las proyecciones que el Estado nacional está haciendo para la inflación, ver cuáles son las políticas generales para la macroeconomía, tratando de hacer una proyección de gastos en esa misma proporción, tratando de adaptarnos a esa realidad”, añadió.
“No hemos evaluado todavía en cuánto debería actualizarse la tarifa”, indicó Bonet quien explicó que el proyecto de Ley de Presupuesto 2017 parte de la base de que habrá un aumento para sostener las tarifas con menos subsidios estatales.
Oportunidad
En el ámbito del Ministerio de Infraestructura funciona una nueva comisión, cuyo propósito es que los aumentos de las tarifas de los servicios sanitarios prestados por ASSA no sean una sorpresa para las tras partes que deben entender en el tema.
La Comisión de Regulación Tarifaria cuenta con funcionarios de ese ministerio, de la empresa y del Ente Regulador de los Servicios Sanitarios.
Allí se siguen dos variables desde que se puso en marcha: cuál es la recaudación de la empresa y cuál debería ser para que no necesite del auxilio del Estado. Pero también se observa una tercera, apuntada por las gerencias del Ente de Control: qué acciones lleva a cabo la empresa para ser más eficiente.
La mesa que discute cómo marcha la sociedad anónima en manos del Estado discute cómo modificar los cuadros tarifarios para establecer eventuales subsidios cruzados entre los usuarios, no sólo respecto de su actualización.
Unos y otros saben que los costos políticos a pagar por el aumento deben abonarse durante 2016 o como mucho el verano del año próximo. En 2017 hay elecciones.
En 2016 ya se aplicó un 48 %
A fines de enero, luego de su discusión en audiencias públicas convocadas por el Ente Regulador de los Servicios Sanitarios, el gobierno santafesino dispuso un aumento en los servicios de agua potable y cloacas provistos por la empresa ASSA, cuyo promedio fue del 48 % a lo largo de 2016.
La suba de la boleta de Aguas Santafesinas fue desdoblada y no acumulativa: del 26 % a partir del segundo bimestre del corriente año, otro 11% desde el tercer bimestre y un 11 % más en el cuarto.
Por otra parte, el aumento de tarifas anterior al vigente tuvo lugar en septiembre de 2014. En aquella oportunidad, la Casa Gris incrementó las tarifas del 26 al 30 %, con un pequeño recargo entre los clientes que contaban con medidores domiciliarios.
Caso testigo para la micromedición
La ciudad de Capitán Bermúdez (en el departamento San Lorenzo) tiene a la totalidad de los usuarios del servicio de agua potable con micromedidores instalados.
No es obviamente la única localidad de la provincia de Santa Fe que presenta esa situación, pero sí es el único de los quince distritos servidos por Aguas Santafesinas SA que posee esa cualidad.
El reclamo por la micromedición del servicio lleva décadas en la provincia de Santa Fe porque supone la posibilidad de medir con más facilidad si la empresa que potabiliza y distribuye agua potable, y colecta líquidos cloacales hasta su disposición final, es o no eficiente.
En cada audiencia pública, los usuarios advierten que el conjunto de las boletas paga las fugas de agua en las calles.
“Nosotros tenemos un plan en elaboración que comprende la colocación de más de 300 mil micromedidores en los próximos años en toda el área de concesión. Creemos que hay que avanzar hacia allí porque uno de los pilares es que la gente consuma todo lo que necesita sin derrochar”, señaló el titular de la empresa ASSA, Sebastián Bonet.
600 millones
es el déficit de Aguas Santafesinas durante el corriente año, aún con el aumento dispuesto en enero pasado