Ya en Venado Tuerto, el bombero voluntario suboficial Pablo González, contó a El Litoral cuál fue su trabajo, considerado preponderante, para mantener seguros a los brigadistas que lucharon contra los focos de incendio en el Parque Nacional Los Alerces, en Chubut, donde el servidor público venadense estuvo diez días hasta que fue relevado por un segundo contingente de santafesinos.
González, en la actualidad forma parte de la División Comunicaciones y Operaciones de la Federación Santafesina de Asociaciones de Bomberos Voluntarios y su función es de subreferente provincial y junto a otros dos colegas estuvieron a cargo de triangular la conexión entre los brigadistas forestales y el comando para resolver inmediatamente cualquier inconveniente que pueda ocurrir en campo, así como la parte operativa para desarrollar la tarea de sofocación del fuego con mayor presura y efectividad.
La importancia de estar comunicados
“Se trabaja con equipos de handy, de radio o internet para hacer las conexiones necesarias para trabajar. Todo con equipamiento muy sofisticado que fuimos desarrollando el último tiempo y lo que se hace es llegar a terreno y brindar el soporte a la brigada forestal, en este caso”, manifestó el bombero venadense, que junto a otros 44 santafesinos viajaron el pasado 8 de febrero a Esquel para combatir los devastadores incendios forestales.
Los bomberos voluntarios de Santa Fe que viajaron para luchar contra los incendios.
“Nuestra pauta es que el bombero nunca puede estar incomunicado por una cuestión de seguridad y segundo por una cuestión operativa, así que el objetivo es mantener a la unidad en comunicación constante por el medio que sea”, agregó y señaló que el lugar asignado al contingente santafesino fue el sector 9 donde trabajaron junto a personal de la provincia de Córdoba a quienes le brindaron el apoyo comunicacional ya que no contaban con esa división en su delegación.
Arduo trabajo
Sobre la tarea que desarrolla la delegación, aún en Chubut, Pablo González detalló que junto a los bomberos cordobeses se establecieron en “una zona complicada, es decir, los llamados 'puntos calientes' donde no hay mucho fuego pero sí hay brasas y como los vientos son importantes todos los días se iban produciendo pequeños incendios que a la vez se iban agradando y nuestro trabajo era apagar lo más rápido posible para que no se vuelvan a producir los incendios”, explicó.
La comunicación, clave para el trabajo efectivo en el terreno.
Además, contó que el equipo estuvo dispuesto “en un predio bastante extenso y de difícil acceso, ya que había que caminar unas cuatro horas para llegar al punto, apagar los focos activos y después regresar durante otras cuatro horas”, donde uno de los tres especialistas en comunicaciones se sumó al equipo en la caminata “para triangular con el comando y durante ese tiempo afortunadamente sólo se realizaron dos evacuaciones por temas menores relacionados a picaduras de insectos y un traumatismo”, acotó.
Aporte de Santa Fe
Del contingente de 45 brigadistas santafesinos, -sumó González- 16 eran bomberos voluntarios y el resto correspondían a Bomberos Zapadores de la ciudad de Santa Fe y personal de Protección Civil. Del primer equipo, que permaneció diez días en territorio, la semana pasada se realizó un relevo de personal y desde Venado Tuerto se sumó a la brigada forestal Danilo Escobar y Marcelo Carozo de María Teresa.
Vele recordar que en el primer viaje también se unieron de la región sur-sur, Fabián Costa y Soraya Coronel, de la localidad de Wheelwright y Gustavo Barco, de Firmat, quien además es Jefe de la Brigada Forestal de la Regional 11 de la provincia de Santa Fe.
Parte del trabajo de la División Comunicaciones y Operaciones.
Al respecto del desarrollo de su división, afirmó que hace más de dos años que “venimos trabajando en la conformación de este equipo que se va mejorando constantemente y agregando nuevas tecnologías para que el trabajo sea más fluido”, agregando que el año pasado culminaron “un curso de de Protección Civil de la Nación brindado por el Ministerio de Seguridad que los habilitó como radio-operadores en terreno para trabajar con diferentes técnicas, y también la federación fue comprando más equipamiento y nos vamos preparando para este tipo de eventos ya que cada emergencia tiene su complicación, donde la comunicación por celulares es prácticamente nula”.
Bajo control
En la actualidad, los incendios en la zona se encuentran bajo control aunque se mantiene el despliegue de recursos.
“La situación hoy está controlada por suerte, ya que la temperatura, la humedad y las condiciones del tiempo relacionadas con el viento ha estado tranquilo, sin rastros de lluvias pero estable. Lo que quedaba por hacer en el relevo era la guardia de cenizas, que es estar atento a cualquier posible foco pero ya prácticamente no había posibilidad de reignición. Igualmente el personal local y del parque nacional siguen en alerta”, afirmó.
En tanto, medios locales informan que el operativo incluyó el despliegue de más de 450 personas, con 300 brigadistas en la línea de fuego, así como también el soporte de medios aéreos, vehículos especiales, equipamiento, motobombas forestales, entre otros recursos, que permitieron controlar el siniestro y lograr una marcada caída de la actividad en el incendio.