Pasaron muchos años desde que la localidad de Elortondo trascendió todas las fronteras de la mano de una joven modelo y hoy empresaria, Karina Rabolini. De forma inesperada, cuatro décadas después surgió otro nombre con talento en el que ya posaron la mirada primeras marcas del país y también del exterior.
Se trata de Guadalupe Romanutti, una chica de 19 años que por estos días se encuentra trabajando en Colombia, haciendo campañas y representando a firmas como Koaj, Burger King o Falabella. “Desde chiquita siempre me gustó el mundo del modelaje, me encantaba vestirme, hacer desfiles en mi casa y sacarme fotos en cualquier lugar del pueblo. Mi abuela fue mi par en todo esto, me hacía la ropa y después la sesión de fotos”, contó en contacto con este medio.
Es integrante de “Portfolio”, una agencia rosarina que fue quien preparó el camino para esta experiencia en tierras “cafeteras”. Si bien no trabaja para empresas, mediante representantes ya modeló para Tussi y Melocotón, e hizo fotos para Oassian, Garza Lobos, Laura Bonplad y Barso: “Ellos tienen contactos con el exterior y un día les llegó una propuesta de Colombia. Necesitaban una modelo rubia. Me preguntaron si estaba interesada en viajar y lo acepté. Hice el casting para que me puedan ver y quedé seleccionada”, recordó.
La joven de Elortondo dijo que estará fuera del país hasta fines de diciembre y que “voy conociendo de a poco Colombia y es super hermosa, tiene lugares muy lindos”. Además, valoró: “Cada día aprendo algo nuevo de su cultura y la gente es muy amable. Estuve también por Barranquilla donde me surgió un trabajo, todo maravilloso”.
Hasta fines del 2024 trabajará en el exterior para luego continuar con su carrera en el país.
Insiste que en esta experiencia “día a día vas aprendiendo” y que en el viaje se nutre de conocimientos y saberes de otros modelos. Asimismo, destacó que la firma con la cual trabaja “hizo realidad mi sueño de pequeña realidad” y que “les agradezco de corazón todo lo que hacen, son grandes personas y súper responsables con su trabajo y me acompañan en este camino que recién empieza”, amplió.
Confianza y seguridad
Guada cuenta que “busco continuar disfrutando de estas experiencias” y que “siento que me queda mucho por aprender y vivir”. “Me gustaría seguir viajando y a la vez estudiar. Le quiero sacar provecho a las nuevas oportunidades que me aparezcan. Más que nada a esta edad, donde se que tengo la capacidad y las herramientas para llegar lo más lejos que pueda”, reflexionó.
El apoyo de su familia fue fundamental para avanzar en el mundo del modelaje.
La modelo, destaca que siempre tuvo el apoyo de su familia y que “llevo conmigo recuerdos muy lindos”. Admite que lo que más le gusta es modelar en pasarela, algo que describe como una “sensación muy especial” por todo lo que hay detrás, como el esfuerzo, días de preparación, ensayos, entre otras cosas.
Se confiesa admiradora de la modelo brasileña (hoy retirada) Gisele Bundchen, por su perseverancia. “Ella fue rechazada muchas veces por marcas y eso me da el empujón que necesito cuando no tengo mucha fe en algunas cosas. ‘El no’ lo vas a recibir muchas veces y en este trabajo nunca tenés que estar quieta ni darte el tiempo de frustrarte. Es seguir intentando hasta que se den las cosas”, aclaró.
Consultada sobre Karina Rabolini, dice que “conozco un poco sobre su historia, mi familia me contó mucho sobre ella, tuvo mucho mucho éxito en su momento” y que además es una “gran persona”.
“Quiero seguir aprendiendo de este mundo, seguir viviendo experiencias, conocer gente nueva y viajar mucho. Se que es algo que no voy a vivir toda mi vida, por el momento disfruto de lo que hago y aprovecho cada oportunidad. Quiero seguir haciendo esto y a la vez estudiar, que es algo complicado y más a la distancia, pero cada pequeño esfuerzo al final tiene una recompensa y no siento la presión de tener que decidir todo mi futuro en esta etapa”, acotó.
La chica de Elortondo se dio el gusto de trabajar para primeras marcas a nivel mundial.
Luego, afirmó que “me siento super acompañada por mucha gente, más que nada mi familia que nunca dudó de mi” y que “jamás me reprochan algo o se negaron a que yo hiciera esto”.
“Tengo una gente hermosa al lado que me acompaña y me apoya en cada paso que doy. Me quedo con las personas que me siguen en todo esto y de alguna forma u otra siempre están, a ellos les agradezco todo”, aseguró.
Finalmente, aseveró: “Me considero una persona comprometida con el trabajo, siempre dando lo mejor de mi y pensando alto. En este ámbito te toca comprender muchas cosas, no tomarte nada personal y saber los límites de uno. Soy muy segura de mi misma cuando quiero lograr algo y eso es lo más importante en este trabajo. Perder la vergüenza e ir con confianza a todo lo que vayas hacer”.
Un nombre con historia
Karina Rabolini es quizás la cara más conocida del sur provincial en el ambiente del modelaje que luego recorrió el mundo. Nació el 27 de abril de 1967 en Elortondo y a los 14 años se mudó junto a su familia a la Capital Federal. Al poco tiempo, gracias a un amigo de su hermano, se anotó en una agencia de modelos y empezó a deslumbrar desde las pasarelas y las tapas de las revistas.
Para esa época conoció al motonauta Daniel Scioli, con quien estuvo en pareja por más de dos décadas. Fue presidenta de la Fundación del Banco de la Provincia de Buenos Aires y primera dama de Buenos Aires cuando Daniel Scioli ganó las elecciones a gobernador en 2007.
Además de ser una modelo reconocido, Karina es una exitosa empresaria.
Alejada de los flashes y las pasarelas, se casó en mayo de este año con Ignacio Castro Cranwell, funcionario del municipio de Tigre, con quien mantuvo un noviazgo de ocho años.
Actualmente, lleva las riendas de dos negocios que corren de manera paralela y se llaman como ella: Karina Rabolini, uno está dedicado a los cosméticos y los perfumes, y el otro a lentes y accesorios.
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