Mauro Dalmazzo | region@ellitoral.com
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Un grupo de inversores nacionales e internacionales tienen la intención de construir un gran Hotel Termal en la localidad de Melincué.
En las últimas semanas sostuvieron una reunión con el Presidente Comunal, Silvio Garbolino, donde le manifestaron la intención de avanzar en una obra que contemple un complejo hotelero y de cabañas, sumando piletas de dimensiones importantes con agua termales de la laguna.
En este contexto, les expresaron a las autoridades locales que es fundamental el avance de las obras hídricas que brinden garantías para evitar nuevas inundaciones de cara al futuro.
En tal sentido, desde la Comuna, respondieron que en 30 días “aproximadamente se van a poner en marcha nuevas bombas que duplicarán la capacidad de extracción de agua, lo que le dará al pueblo la tranquilidad necesaria de que no se va a volver a inundar”.
En tal sentido, se prevé que en un corto plazo se lleve adelante un nuevo encuentro entre las partes, en el cual surjan precisiones en relación a la característica del proyecto, la zona donde se emplazará y el monto de la inversión.
Desde la gestión Garbolino apuntan a potenciar turísticamente la localidad, con el objetivo de volver a ser un polo regional como en las décadas del 60 y 70.
Lo cierto es que distintos emprendimientos montados a la vera de la laguna, fueron devorados por el agua en inundaciones o crecidas. Entre ellos el emblemático Hotel Balneario Melincué.
“Estamos manteniendo contacto con algunos inversores, apuntando siempre al área hotelera y turismo. Queremos poner en marcha la iniciativa de ‘Melincué, Capital del Agua Termal’. Queremos tener el primer Hotel Termal de la Provincia de Santa Fe. Y están esperando que las obras se inauguren, que las bombas estén en funcionamiento, para venir a invertir”, adelantó el Presidente Comunal en diálogo con El Litoral.
Los capitales interesados “son de la ciudad de Buenos Aires. Pero sabemos, por alguna charla que hemos sostenido, que una parte son extranjeros. Creo que se viene una temporada de verano distinta. Ya éste último verano fue uno de los mejores en muchos años, a pesar de estar acotado por la pandemia”, añadió.
En este contexto, el objetivo de las autoridades locales es llegar a “ser un 75% de lo que fue Melincué en su esplendor”.
Para eso están convencidos que es fundamental la puesta en marcha de las nuevas bombas que “van a brindar tranquilidad para garantizar una cota determinada de la laguna. Si las estaciones de bombeo están prendidas, la laguna puede crecer, pero nunca llegar a inundar. Cuando nos tocó inundarnos durante el 2017, fue porque durante un año no se bombeó”, precisó Garbolino.
El despegue de Melincué como polo turístico regional comenzó lentamente con la construcción, en una de las seis islas, del Hotel Balneario en 1933, por parte de los empresarios Bartolomé Tersano y Arístides Maghenzani. El cual fue inaugurado en 1938.
Un proyecto arquitectónico de punta para la época, lo que potenció al distrito como la principal referencia turística de la región.
Contaba con 34 habitaciones, un gran comedor, espacio para orquestas, pista de bowling, entre otras comodidades. Con el objetivo principal de explotar las aguas termales.
Luego, en el año 1941 se registró la primera gran inundación, la que desembocó en que el Hotel cierre sus puertas hasta 1967, cuando reabrió para dar inicio al momento de mayor esplendor de la localidad como polo turístico regional.
En esos años llegaban a la cabecera del Departamento General López miles de personas, provenientes de distintos puntos de Santa Fe y provincias vecinas.
Además de la laguna, el atractivo era disfrutar shows de grandes artistas populares, como Horacio Guaraní, Jorge Cafrune. Estela Raval y los 5 Latinos. Hugo del Carril, Roberto Rimoldi Fraga, Juan Carlos Calabró, Palito Ortega y Sandro, entre otros.
Pero lamentablemente en marzo de 1975, producto de importantes precipitaciones, el nivel de la laguna creció considerablemente y sumergió al Hotel y parte del casco urbano bajo el agua.
El 10 de agosto de 1992, el pueblo fue declarado Capital Provincial del Turismo Termal, sin embargo, no pudieron concretarse acciones para potenciar esa mención. Es por ello que Garbolino aseguró: “No queremos ser solo un papel, sino además concretar inversiones que despeguen al termalismo en la localidad”.
En el año 2003 se produjo una nueva e importante inundación, la que desembocó en que las autoridades provinciales inviertan en la posterior construcción de las estaciones de bombeo.
Ahí comenzó un nuevo y lento despegue que desembocó en el 28 de septiembre de 2007 con la inauguración del primer casino de la historia de la provincia de Santa Fe, que cuenta con 40 habitaciones, centro de convenciones, canchas de tenis, pileta de natación.
El último gran golpe fue en mayo de 2017, con una gran inundación y “con las estaciones de bombeo que hacía un año no funcionaban”, dijo Silvio Garbolino.
La actualidad marca el camino de Melincué hacia un próspero futuro. Con nuevas estaciones de bombeo a punto de entrar en funcionamiento y con un flamante proyecto Termal-Hotelero que apunta a recuperar el viejo esplendor del distrito.