Manuel Mudry | region@ellitoral.com
Sigue agravándose la situación de los sectores productivos del departamento Vera a raíz de la falta de lluvias, lo que ya ha ocasionado millonarias pérdidas, tanto en la agricultura como en la ganadería.
Manuel Mudry | region@ellitoral.com
Dominados por la impotencia, los ganaderos de la zona observan con mucha angustia cómo los animales mueren al sol y aquellos que sobreviven están condenados a un final fácilmente predecible dado que la tierra está agrietada, los cursos hídricos se han convertido en fangosas cunetas y hasta espejos de agua, como El Bonete, se secaron con trágicas consecuencias para la ecología en una región donde la diversidad ambiental era un capital que convocaba a la aventura, tenía una gran perspectiva turística para el futuro y hoy no hay agua ni para los pájaros.
El presidente de la Sociedad Rural de Vera, Sebastián Volkart, señaló que “los reclamos de los productores han ido creciendo porque la situación se complica a cada instante y minuto a minuto observamos la caída estrepitosa de la condición corporal de los animales, se ha alterado el ciclo de preñez con una tasa muy por debajo de lo normal, lo que sumado a la mortandad de animales traerá consecuencias trágicas, no solamente en el capital de los productores sino que también habrá una brutal caída de ingresos en las arcas del Estado”.
“Esta situación es inédita y mucho más grave que las anteriores, dado que en el 2008/2009 pudimos campearla con las tres nuevas perforaciones que la propia SRV invirtió en Las Gamas, donde también instalamos bombas para extraer el agua y trasladarla a los campos, pero hoy estamos superados”, agregó.
Según los lugareños, “el apoyo del gobierno es muy limitado, a pesar de los anuncios, las inversiones no alcanzan por cuanto las cifras globales se van minimizando cuando se produce el reparto; pueden ser millones para la región pero cuando se divide por departamento y a su vez por distrito, lo que llega al productor se ha convertido en monedas, que no cubren los gastos mínimos dado que el pago de una cisterna y la compra de recursos forrajeros, para mucha gente se torna inalcanzable.
En la localidad de Fortín Olmos, Yolanda Arce, se puso al frente de un grupo e inició una campaña de “recolección de tachos” para abastecer de agua de una manera más efectiva y rápida, dado que se pueden transportar en vehículos de menor porte y con un costo mucho menor, teniendo en cuenta que en la mayoría de los casos se trata de mantener un pequeño capital en chivos, cerdos y gallinas…
“Hasta el momento estamos recibiendo mucha colaboración tanto de particulares como de otras entidades y estamos abiertos a los pedidos de los pequeños productores, dado que en algunos parajes no queda agua ni para sus necesidades básicas”, destacó.
En cuanto a la ayuda del gobierno dijo que “la oferta de créditos formulada en un principio no pudo ser aceptada porque ninguno estaba en condiciones de cumplir con los requisitos exigidos, pero ahora estaban a la espera de un aporte no reintegrable prometido para un centenar de beneficiarios que presentaron la documentación en tiempo y forma”.