Sábado 26.8.2023
/Última actualización 15:34
Este viernes 25, en una noche brillante por donde se la mire, Norberto “Ruso” Verea colmó las expectativas del público y de los organizadores de la charla abierta -con ingreso libre y gratuito- en la Sala Castalia de la Biblioteca Popular “Florentino Ameghino” de Venado Tuerto.
Cuando la Asociación Regional de Trabajadores de Prensa (Artrap) decidió que era el momento de retomar el ciclo de conferencias que, por distintas circunstancias, había interrumpido años atrás, uno de los primeros nombres que surgió fue el de Verea, un hombre de principios, que transitó siempre por los bordes del sistema de medios. Y, sin dudas, fue la persona indicada para este relanzamiento, que contó con el aval de un centenar de concurrentes, entre los cuales había numerosos periodistas de la ciudad.
En el inicio de la conferencia, Juan Miguel Miserere, el más activo gestor y directivo de la Artrap, destacó, además, la participación del Círculo de Periodistas Deportivo de Venado Tuerto y la Carrera de Periodismo del Instituto Dante Alighieri, y enseguida, sin demasiados preámbulos, dejó a Verea ante un auditorio ávido de escuchar sus conceptos libres, personales.
Medios en decadencia
Durante más de una hora y media, el Ruso, con experiencia en las radios y cadenas de TV más importantes del país, se explayó con suficiencia sobre un variado menú de temas, incluyendo el fútbol y el rock, sus grandes pasiones, como también la política y los medios de comunicación. Precisamente con este último rubro comenzó la exposición, reconociendo un fuerte deterioro cultural, donde la liviandad y lo superficial, en aras de dejar más lugar al entretenimiento y la publicidad exacerbada, quitaron espacio a los análisis más profundos, más comprometidos, los que informan y ayudar a formar. No obstante, advirtió que, a pesar de las presiones, en la mayoría de los casos sutiles y sigilosas, hay espacios de libertad para ejercer un periodismo menos ligado al negocio y más comprometido con el interés ciudadano.
También se refirió el disertante a los sesgos de confirmación que se imponen en el sistema de medios, donde las audiencias buscan ratificar sus propias creencias, sin animarse a ponerlas en duda, siendo funcionales a la “grieta” de la política, que se ahonda, y se empalma con la agresividad de las redes sociales, aprovechando muchas veces la impunidad que brinda el anonimato. En esa misma línea de análisis, sumó la lectura en retirada, que lleva a los más jóvenes a usar, cada día, un vocabulario más acotado y achicar las posibilidades de la comunicación y la sociabilización.
Juan José López; Santiago Córdoba; Gustavo Brandoni; el Ruso Verea; Mauro Camillato; Juan Miserere; Juan Franco y Roberto Cassane.Libertarios que no vienen solos
Si bien tomó distancia, claramente, de las recetas del extremismo libertario, Verea, sin herir susceptibilidades, aludió los grandes yerros de los gobiernos nacionales de los últimos años, que ahora se ven asediados por postulantes anti-sistema, o anarco-capitalistas, como se autodefine Javier Milei.
En este sentido, dio como ejemplo el sistema de medios públicos, donde él participó en una etapa en Radio Nacional, a los que defiende a ultranza por el rol estratégico que debieran cumplir, pero a la vez cuestionó el uso partidario de los mismos, no sólo en el obsceno discurso oficialista, sino también en la abusiva contratación de militantes, situaciones que se repiten en el Estado, en todos los órdenes, abonando el camino para los cantos de sirena que se oyen cada vez más cerca.
Un centenar de personas colmaron la capacidad de la sala Castalia para escuchar al notable Ruso Verea.Más adelante, el exarquero hizo una referencia a las "barras bravas" y el negocio del fútbol en general, y de cómo los gobernantes buscan sacar tajada, sin cuestionar esa realidad que se profundiza con el tiempo, poniendo al más popular de los deportes en manos de un perverso dispositivo que distorsionó su esencia, lo maniató y lo corrompió. En este punto, recordó el Fútbol para Todos, que lo tenía entre sus opositores, justamente porque con el dinero de la gente, más allá de la transmisión gratuita de los partidos, se sostenía en paralelo un sistema que favorecía la continuidad del gran negocio en pocas manos, mirando para otro lado desde la Casa Rosada, e incluso creando ONG's para favorecer a los “barras” más caracterizados, como Hinchadas Unidas Argentinas, que se dieron el lujo de concurrir a un Mundial, poco menos que como representación oficial del país, incluyendo en la comitiva a delincuentes con pedido de captura.
Un merecido aplauso del centenar de espectadores coronó la notable presentación del Ruso Verea, quien está evaluando distintas propuestas para volver a los medios. Un rato después, hasta entrada la madrugada, las charlas enfervorizadas, de fútbol, rock y política, continuaron en el marco de un asado que el grupo de Artrap organizó para agasajar a Verea y su esposa Cristina, antes de su regreso, este mediodía, a la Ciudad de Buenos Aires.