Por Alan Vidaña
La mujer fue condenada a 12 años de prisión por abusar sexualmente de su propia hija. Sin embargo, hasta ahora gozaba del beneficio de prisión domiciliaria.
Por Alan Vidaña
Días pasados se llevó adelante una audiencia imputativa en los Tribunales Provinciales de Casilda -departamento. Caseros-, para revisar la causa de una empleada policial que fue condenada por el delito de abuso sexual. En tanto, la jueza Mariel Minetti hizo lugar al pedido de la fiscalía, por lo cual la abusadora deberá volver a la cárcel.
"En su momento estuvo un tiempo en prisión preventiva, después gozo de la domiciliaria, hasta la sentencia de primera instancia que la absolvió. Esa absolución fue apelada por mí, luego intervino la Cámara de Apelaciones de Rosario, la cual en abril del año pasado revocó la absolución condenando a la mujer a 12 años de prisión. Dicha resolución fue apelada por la defensa y este martes nos notificaron la sentencia, donde nos confirmaron por segunda vez la condena. No obstante, he solicitado que mientras se tramitan los recursos que faltan, la acusada permanezca en una unidad carcelaria", explicó el fiscal Emiliano Ehret, en diálogo con este medio.
Por otro lado, la sentencia aún no está firme. Eso implica que la defensa de la mujer policía todavía tiene recursos legales para interponer su queja ante la Corte.
La causa
La investigación comenzó en el año 2018 y tuvo como principal sospechosa a una mujer que se desempeñaba en la Comisaría de la Mujer de la ciudad de Casilda. La empleada de la fuerza policial fue detenida e imputada por abusar sexualmente de su propia hija.
En esa oportunidad, el fiscal Emiliano Ehret había imputado a la acusada por el delito de "abuso sexual agravado por el vínculo y por la convivencia preexistente en concurso real con corrupción de menores agravado por el vínculo".
La mujer policía vivía con su hija en una vivienda del barrio Yapeyú de Casilda. Luego de una ardua investigación, comprobaron que la progenitora fue la responsable de protagonizar aberrantes episodios de violencia sexual contra su hija, incluso provocándole hemorragias. Asimismo, cuando los médicos constataron las hemorragias, la madre había dicho que la nena se había golpeado.
A finales del año 2020, la mujer había sido absuelta, pero semanas después un tribunal de apelación modificó esa decisión y la sentenció a 12 años de prisión.
Luego de idas y venidas, la jueza Minetti hizo lugar al pedido del fiscal Ehret, para que Jorgelina S. dejará de gozar del beneficio de prisión domiciliaria y volviera a un instituto penitenciario.
La causa generó mucha indignación en toda la comunidad, teniendo en cuenta que la mujer policía atendía casos de violencia de género dado su rol como empleada en la Comisaria de la Mujer. Después, paradójicamente termina siendo condenada por abusar sexualmente de su hija.