Santiago Balagué | [email protected]
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En las últimas horas, a pedido de lo vecinos del barrio Alejandro Gutiérrez, la Municipalidad de Venado Tuerto avanzó en un cerramiento del "viejo" Hospital, tapialando las puertas y ventanas, para evitar el ingreso de personas y que se siga con el vandalismo en el histórico edificio. Esta decisión generó malestar en los funcionarios provinciales que, rápidamente, salieron mostrar su enojo por "no haber hecho una llamada previa", expresó la delegada del Ministerio de Infraestructura y Hábitat en el sur provincial, Liliana Rostom.
En este marco, el intendente Leonel Chiarella explicó: "Nosotros lo que hicimos fue darle respuestas a los vecinos. Un mes y medio atrás hicimos una reunión de la que participaron la diputada provincial Rosana Bellatti, el senador departamental Lisandro Enrico y parte de nuestro equipo del Gobierno Municipal, donde nos manifestaron su preocupación por el estado del edificio y nos marcaron tres cuestiones centrales: la poda, la iluminación y lo que sucedía dentro de esta obra que está abandonada desde hace más de dos años".
El mandatario recordó que la reunión la comenzaron fuera del edificio, pero se largó a llover y se trasladaron al interior, al sector intervenido. "Realmente nos encontramos con un lugar que parecía un aguantadero, con jeringas, envoltorios de drogas, preservativos, cajas de vino. Esto demuestra lo que plantean los vecinos, que este es un espacio que propicia la inseguridad".
Según precisó Chiarella se están cumpliendo con los pedidos de los vecinos: "podamos para que haya mayor iluminación, cambiamos las luminarias y cerramos los lugares donde la circulación de personas y delincuentes es mayor". Y disparó: "Estas son mejores condiciones de seguridad para la comunidad, no debería molestarle a nadie".
El Intendente también insistió con el pedido para que se continúe con la obra prevista en este edificio que consiste en convertirlo en un nuevo Centro de Justicia Penal. "Lo que nosotros queremos es que la obra se haga, que la recuperación de ese edificio sea finalmente una realidad y es lo que le venimos pidiendo desde el inicio de la gestión de Omar Perotti. Mientras tanto, hicimos estos trabajos transitorios, que después se van a demoler, pero mientras tanto brindan mayor tranquilidad a los vecinos".
Cabe señalar que el pedido de los vecinos del barrio Alejandro Gutiérrez ingresó al Municipio con unas cien firmas. "No es una ocurrencia del intendente, es una respuesta concreta a la demanda de los vecinos", enfatizó Chiarella.
Por su lado, la delegada del Ministerio de Infraestructura y Hábitat, Liliana Rostom, indicó: "No me parece que sea la forma de entrar a un edificio sin hacer una llamada previa, sin preguntar. Muchas veces es común que el Municipio haga aportes a la Provincia y viceversa, tanto en escuelas, instituciones y demás, pero de otra manera, con diálogo previo y sin hacer promoción de esas medidas".
Según indicó la funcionaria "estamos a días de llamar a licitación" para construir allí el Centro de Justicia Penal, obra que había sido proyectada por la anterior gestión provincial, aunque se iniciaron las tareas de demolición y luego se frenó. "Hacer hoy un cerramiento, como corresponde, tiene un altísimo costo y es innecesario cuando estamos a un paso de hacer el llamado a licitación. Sí se han tomado otras medidas como poner vigilancia para evitar situaciones de inseguridad o vandalismo", puntualizó.
Según comentó, este centenario edificio donde funcionó el Hospital hasta hace muy pocos años, hoy alberga a varias familias que han quedado en la calle y encontraron en este espacio un lugar para pasar las noches.
"Lo que criticamos es la modalidad agresiva, prepotente de la Municipalidad, sobre todo cuando hay una mujer a cargo de algo, porque yo les dije que ese edificio, aunque aún pertenezca a salud, estaba bajo mi responsabilidad", reclamó Rostom.
Por otro lado exclamó: "En el día que estamos anunciando entre 90 y 100 viviendas para Venado Tuerto (ver página 3), tenemos que hablar de esto, no sé si fue casualidad que la intervención la hicieran el mismo día". Y sentenció: "Es mejor contarles a los vecinos de esta inversión tan importante que vamos a hacer en terrenos que desde hace muchos años eran provinciales y esperamos que los trámites no se demoren en la Municipalidad para poder llamar rápidamente a licitación pública".
Los actos vandálicos y roturas del edificio donde funcionó durante más de cien años el Hospital Gutiérrez de Venado Tuerto son constantes, incluso se han tenido que lamentar robos de cables que han afectado a la Regional de Salud que aún funciona en una de las alas del inmueble, sobre avenida Eva Perón. Estos hechos incluso pusieron en riesgo elementos muy costosos y necesarios, como ser medicamentos y vacunas, que estuvieron a punto de perder la cadena de frío ante la interrupción del servicio de electricidad.
Esta realidad derivó en la decisión del Ministerio de Seguridad de aportar vigilancia policial en la zona, sobre todo en horarios nocturnos, donde las actividades delictivas se desarrollan con mayor frecuencia. De todos modos, el patrullaje constante no evitó la presencia de personas en otros sectores del abandonado edificio, ni pudo calmar el temor de los vecinos.