A 39 años de la llegada del Ejército Argentino a las Islas Malvinas, se realizó un homenaje a los soldados que participaron de aquella gesta en la plaza Soldado Desza, en la zona norte de Rosario. El acto por el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de las Malvinas contó con la presencia del intendente Pablo Javkin, concejales y diputados provinciales, junto a un grupo de ex combatientes. Este espacio público lleva ese nombre en recuerdo a Sergio Raúl Desza, soldado rosarino caído en combate el 14 de junio de 1982. Su hija, Gabriela, y otros familiares participaron del evento.
Julio Más, que estuvo en el campo de batallas en las islas del Atlántico Sur como parte del regimiento de infantería 5, habló en representación del grupo de ex guerreros: “Nosotros fuimos a una guerra a defender a la patria sin solicitar nada a cambio. Nos tocó cumplir con un servicio militar, pero más allá de eso fuimos a defender lo que nos habían enseñado en la escuela primaria. Que las Malvinas eran argentinas. No fuimos con el uniforme de Videla. Fuimos con el uniforme de San Martín a defender la bandera de Belgrano”. “Cuando volvimos estuvimos abandonados totalmente por el Estado y éramos los veteranos de guerra que deambulábamos solicitando trabajo y presentar era una nulidad a un trabajo digno. En los primeros años, se suicidó mucha gente por no tener una contención”, aseguró. Más agregó también: “Fui compañero de Desza sin haberlo conocido nunca. Fallece el último día de la guerra, a pocas horas del cese del fuego. Esperemos que haya sido el último en haber muerto por una guerra tan absurda. Que no haya más guerras. La guerra es un horror y un error. Hay maneras de seguir defendiendo la soberanía. No necesariamente con un arma”.
Por su parte, en su discurso el intendente afirmó: “Es una fecha especial. Este es el acto más popular. El 2 de abril tiene el recuerdo de una lucha histórica de un pueblo por su soberanía. Del heroísmo y del homenaje a los héroes de Malvinas doblemente castigados por lo que fue la guerra y también por la indiferencia de un país que quería dejar atrás algo muy oscuro como la dictadura”. Javkin remarcó que en 1985 se estableció este homenaje anual en esta misma plaza al último rosarino que cayó.
El acto contó con la concurrencia de gran cantidad de vecinos junto a representantes de las escuelas de la zona. Se izó la bandera argentina en el mástil enclavado en el lugar. También se dejaron ofrendas en el lugar donde se recuerda, con referencias sobre su vida, a Sergio Desza.
Por otra parte, se recordó que la esquina de la plaza que une el pasaje Apóstoles y la calle Spegazzini lleva desde el año pasado por ordenanza del Concejo Deliberante el nombre de Isidoro Acquaroli. Acquaroli, fallecido recientemente, fue uno de los impulsores de los homenajes a veteranos de Malvinas.