Sergio Levin, desde hace años brinda charlas y talleres en seguridad vial, incluso formó parte de la Agencia Nacional de Seguridad Vial como director de Capacitación. Su incursión en esta materia se profundizó a partir del año 2006 cuando se produjo el trágico accidente en la Ruta 11 donde murieron 9 alumnos y una docente del colegio porteño Ecos que venían de realizar tareas solidarias en Chaco. Uno de los adolescentes que lamentablemente perdió la vida es Lucas Levin, hijo de Sergio.
Sergio Levin en Venado Tuerto.
A partir de ese hecho trágico, Levin se acercó a la problemática de la accidentología y empezó a dedicar su vida al trabajo preventivo y la concientización. Este camino que inició lo llevó a brindar capacitaciones en todo el país, ya sea en instituciones, organismos públicos, Municipios y Comunas, empresas y hasta en ámbitos educativos, apuntando a jóvenes que están en condiciones de obtener su primera licencia de conducir.
Días atrás, Levin estuvo en Venado Tuerto donde desarrolló una charla con estudiantes de cuarto, quinto y sexto año del nivel secundario. La misma tuvo lugar en el Centro Cultural Municipal, donde, además de ofrecer sus conocimientos, sortearon cascos entre los presentes.
“Hace tiempo que vengo trabajando con Venado y esta vez me llamaron para poder dialogar con los chicos que van a sacar la primera licencia, lo cual me parece muy importante, porque lo que intento en estos talleres es que estén preparados para conducir en su ciudad, sino también en el mundo hostil que le va a tocar vivir si se van a estudiar o trabajar a otros lados. Para ello hay que estar listos y conocer los riesgos que tenemos en la conducción”, expresó.
Para el capacitador, el abordar estas temáticas con adolescentes requiere un trabajo extra, sabiendo que hay falta de concentración o de atención, incrementado con la presencia del celular. “La respuesta que recibimos por parte de los chicos es buena, preguntan, se interesan, debatimos, no es un monólogo, sino que todo lo contrario, se incorporan, se sienten partícipes del taller”, detalló.
Ciudadano responsables
Para Sergio Levin es indispensable formar “ciudadanos responsables” y a partir de ahí se puede pensar en “conductores responsables”, añadiendo que “yo siempre digo que el que no utiliza el cinturón de seguridad es el mismo que te tira yerba por la ventanilla del auto o el que deja suciedad en un espacio público; es decir que incumple con las normas”.
Alumnos participaron de la charla en el Centro Cultural Municipal.
“El gran problema en Argentina no son las normas de tránsito, sino que no las respetemos. La gente sabe lo que hay que hacer y lo que no. Incluso los jóvenes, sin embargo es la edad donde más se producen siniestros con víctimas, porque es la edad de 'yo puedo', 'a mí no me va a pasar', 'jugar al límite', se estira la cuerda hasta que muchas veces se rompe. La seguridad vial no es más que la toma de buenas o malas decisiones rápidas”, exclamó.
Más controles
Para el especialista los controles en la vía pública son uno de los ejes centrales para lograr mayor seguridad. “Uno de los graves problemas que tenemos en Argentina es que los controles no se dan de forma permanente, menos aún en época electoral porque son considerados 'piantavotos', pero en realidad estos controles junto con la educación que se logra con capacitaciones y talleres, son lo que pueden revertir este cuadro de situación, como se dio en todos los países con índices de accidentología muy diferentes a los nuestros”, enfatizó, agregando que para ello se requiere un compromiso de Nación, Provincia y de las ciudad.
“Si vos querés cambiar una cultura, se debe controlar por más que haga frío, calor o esté lloviendo. Con el tiempo no se necesitarán más controles porque la gente va a ir entendiendo como se tiene que cuidar”, afirmó.
Según indicó, los puntos críticos a tener en cuenta son velocidad, que se puede hacer con apoyo de recursos tecnológicos como los radares; el uso del casco en las motos y la alcoholemia.
El rol de los mayores
Seguidamente, Levin recordó que los menores pueden manejar con 17 años un auto y con 16 años, más la firma de un padre una moto. “La responsabilidad de los mayores es no darle a un chicos sin licencia un vehículo, algo que es muy común sobre todo en el interior del país, donde pibes de 13, 14 o 15 años están manejando una moto, quienes obviamente no tienen carné, pero eso no es lo más importante, sino que lo grave es que no tienen una preparación psicofísica para conducir. Hay padres que quieren ver crecer a sus hijos a una velocidad mayor a la natural”, resaltó.
Red vial
Consultado sobre el estado de las rutas y calles, Sergio Levin respondió: “Argentina tiene una red vial muy precaria, con pocas autopistas. Es necesario tener mejores rutas por una simple razón: el 40 por ciento de los muertos son por sobrepaso indebido. Pero también hay que saber que los mayores choques con muertos se dan en rutas y calles en buen estado, eso no es una excusa para no arreglar o mejorar las condiciones de las mismas”.
España, un ejemplo
Por último, el tallerista y capacitador sostuvo que España es un espejo donde poder mirarnos, porque “hace 50 o 60 generó la DGT (dirección general de tránsito) porque tenían una problemática igual a la nuestra y en los último 30 o 35 años bajaron más de un 50 por ciento la cantidad de víctimas. Para brindar datos precisos, según las estadísticas, en España el cinturón de seguridad lo utilizan en la parte trasera el 99 por ciento y en la parte delantera el 100 por ciento; en Argentina, atrás lo usa el 27 por ciento y adelante el 64 por ciento. Eso significa que no hay magia. Con el casco sucede lo mismo, lo usa el 99% de lo motociclistas y en Argentina el 62%”, sentenció.