Al caer la noche del miércoles, que será recordada como una de las jornadas más fatídicas para la comunidad reconquistense, el panorama era desolador en los distintos cuadrantes de la ciudad capital del norte santafesino.
Son 40 mil las personas afectadas. Se esperan más lluvias.
Al caer la noche del miércoles, que será recordada como una de las jornadas más fatídicas para la comunidad reconquistense, el panorama era desolador en los distintos cuadrantes de la ciudad capital del norte santafesino.
Desagües superados ampliamente por el caudal de lluvias, acumulados de excesos pluviales cubriendo calles y cunetas, y pobladores con el agua hasta los tobillos era la postal que podía apreciarse con las últimas luces de un día aciago.
Una imagen dominaba los barrios más afectados por el fenómeno climático: las velas encendidas en las viviendas inundadas a modo de luz de noche, pero también de plegaria para que esta coyuntura apocalíptica cesara de una vez por todas.
En los barrios La Cortada, Guadalupe Sur y Barrio Nuevo, luego de una recorrida de cuadrillas de Protección Civil, la EPE y el municipio local, se resolvió esperar para restituir el flujo eléctrico hasta brindar seguridad plena a los usuarios. Noche sin luz y con el agua hasta los tobillos.
Con 40 mil personas golpeadas por la inundación la normalidad está lejos de recuperarse en el corto plazo, y mientras se esperan más lluvias la crecida del arroyo El Rey suma otro agravante a una problemática en extremo compleja.
Peligrosamente, a media mañana el caudal desbordado del cauce de agua del norte de la ciudad colmaba todo su valle de inundación y se ponía a tiro de los barrios aledaños. Los vecinos se aprontaban para lo que puede venir preparando bolsas de arena, siempre mirando al cielo para pedir algo de clemencia.
El día después de la lluvia de 300 milímetros en 7 horas se presenta con cielo encapotado y amenazante; la buena noticia es que no volvió a llover en la madrugada y ese alivio climático permitió buenos escurrimientos.
Los pronósticos no son alentadores. Desde la madrugada del jueves la región ingresó en un periodo de mejoramiento temporario, pero preocupa lo que pueda llegar a ocurrir a partir del domingo.
Un informe interno del clima que maneja la policía indica que los algoritmos y análisis actuales hacen recomendar precaución nuevamente entre el domingo y miércoles próximo, ya que podría ser afectado gran parte del territorio provincial con nuevas precipitaciones.