Miércoles 8.11.2023
/Última actualización 19:25
Un grupo de chicos de 6º año de la Escuela de Educación Técnica Profesional Nº 275 de Alcorta (departamento Constitución), creó un dispositivo llamado bipedestador que permite posicionar a una persona hasta la postura vertical. Siguiendo los lineamientos de las marcas de avanzada, colaboraron con Estefania, una niña de 4 años de esa localidad que posee una discapacidad neurológica que le impide mantenerse de pie.
“La problemática llegó a la escuela hace algunos años con una nena de Carreras que trajo un bipedestador como modelo. En ese momento, por una u otra razón, el proyecto no se pudo llevar adelante y se resolvió sin nosotros. De todos modos nos quedaron los lineamientos planteados como para empezar a fabricar un prototipo y eso fue lo que pasó ahora”, contó el docente coordinador de la iniciativa, Cristian Valdez, en contacto con este medio.
Ese fue el punto de partida. Se inició el trabajo sin un objetivo final ni destinatario. Las acciones estaban en marcha. En agosto de este año llegaron los padres de Estefanía a la escuela para ver qué podían hacer al respecto.
“Les mostramos lo que teníamos y tras concertar un par de reuniones con integrantes del Centro Terapéutico interdisciplinario ‘El árbol’ de Máximo Paz, le dimos para adelante con el desarrollo del prototipo y lo pudimos finalizar en el lapso de dos meses. Todo lo que faltaba fabricar, las pruebas que restaban hacer y el proceso de hace unos años, se terminaron en el presente ciclo lectivo”, explicó.
La particularidad del proceso de fabricación es que los chicos siguieron pautas industriales, algo inherente a su formación profesional de técnicos electromecánicos. “Todo está en los croquis, el diseño en 3D, los programas para la fabricación de las piezas ya sea en tornos CNC, en router de corte de madera, en impresión 3D y en corte de plasma. La soldadura está estandarizada, la planimetría del dispositivo está documentada, por lo cual replicarlo es algo totalmente viable, de hecho está en los planes hacer uno más al menos para donar. Ya tenemos la institución”, agregó Valdez.
Equipo completo. Alumnos, profes y Estefania con su bipedestadorEl profesor, aseguró que “desde lo personal significa mucho porque era un proyecto ambicioso” en el que “teníamos miedos, cosas que escapaban de nuestro estudio y siguen haciéndolo”. “Pero supimos rodearnos, nos apoyaron muchísimo desde afuera y nos dieron el envión que nos hacía falta para concretar desde el punto de vista de la fabricación”, añadió.
Luego, valoró: “No hay límites dentro de la escuela. Sí hay tiempos que a veces no son los de una fábrica. No son los de una respuesta inmediata para este tipo de necesidades, pero está la buena voluntad y las ganas de aprender. Entonces eso hizo que llegáramos a este buen resultado y sinceramente agradecido con los chicos que se han portado de maravilla”.
Seguidamente, resaltó: “Cuando nos sentamos en una conversación hace un tiempo yo les dije que esto les pertenece y que lo desarrollen hasta el final. Démosle respuesta a esta familia. Cargaron con eso y le dieron para adelante siendo que ya están de salida porque son pibes de sexto año. El placer es múltiple, por donde se lo mire. Es sinceramente un gran resultado”.
Aprender y ayudar
En sus redes sociales, Valdéz expresó con soltura todo lo que le generó este logro de la comunidad educativa. “De ahora en adelante solo queda esperar que esta pequeña guerrera de 4 años siga superándose día tras día, aprovechando al máximo el trabajo que con tanto amor hicieron los chicos y chicas de nuestra escuela”, ponderó.
En cuanto a los agradecimientos, enumeró: “En lo personal quiero agradecer a todos los que nos dieron una mano en este tiempo, a Mía Bóttoli de Carreras y su familia, con quienes no pudimos cumplir en su momento; a Estefi y su familia por la confianza y la paciencia; a Claudia Motto y el equipazo de ‘El Árbol’ por el asesoramiento y la incondicionalidad; a estudiantes de Electromecánica de años anteriores que iniciaron este camino; a los profes que acompañaron; a los que difundieron; a los que preguntaron; a Gustavo Girotto por el material donado para la causa y el aguante; a Nico y Matías por los cortes difíciles; a los medios de Alcorta por acercarse a ver de qué se trataba; a Mariana por su ayuda y por facilitar la cosas; y principalmente a 6º Electromecánica 2023 por concluir esta cruzada”.
Manos que empujan. Alumnos de la Escuela Técnica de Alcorta en pleno proceso de trabajoY siguió: “Este grupo de chicas y chicos, diseña, trabaja con el torno e imprime en 3D, mide, corta y suelda, lija, dibuja, pinta, pega y cose, responde entrevistas, se emociona y hasta difunde el proyecto hablando en inglés. Así de emprendedores por todos los terrenos. Un orgullo. Una muestra de que a veces se puede aprender y ayudar”.
Finalmente, acotó: “Es importante mostrar que hay procesos que llevan tiempo, cosas que son difíciles, que salen mal, que requieren de nuevos intentos y mucho sacrificio. Cosas que no entran en una historia de Instagram, o en un flyer, ni siquiera en un par de reels. Cosas reales. Estudiantes y niños de verdad. Que no entran en una liviana edición de video o un filtro excesivo. Estamos necesitando un poco más de eso. Aguante siempre la 275. Buena vida para Estefanía”.
Sobre lo fabricado
Un bipedestador o verticalizador es un dispositivo de órtesis que se adapta para conseguir la posición vertical de un niño, cuando el control motor sea por la causa que fuere, no puede ser logrado de manera autónoma.
Es decir, que no puede controlar el cuerpo en contra de la gravedad y ya tiene edad para hacerlo. Entonces el bipedestador cumple con esa función, fijar de alguna manera la posición vertical para favorecer el desarrollo muscular y además acarrear otros beneficios que tienen que ver con la circulación, el descanso, el desarrollo musculoesquelético y otras cuestiones asociadas.