La dramática situación que atraviesa el norte de la provincia de Santa Fe por los efectos de la sequía no cesa y ni siquiera hay esperanza de que encuentre coto en un plazo prudente para salvar las producciones agropecuarias.
La dirigente rural Yolanda Arce criticó la demora en la asistencia prometida desde el Estado para afrontar la sequía. Calculó que las pérdidas alcanzan hasta el 50 por ciento en algunos rodeos. Los animales perviven comiendo frutos de los algarrobos, graficó.
La dramática situación que atraviesa el norte de la provincia de Santa Fe por los efectos de la sequía no cesa y ni siquiera hay esperanza de que encuentre coto en un plazo prudente para salvar las producciones agropecuarias.
Desde por lo menos principios de diciembre la técnica ambiental Yolanda Arce gestiona asistencia para productores ganaderos de menor escala de la zona de la Cuña Boscosa, muy golpeados por una realidad de déficit hídrico que ya se extiende por un período de tres años consecutivos.
“Yo estoy acompañando a un grupo de productores de la Cuña, que no es solo Fortín Olmos, sino también de los parajes 101, 109, de Garabato, que están organizados en la agrupación que estamos terminando de conformar”, contó a El Litoral la profesional.
Comprometida en aunar voluntades para llevar algo de alivio a lo que entidades oficiales, como el INTA, vaticinaron que podría desembocar en una “catástrofe ganadera”, dijo que la idea “surgió porque la gente ya no daba abasto y estaba pagando para que se le acarree el agua. Vamos repartiendo 75 cubas en el trayecto desde que armamos la campaña”.
“El gobierno está ausente totalmente porque no da una solución rápida como quieren los productores”. Yolanda Arce, dirigente rural norteña.
En tren de describir las consecuencias de la falta de lluvias que se ya se extiende por un trienio, pero que recrudeció aún más en el tercer año del ciclo, consideró que “la lluvia no fue suficiente para poder solucionar la problemática que estamos viviendo. Es muy triste lo que se está viviendo en la zona, los productores están perdiendo hasta el 50 por ciento de su producción y eso es irreparable”.
La falta de agua y la falta de pasto provoca que los animales estén en “muy mal estado, ya no se levantan, no pueden parir, esto viene desde hace rato”, lamentó la dirigente. Y apuntó que “la movida que hicimos fue para recolectar cubos y tachos con agua, y ahí el gobierno que estaba haciendo oídos sordos comenzó a visibilizar esta situación grave que se estaba viviendo acá”.
Con imágenes que día a día se multiplican en medios y redes sociales de animales muertos o luchando por su vida, la crueldad de la sequía en la región ganó espacio en medios de alcance nacional, aunque la mediatización de la problemática no necesariamente significó una buena noticia para los ganaderos: “Me llamó el ministro y nos pusimos contentos porque pensamos que iban a hacer las entregas de las ayudas económicas que habían prometido. Pero, me dijo que recién, probablemente, la semana entrante no sino la otra va a tratar de agilizar los trámites. Le dije ‘ministro, por favor, el animal no espera y el productor ya no da más, tengan un poco de empatía con los productores que la están pasando mal’. Me dijo que sí, pero vamos para dos meses de espera, creo que va a salir la ayuda cuando el productor ya esté perdiendo, cuando pierda la totalidad de lo que pueda salvar”.
Arce recordó que “ya que había venido su secretario a Fortín Olmos a hacer una reunión con los productores para ver la situación. Dijo que iba a sacar en una semana o dos una ayuda de $ 100.000 para cada productor para que pueda comprar alimento y ver el tema del agua, y ya va para dos meses y no sale la ayuda prometida, que sería muy importante sobre todo para los guachos”, los terneros que quedaron sin madre.
Manifestó además que “ahora me puse de nuevo en la campaña para comprar alimento solamente para los guachos y me confirmó la Sociedad Rural de Reconquista que ya compró alimento, que está a disposición para poder traerlo, y eso me pone muy contenta que las entidades particulares se estén enfocando mucho más que el gobierno que debería hacerlo”.
En sus declaraciones, pidió a los funcionarios que “vengan a recorrer y vean ellos mismos lo que pasa, porque no es lo mismo que te lo cuenten por teléfono. Es muy triste lo que cuentan los productores, muchos dicen que no se quieren ni acordar lo que van perdiendo porque se ponen a llorar. Te encontrás con 10 o 15 animales muertos, con vacas que murieron ahí porque no tenían pasto y tampoco las podés llevar a otro lado porque no hay pasto en ningún lugar. Tenés que resignarte a que se te mueran ahí”
Para finalizar, reveló un dato inaudito: “Hace más de un mes nos llovió 90 milímetros, que eso no ayudó mucho, y ahora lo que no está salvando para que los animales pueden comer y rumiar son los algarrobos, es impresionante la naturaleza lo que hace dando sus frutos para que puedan rumiar las vacas”.
Yolanda Arce convino que “todo eso conmueve un montón, por eso me tomé el atrevimiento de comenzar con la campaña para conseguir cosas para ellos”, e insistió con que “el gobierno está ausente totalmente porque no da una solución rápida como quieren los productores, no pueden estar esperando dos o tres meses porque para esa época ya pierden todo”.