En el Concejo de Rosario se dio luz verde a nuevos aumentos en los servicios de transporte de la ciudad. Es que la inflación imparable que vive la Argentina obliga a barajar y dar de nuevo con respecto a la actualización de las tarifas.
Con mayoría oficialista, el Palacio Vasallo aprobó que el intendente de la ciudad pueda ajustar el boleto en base al índice inflacionario que publique el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
En el Concejo de Rosario se dio luz verde a nuevos aumentos en los servicios de transporte de la ciudad. Es que la inflación imparable que vive la Argentina obliga a barajar y dar de nuevo con respecto a la actualización de las tarifas.
Con mayoría oficialista, el Palacio Vasallo aprobó que el intendente de la ciudad pueda aumentar el boleto de colectivo cada dos meses, en base al índice inflacionario que publique el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec). No sólo eso, también se habilitó un incremento en la tarifa de taxis y remises a partir del 10 de enero.
Con esta suba, la bajada de bandera de la tarifa diurna se fija en 918 pesos y 43 pesos la ficha y el minuto de espera; la tarifa nocturna en 1.073 pesos la bajada de bandera y 49 pesos la ficha y el minuto de espera; domingos y feriados, 1.176 pesos la bajada de bandera y 49 pesos la ficha y el minuto de espera y nocturna viernes, sábados y vísperas de feriados, 1.176 pesos y 49 pesos la ficha y el minuto de espero.
Cabe recordar que hace apenas algunas semanas (23 de noviembre), se había autorizado un aumento promedio del 37,5 % en la tarifa para los taxis y remises. De esta forma, la bajada de bandera para el servicio diurno de taxis se había establecido en 656 pesos y la ficha y el minuto de espera en 31,1 pesos. Por su parte, para el servicio nocturno la bajada de bandera se había determinado en 767 pesos y la ficha y el minuto de espera en 35,2 pesos.
En aquel momento, también se había acordado la prórroga de licencias de taxis del año 2013, con vencimiento actual, y se definió que continúen con la explotación del servicio. Para ello deberán cumplir con requisitos tales como la cancelación del derecho para la adjudicación.
En cuanto a los vehículos, al momento de la adjudicación las unidades no podrán tener una antigüedad mayor a los 7 años de vencido el derecho de explotación, mientras que durante la vigencia de la explotación la antigüedad de los vehículos no podrá ser mayor a 10 años.
Sobre la prórroga de unidades, se acordó extender la vigencia de unidades taxis y remises por 24 meses; y transportes escolares y especiales por 12 meses de prórroga y que demuestren convenio para la renovación de unidades.
El caos del aumento bimestral del boleto de colectivo fue el proyecto más polémico. De hecho, fue aprobado sin el aval de los bloques Justicialista, Ciudad Futura y Leonardo Caruana, quien fuera el secretario de Salud del Jefe del Palacio de los Leones.
Ahora Pablo Javkin cuenta con esta herramienta por el lapso de dos años. Es la potestad de actualizar el boleto de ómnibus a partir de la inflación. Si bien en un principio el Ejecutivo había planteado que la suba sea automática, es decir, que cada dos meses suba el boleto en la misma proporción que sube el Índice de Precios al Consumidor del Indec (IPC), eso se modificó y pasó a ser un tope.
Así las cosas, desde enero el Intendente puede aumentar el boleto cada 60 días y definir si traslada la totalidad del porcentaje de inflación al pasajero o si busca otra alternativa para absorberla y la actualización del precio del pasaje de colectivos es menor al IPC.