"Tutti" Jáuregui viajó a Salta para conocer a la familia de su donante de corazón
A poco más de un año del trasplante que le salvó la vida, Branco viajó a Salta para encontrarse con la familia de Adrián Galeano, el joven de 16 años cuyo corazón le dio una segunda oportunidad.
Emotivo encuentro en Salta.
19:58
Branco Jáuregui, “Tutti” para todos, el joven de Carreras que recibió un trasplante de corazón en febrero de 2021, protagonizó quizá el viaje más emocionante de su vida y el deseo que había manifestado en otras oportunidades finalmente se hizo realidad. Tutti viajó a Salta, a encontrarse con la familia de Adrián Galeano, su donante.
Emotivo encuentro en Salta.
Branco ya había manifestado su deseo de conocer a la familia de Adrián y ahora finalmente, se hizo realidad. A través de las redes sociales, el joven de Carreras expresó la emoción y los sentimientos que vivió en el encuentro con Rubén, el padre de Adrián Galeano; Alejandra Tolaba, la mamá, y toda la familia, que lo esperaban con los brazos abiertos.
“Hoy las lágrimas se apoderaron de nuestro día. Lágrimas de muchos sentimientos encontrados, de angustia, de tristeza y de dolor. Pero también lágrimas de alegría, de felicidad, de satisfacción y de mucho desahogo”, rezan los posteos realizados por el joven de Carreras.
“Familia Galeano, familia Tolaba, muchísimas gracias por recibirnos, por permitirnos conocernos y por permitirnos agradecerles en persona el acto más grande de amor que pudieron tener. El Permitirme seguir viviendo. La luz de Adrian nunca se apagará. Donar órganos salva vidas”, escribió Tutti
Su deseo
Desde febrero en diálogo con El Litoral, Tutti había manifestado ese deseo personal de viajar a Salta para agradecer a esas familias la chance que le dieron de seguir viviendo a pesar de su tragedia y Rubén, el padre del chico; Alejandra Tolaba, la mamá, y toda la familia lo esperaban.
“Es otro objetivo mío. Algo especial. Desde el día que me comuniqué con ellos por primera vez quedamos en contacto. Hubo una posibilidad de vernos en Buenos Aires, pero no se dio. Quedó pendiente poder conocernos y agradecerles personalmente”, manifestaba Branco al cumplirse un año de la intervención, a la vez que resaltaba que “tienen ganas y yo también. Sabíamos que iba a haber un momento y es este. Con qué nos vamos a encontrar no sé, pero lo veo emotivo. Hay una pérdida de un hijo por un lado y vida en otra persona. Mi donante fue una persona que tuvo un accidente, estuvo siete días internado y le detectaron muerte cerebral 24 horas ante de notificarme. No fue algo inmediato”, imaginaba.
“Hubo la voluntad de una familia para donar los órganos de su hijo para que otra persona siga viviendo. Eso es algo que reflejo en charlas que doy en instituciones. Trato de recalcar la importancia de la donación de órganos. Le puede tocar a cualquiera. Hay 7 mil personas esperando un posible donante que les permita cambiar su forma de vivir. Hay que hablar. Se tiene que seguir insistiendo en este tema, contar la experiencia para saber que se puede. Brindar ese mensaje de aliento, esa experiencia de vida para que sepan que es posible”, decía Branco Jauregui antes de la concreción del viaje a Salta que lo llevó al encuentro de quienes hicieron posible que él, hoy, esté vivo