La Universidad Nacional del Litoral (UNL) continúa construyendo lazos con el sector productivo regional, demostrando que la innovación es un proceso que se construye sumando recursos y capacidades. En esta oportunidad, se realizó una visita a SICA Metalúrgica, una empresa de la ciudad de Esperanza, que diseña y produce recipientes sometidos a presión y equipos de proceso para la industria del gas, petróleo y química, comercializando en Argentina y múltiples países del mundo.
La comitiva de la UNL, comprendida por el rector Enrique Mammarella, el secretario de Vinculación y Transferencia Tecnológica, Javier Lottersberger, y el director del Cetri Litoral, Christián Nemichenitzer, fue recibida por los integrantes de la empresa Jorge Simonutti, presidente y fundador de SICA; Estela Presser; Roberto Simonutti; Mario Valente y Hernán Simonutti.
Tenés que leerExpocarreras: la UNL prepara una nueva edición virtual y multiplataformaEn el marco de la visita, los representantes de ambas instituciones mantuvieron una extensa reunión en la que intercambiaron acerca de problemáticas y aspectos que pueden potenciar los resultados de un vínculo común. Asimismo, se refrendó un convenio entre la Universidad y la empresa para comenzar a delinear acciones conjuntas, cuyo principal propósito es establecer vínculos de complementación y cooperación en ciencia y tecnología, para la identificación de nuevos proyectos e iniciativas en materia científico-técnológica. La visita finalizó con una recorrida por los distintos espacios del predio industrial.
Desde ambas instituciones se manifestó un especial interés en explorar posibilidades de articulación en temas vinculados al diseño de procesos de generación de energía renovables; procesos de separación física con auxilio de tamices moleculares; procesos de aprovechamiento de descartes agroindustriales; análisis y optimización de procesos de la industria energética; y tratamiento de efluentes, aguas industriales y aguas para consumo humano.
Un vínculo recíproco y de mutuo crecimiento
La UNL cuenta con una amplia trayectoria y experiencia generando este tipo de vínculos entre el sector productivo, el académico y el social, habiendo trabajado con más de 2.000 empresas de Argentina y otros 30 países.
Parte del éxito de estas experiencias reside en comprender que existe un capital tanto para enseñar como para aprender en cada uno de estos procesos: “La Universidad existe en tanto dé soluciones a las necesidades. Este convenio significa seguir abriendo las puertas y poniendo la UNL al servicio y a disposición del sector productivo, que los conocimientos no queden dentro de los libros, sino que esa generación de conocimiento se transfiera y nos sirva también a nosotros para aprender. Es un crecimiento mutuo, tanto para la empresa como para la universidad, porque es un proceso más sobre el cual adquirimos conocimiento”, expresó Enrique Mammarella.
SICA es una empresa santafesina con más de 25 años de trayectoria en los negocios. De génesis familiar, fue fundada por Jorge Simonutti en el año 1984. Producto de un largo recorrido, SICA Metalúrgica Argentina S.A. se consolidó en el diseño y producción de recipientes sometidos a presión y equipos de proceso para las industrias del gas, petróleo y química. Con esta trayectoria empresarial, tiene presencia internacional activa, desarrollando en la actualidad sus negocios en más de 20 países. En la actualidad, exhibe los máximos estándares de calidad en la industria metalmecánica, como son la Certificación ISO 9001:2015 y la Estampa ASME, entre otros.
Exporta sus productos a países de Latinoamérica y sur de África, operando plantas de fabricación propias en Argentina y Paraguay, así como un joint venture industrial en Sudáfrica.
Acerca del vínculo con la Universidad, el fundador de la empresa puso en valor el convenio firmado: “Es un hecho importante en el marco del cual, la Universidad va a proveer tecnología, que tanta falta hace a la industria local. Es un vínculo recíproco en el cual los estudiantes y docentes investigadores que se están en la Facultad, encuentran en SICA espacios para adquirir experiencia y adaptarse a la industria. SICA no está pensanda para ser solamente petróleo-dependiente, sino que estamos avanzando en otros proyectos y en ese sentido, el acompañamiento de la Universidad nos va a venir muy bien y es una alegría haber firmado este convenio marco para avanzar en estos proyectos”.
Tenés que leerSeleccionan un libro editado por la UNL para representar a ArgentinaUno de los puntos conversados giró en torno a la mano de obra calificada, sobre lo cual Simonutti destacó: “En esta zona contamos con muy buenos recursos humanos; si a ello le sumamos la tecnología que puede aportar la Universidad, es posible resolver el tema de la mano de obra, con recursos locales con costos muy diferenciados”. Y remarcó “la importancia de contar con una agenda conjunta, sumandos esfuerzos en pos de la producción de la mayor cantidad de productos posibles, asegurando el trabajo continuo”. En este momento estamos generando nuevos proyectos que nos dan confianza en inversiones, principalmente que nos permiten mantener el caudal de recursos humanos, e incluso ampliarlo”, concluyó.
Por su parte, Mammarella explicó las carreras y las competencias que resultan afines a este convenio: “Si bien se trata de una empresa metalúrgica, tiene también que ver con los materiales, con las ingenierías, con las competencias blandas, los sistemas, las señales, las industrias 4.0. Se abre un gran panorama de trabajo conjunto en el que podremos ir pensando proyectos a mediano y largo plazo, identificando las necesidades específicas de cada sector de la empresa y las capacidades con las que contamos en la UNL para resolverlas, abriendo nuevas líneas, entre otros”.
Construir vínculos entre la Universidad y la empresa
La UNL, a través de la Secretaría de Vinculación y Transferencia Tecnológica y las unidades académicas, construye vínculos con los diferentes sectores que representan a la sociedad. A través del CETRI Litoral se gestiona la transferencia de conocimientos y tecnologías de la Universidad, al Estado, empresas o a quien lo necesita.
El objetivo es acercarles lo que la Universidad hace, y poner a los grupos de innovación y desarrollo en el radar de las empresas para que sean tenidos en cuenta en diversos proyectos. “La vinculación universidad –empresa es netamente importante para la Universidad y para la región. Dos de nuestras Facultades y una Escuela están emplazadas acá en Esperanza, poder desarrollar la economía y la producción es una misión para la UNL, así como transferir esos conocimientos generados en aulas, laboratorios e institutos y ponerlos al servicio de la región”, subrayó Enrique Mammarella.