Vecinos de las localidades de Avellaneda (sede de Vicentin) y de Reconquista salieron a la calle este martes por la tarde para manifestar su rechazo a la intervención del gobierno nacional que encabeza Alberto Fernández.
La idea es “avisar” si vuelven los interventores. En el norte de la provincia hablan de una “pueblada” histórica.
Vecinos de las localidades de Avellaneda (sede de Vicentin) y de Reconquista salieron a la calle este martes por la tarde para manifestar su rechazo a la intervención del gobierno nacional que encabeza Alberto Fernández.
Uno de los momentos más tensos de la noche se produjo en la puerta de un hotel reconquistense donde se alojaban funcionarios nacionales que viajaron hacia el norte del país para tomar posesión de las oficinas de la compañía.
La presión de la gente hizo que los enviados por el gobierno central tuvieran que abandonar el hospedaje escoltados por la policía y llevados al aeropuerto, para finalmente regresar a Buenos Aires.
Tras ese episodio, victoreado como un triunfo de la sociedad, se instaló una “carpa del aguante”, en la vereda frente a las oficinas centrales de Vicentin en Avellaneda. Desde este miércoles, se monta una guardia permanente para “alertar” a la comunidad en caso que vuelvan funcionarios nacionales.