Personal de la Guardia Rural Los Pumas logró resolver dos casos de abigeato ocurridos días atrás en el norte de la provincia.
Ambos casos ocurrieron en el departamento Vera. En el primero de ellos desconocidos robaron 26 animales en Fortín Olmos. En el otro, el encargado de un campo vendió sin consentimiento de sus patrones 4 vacunos a una carnicería de Garabato.
En el caso de Fortín Olmos un empleado rural había denunciado la falta de un total de 26 vacunos del campo que cuida. El hombre, de apellido Ávalos, expuso ante los policías que notó la irregularidad al recorrer la propiedad que administra en el oeste del departamento Vera.
La policía rural inició allí tareas investigativas que permitieron seguir el rastro hasta la localidad de Villa Ángela (provincia del Chaco), donde sus pares informaron que el pasado 2 de julio habían tomado declaración a un encargado de control del abasto de esa localidad, quien manifestó que habrían ingresado al frigorífico de esa ciudad 7 semovientes sin ningún tipo de documentación.
Ante esto, Los Pumas peritaron los cueros de los animales faenados, hallando en la mayoría de ellos la marca del denunciante. Además, se encontraron en ese matadero otros 2 bovinos de los robados en Fortín Olmos. En tanto, 6 de estos animales fueron hallados a la vera de una ruta vecinal a unos 30 kilómetros de Los Amores.
Carne ilegal
Otro de los casos que requirió la intervención de los agentes de la Dirección General de Seguridad Rural estuvo relacionado con un hecho delictivo ocurrido en el establecimiento “Los Baguales”, de Fortín Olmos, desde el que se habría producido trasladado de carne vacuna sin el permiso de sus propietarios.
Al presentarse personal policial en el lugar, el encargado de la firma manifestó que se había producido tal movimiento y que se trataba de cuatro animales pertenecientes a la firma El Abuelo S.A”.
Esta persona confesó que tal movimiento lo había realizado sin el consentimiento de los propietarios y que los animales fueron destinados a una carnicería de Garabato, propiedad de una persona de ese pueblo de apellido Pereyra.
Seguidamente, el comerciante involucrado admitió haber adquirido los cuatro animales, los que fueron faenados y dispuestos a la venta en su comercio, motivo por el cual los uniformados secuestraron del producto.
El juez de Instrucción de Vera, Octavio Silva, ordenó que a todos involucrados -siete personas domiciliadas en Garabato- se les tome una exposición orientativa y se les inicie causa por el delito de Abigeato Calificado.
De ellos pudo saberse que son un padre y su hijo de apellido Aquino, el primero funcionario escolar de la escuela primaria de Garabato, la cual proveía de carne ilegal. Además están imputados otras dos personas de San Javier, y un vecino del Paraje KM 302 (en el departamento Vera) de apellido Ayala.