Las palabras alusivas sobre el creador de la enseña patria estuvieron a cargo del profesor Damián Haag, vicepresidente del Instituto Belgraniano de Venado Tuerto, y del presidente del Concejo Municipal, Juan Ignacio Pellegrini.
Se efectuó en la fecha el acto oficial en el Día de la Bandera, que conmemora el 202º aniversario del fallecimiento del General Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano (1770-1820). La convocatoria fue en el playón deportivo del Parque Municipal General Belgrano.
Las palabras alusivas sobre el creador de la enseña patria estuvieron a cargo del profesor Damián Haag, vicepresidente del Instituto Belgraniano de Venado Tuerto, y del presidente del Concejo Municipal, Juan Ignacio Pellegrini.
Haag, en primer término, sostuvo que “Belgrano fue un humano distinto, y propongo en este día recordarlo así. Más allá de su valiosa labor militar, podemos definirlo como un intelectual, un pensador y un filósofo. Tuvo gran desempeño como estudiante y esto permitió que lo validaran en Europa”.
“Se impregnó de nuevas ideas, que alimentaron inquietudes sobre la realidad de su lugar de nacimiento. Y en su pensamiento comenzaron a nacer algunas preguntas repentinas. Un criollo joven vislumbraba las estructuras decadentes del antiguo régimen y del absolutismo en América, desesperado por ayudar a sus compatriotas a mejorar la situación económica, política, social y hasta espiritual en estas tierras”, rememoró.
El representante belgraniano exaltó que la vida del prócer “fue un constante servicio a sus iguales, no solo como compatriotas y argentinos, sino como humanos, merecedores de libertad y posibilidades, que de hecho les fueron privadas durante tanto tiempo. Habiendo nacido en una familia acaudalada, falleció en la extrema pobreza, por destinar todo su capital a la causa independentista”.
A su turno, Pellegrini narró el contexto político del primer izamiento de la Bandera Nacional, a orillas del río Paraná en Rosario, el 27 de febrero de 1812, las vicisitudes de su mala relación con Bernardino Rivadavia y las diversas teorías históricas sobre la elección de los colores patrios.
A renglón seguido, afirmó que “el pensamiento de Belgrano, plasmado en escritos a principios del siglo XIX, tiene una muy importante actualidad. Él planteó la educación en manos del Estado, que llegue a todos, y promovía el desarrollo económico al cual se emparentaba, pensado con una matriz que no estaba en la riqueza del suelo sino en la transformación de la materia, que es el trabajo”.
“Sabía que la Independencia y la soberanía se iban a determinar en los campos de batalla, por eso, sin ser un militar de carrera y sin tener experiencia suficiente, accede a pedido de la Primera Junta a emprender el camino hacia el Norte, con dolencias personales y un Ejército diezmado, a defender a la patria en esos campos de batalla”, completó el presidente del Concejo.
Encabezó el acto el intendente Leonel Chiarella y asistieron funcionarios municipales, legisladores, representantes de instituciones, agrupaciones tradicionalistas, veteranos de Malvinas, abanderados y público en general.
La Banda Municipal Cayetano Silva, bajo la dirección del maestro Ezequiel Fernández, interpretó el Himno Nacional y las marchas oficiales, junto a la cantante Andrea Rubí, y la interpretación en lengua de señas estuvo a cargo de trabajadores municipales, alumnos del curso de LSA dirigidos por la profesora Karen Rey, con el acompañamiento de la intérprete Norma Pérez.
Como parte del acto, el intendente Chiarella entregó banderas argentinas con motivo de cumplirse este año el 100° aniversario del Club El Empalme, los 50 años de la UTN-FRVT y el 85° aniversario de Sociedad Rural Venado Tuerto, que fueron recibidas por los máximos directivos de cada institución, un reconocimiento al importante rol que cumplen en la comunidad.
Tras el cierre protocolar y el retiro de banderas, el músico Gabriel Zarich interpretó el tema de su autoría “Bailecito a mi bandera” junto a su hermano Andrés, compuesto con el asesoramiento histórico de la profesora Alejandra García.
La locución del acto corrió por cuenta de Gustavo Guerrero.