En medio de la pandemia también se publican libros. De nuevos autores y desde nuevas plataformas. Eso pasó también con la venadense María Gabriela Polinori, quien acaba de presentar su primer libro donde refleja sus vivencias para pensar la experiencia del cáncer de mamas: Relatos en Tetas.
Con textos propios, intercalados con las voces de otras mujeres invitadas y las ilustraciones de Emilia Tauil, se realzan las narraciones literarias con una sutil y delicada originalidad. Esta primera edición lleva la marca de la plataforma digital Revista Ají, que recoge contenidos diversos y gestos creativos, intentando abordar otro registro sobre lo cotidiano.
Este es el primer libro en formato papel de Ají. El primero fue digital “Lo que la pandemia se llevó” con textos de distintos actores políticos sociales y culturales de la región, disponible en PDF desde la página www.revistaaji.com.
El proyecto de Polinori, fue impreso en Rosario, en septiembre de este año. Con las limitaciones impuestas por la pandemia, el libro se lanzó con una preventa a través de la revista, con muy buena repercusión. La presentación oficial se realizó el fin de semana último en un reconocido bar céntrico, siguiendo todos los protocolos sanitarios y las recomendaciones epidemiológicas.
“Los senos, los pechos, el busto, decían las abuelas. Tetas, decimos. Todo es nombrar (…). Y nos nombraron: cáncer de mamas. Un diagnóstico que impacta con el solo peso de su voz y nos deja (como cuando nos empezaron a crecer) mirándonos las tetas -marcadas, irradiadas, operadas, enfermas, sanadas, restauradas- y buscando nuevas palabras (…). Una certeza o una determinación: ni guerreras, ni heroínas, ni sobrevivientes. Sólo mujeres que quisimos ponerle palabras al cáncer, hacerlo relato, cuento, poesía (…). Con crudeza, con humor, como se pueda, a veces no se puede”.
María Gabriela Polinori nació en Venado Tuerto el 21 de mayo de 1965. Vivió en Santa Isabel hasta los 22 años. Estudió el profesorado de Inglés en Venado Tuerto y desde entonces vive en esa ciudad del departamento General López. Actualmente es docente en el Instituto Superior de Profesorado N°7.
Desde muy chica se relaciona con la lectura y la escritura, entre la biblioteca y la escuela pública. Asistió a distintos talleres de escritura creativa. Publicó en el suplemento cultural del Diario La Razón, en la Revista Cerdos y Peces y en publicaciones y plataformas regionales.
Colaboró con artículos en revistas especializadas de enseñanza de Inglés y participó en proyectos de escrituración curricular en la provincia de Santa Fe. Correctora del libro “La llanura hacia ninguna parte” de Marcelo Sevilla (Bardo Editorial 2017).
Forma parte del Staff de Revista Ají como correctora.
Las voces de dos lectoras
“Un texto que trata al cáncer de mamas como lo que es: una experiencia ineludible, continua y colectiva. La de la madre, las de las amigas, la de la mujer en la sala de espera, la propia. Un modo femenino de relatar ese tránsito feroz en toda su capacidad de destrucción y de construcción, colado en el filtro del humor y la ironía, coreado en los dolores de tantas otras. Una comprobación del valor del protocolo y la fuerza de la superstición, el contrapeso de los consejos inútiles, lo inconcebible del rechazo. Un libro que, además de mostrar las tetas, sabe tender una mano”. Silvina Pessino (escritora de Rosario).
“A partir de la experiencia personal (como si pudiera ser de otro modo…) surge esta obra encantadora, cuyas secuencias transcurren con la agilidad de una gacela, elegante y huidiza. Porque no dice todo, porque deja un saborcito poético, porque es una escritura desde un cuerpo en vuelo, con algunas gotas de sudor, ese que se cuela impúdico y que termina en una palmada de humor. Así se suceden voces, todas de un frescor con cierta acidez, como debe ser respecto al tema. XXXX Las citas son de Margaret Atwood, elección que le da un valor agregado a la obra. La brevedad de las secuencias narrativas es otro valor, un juego de piezas que encajan justas. No hay golpes bajos, ni rebusques… sólo buenos relatos en tetas”. María Rosa Montes (escritora de Teodelina).