Daniel Melero: su historia, la escultura de Mirtha Legrand y la profundidad del arte
El oriundo de Laboulaye estuvo en el ojo de la tormenta hace unos meses, cuando la escultura que realizo en Villa Cañás en honor a Mirtha Legrand fuera retirada y guardada por las críticas de la “Chiqui” y los comentarios en redes sociales. Una recorrida por su vida, su obra y una mirada sobre el episodio de la escultura de Mirtha, desde la distancia del tiempo.
Daniel Melero: su historia, la escultura de Mirtha Legrand y la profundidad del arte
La charla con el escultor Daniel Melero resultó ser reveladora. El artista, que para muchos pasó a ser conocido como el autor de la escultura de Mirtha Legrand en Villa Cañas, criticada por la diva de la Tv y retirada por las autoridades municipales compartió con El Litoral cómo su conexión innata con el arte esculpió su vida desde una temprana edad. Nacido en Laboulaye, provincia de Córdoba, la pasión de Melero por la escultura se gestó en su niñez, arraigándose como una vocación insoslayable.
Desde los primeros trazos, Melero asegura que percibió la inusual atracción hacia el dibujo y la escultura. "No puedo explicarlo, ya a los 4 o 5 años me sumergía en la escultura y el dibujo. Era como si la creatividad estuviera en mis genes", compartió. Este vínculo temprano con el arte tuvo como inspiración su entorno natural, donde la tierra y los elementos influenciaron su enfoque creativo.
Melero, autor de innumerables obras a lo largo del país como Córdoba, La Pampa, Santa Fe, San Luis, Buenos Aires, entre los que se destacan homenajes a Soledad Pastorutti y Pablo Aymar, recuerda sus días de infancia tallando madera con cuchillos rudimentarios o alguna herramienta que se le pareciera, y explorando la creación de formas “con cualquier maderita que encontraba”. A los 7 años, su interés por artistas como Leonardo da Vinci y Miguel Ángel cimentó su pasión y lo impulsó a seguir este camino artístico, que lo llevaría a trazar una carrera inigualable.
”Siempre me acuerdo que cuando tenía 6 o 7 años talle el Pensador, de (Auguste) Rodin; lo hice en una maderita y se lo regalé a mi abuela; o sea que eso viene desde mi ser, desde antes”, argumentó.
Arte por docencia
Indagado sobre la docencia, Melero reconoce que, aunque es docente, ha decidido enfocarse por completo en su labor artística. "Mi interés principal es el desarrollo en el arte, tanto en la escultura como en la pintura", afirmó. Al examinar el panorama del arte contemporáneo, el artista cordobés destacó la necesidad de revitalizar y modernizar ese sector en Argentina, asegurando que el arte a menudo se confunde con tendencias momentáneas, manifestando su preocupación por la falta de reconocimiento y mercado para los artistas locales.
“A las artes plásticas y todo su ambiente lo veo un poco como abandonado, encajonado, muy retródago; muy parado y hasta obsoleto diría, con respecto a todo lo que entendemos como arte. De todas maneras, -agregó- me llamó mucho la atención que en los mejores salones de arte del mundo muestren, por ejemplo, una obra catalogada, entre comillas, de arte, que consta de una banana pegada con una cinta en la pared; es algo que llama la atención en el momento, pero no tiene nada que ver con el arte”.
“En Argentina, como en varios países, pasa como desapercibido del arte, y en todos los aspectos. Tampoco hay mercado de arte, como lo dijo el maestro Antonio Pujia hablando del mercado de la escultura y de la pintura, inexistente en la Argentina”, acotó Melero.
Daniel Melero, escultor.
Además, destacó que en otros casos también sucede este tipo de arte, como la pintura y escultura, “lo ven como una especie de hobby, o como que siempre está marginado y no se le da el valor que tendría que tener”.
Mirtha Legrand
Inexorablemente, la conversación giró en torno a su reciente obra, una escultura de Mirtha Legrand realizada en Villa Cañás que atrajo la atención de medios nacionales y suscitó controversia en redes sociales.
“Después de haber hecho algunas obras de un famoso como Soledad Pastorutti y Pablo Aymar, surge esta obra, pero yo creo que surge más que todo porque ya habían visto varias obras que había hecho yo en metal y les interesaba esa obra también hacerla en metal”, relato el artista creador de la escultura en Villa Cañás. Añadiendio no haberle prestado “tanta atención al tema Mirtha Legrand. Nunca me interesó su forma de ver las cosas”.
Para Melero, su obra fue influenciada por la visión personal de Mirtha, que representaba su propia interpretación del personaje, no un retrato hiperrealista.
"Si hay 10 escultores que tienen que representar a una persona, como en este caso a Mirtha Legrand, más allá de la posición y la indumentaria que tenga esta mujer, las 10 esculturas iban a ser diferentes; esto es lo que no se tiene en cuenta cuando la persona no entiende nada sobre el tema de arte..."
No obstante, el escultor mostró su descontento por los comentarios críticos de Mirtha Legrand, mencionando la ausencia de humildad y comprensión artística en sus palabras.
“Esa forma de criticar a otro artista, y sintiéndose siempre superior, fue muy molesto para todos, incluso para Villa Cañás, y para los que realizaron el esfuerzo para que pudiera tener esa obra”.
El escultor acepto tener un perfil humilde, afirmando que “yo sé que siempre hay algo que podés hacer mejor en una obra. De lo que he hecho nunca he quedado el 100% satisfecho, le he puesto todo, pero siempre se puede hacer mejor”, describiéndose muy autocrítico. “Se ve que no alcanzó las expectativas de esta mujer. Lo feo de todo esto es que no hubo humildad para nada, en ningún momento se puso en el lugar de la otra persona, y la ausencia total del entendimiento sobre lo que es el arte, y de una persona que es se dice artista”.
Para finalizar el tema de la obra de Mirtha Legrand, en la opinión de Melero “se equivocó, como todo el mundo se puede equivocar, y pienso que yo también que me he equivocado en elegir y homenajear a esta mujer”, reflexionó, acotando que “podría haber dicho que no, porque no me interesaba, entonces bueno, sucedió lo que sucedió y pasó lo que pasó; de todas maneras, las cosas por algo siempre pasan, yo creo mucho en eso también”.
Como cierre, el oriundo de Laboulaye deslizó que opiniones varían y no se puede complacer a todos, pero su amor por la escultura y la búsqueda de la conexión entre la creatividad y la naturaleza siguen y seguirán siendo sus guías.