Donantes de órganos: una extraña pausa entre la vida y la muerte
Cuáles son las condiciones actuales del sistema de salud público, la concientización en donación de órganos y la polémica que generó la idea de Javier Milei (Partido Libertario) acerca de tratar la donación de órganos como "un mercado más". Entrevista con el director del Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos (Cudaio), Mario Armando Perichón.
Donantes de órganos: una extraña pausa entre la vida y la muerte
Un centenar de profesionales se ponen en marcha cuando hay un donante. Se trabaja a contrarreloj. El tiempo es clave y no hay titubeos para el trasplante. El procedimiento consiste básicamente en sustituir un órgano o un tejido enfermo por otro adecuado concedido por un donante. Pero un trasplante es mucho más que eso: es fruto de la solidaridad, de la profesionalidad de los médicos y del avance científico. El trasplante es, sin duda, una segunda oportunidad, un volver a nacer.
En diálogo con este medio, Mario Perichón, director del Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos (Cudaio), dependiente del Ministerio de Salud de la Provincia de Santa Fe, estima que se superará la tasa de donación del último año, aunque -entre otros temas- lamentó que "la sociedad no está preparada para hablar de la muerte".
-¿Cómo pasamos del miedo a la muerte a hablar de donación de órganos?
-Primero decirte que un proceso histórico cultural lleva su tiempo, a nosotros nos llevó cuarenta años, había que cambiar una manera de mirar la vida después de la muerte. Por ello, en 1977 se dictó la Ley 21.541 que dio nacimiento al Centro Único Coordinador de Ablación e Implante (Cucai). Comenzó a funcionar en 1978, surgió entonces como el organismo de procuración nacional a cargo de la normalización de la actividad.
"Yo entré en el Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos (Cudaio) allá por mediados de la década '80 donde me encontré con una organización muy pequeña con gente que venía fuera del país, que habían visto cómo se organizaban en tema de salud en Europa y decidimos con el Dr. Juan Carlos López Candioti, y demás médicos, crear el Cudaio, donde tuvimos una tarea muy difícil e importante que fue empezar a explicar que había una manera de morirse diferente a la que conocía todo el mundo. Nos costó que la gente entendiera que había dos maneras de mirar la muerte, la mirada clásica, la parada cardiorrespiratoria, y una nueva mirada por los adelantos tecnológicos, que era la muerte cerebral o encefálica. Eso nos llevó 40 años.
Hoy la donación de órganos en la provincia de Santa Fe se encuentra con 19 donantes por millón de habitantes por año, "faltando tres meses para la finalización de este, vamos a estar, seguramente, superando la tasa del año pasado", estimó Perichón.
"Lamentablemente la sociedad no está preparada para hablar de la muerte. Estudié medicina y nadie me habló ni me preparó sobre la muerte, algo irónico ya que ella iba a ser mi compañera de toda la vida. Recuerdo el primer día que se me murió un paciente me encerré en una habitación y quise recordar todas las pruebas que había hecho", recordó el médico.
"Sería bueno que nos miren trabajar a los equipos de procuración porque pudimos construir políticas de estado y cambiar culturas", sostiene Perichón. Crédito: Gentileza.
-¿Cómo es el procedimiento del Cudaio?
-Nosotros tenemos coordinadores médicos en todos los hospitales, en las terapias intensivas detectando los posibles donantes. ¿De dónde salen los donantes? De las unidades de terapia intensiva; por lo tanto, nosotros tenemos médicos y coordinadores operativos que pasan todos los días por las distintas unidades de terapia intensiva de alta complejidad que tengan cómo sostener un paciente en coma grave, traumatizado craneoencefálico entonces cuando hay una serie de signos clínicos que ese paciente que entró en coma profundizó su estado y entró en muerte encefálica, hay signos clínicos de eso, pero no bastan ya que de acuerdo a nuestra legislación tenemos que documentar objetivamente que está muerto. ¿Cómo se documenta objetivamente un muerto encefálico? A partir de un electroencefalograma plano de un test de apnea donde nosotros demostramos que el individuo no puede respirar en forma espontánea, y necesita obligadamente al respirador.
Los órganos no van al cielo
-¿Cuántas vidas se salvan con un donante?
-Ocho como mínimo, porque podés donar órganos y tejidos. Las córneas, por ejemplo, son tejidos, una para cada paciente.
-¿Cuánto tiempo tiene un órgano para llegar al otro cuerpo?
-El corazón es el más complicado de todos, tenés cuatro horas entre que sale de un lugar a otro, desde dónde se encuentra el donante, hasta dónde está el que recibe. Por eso habrás visto que, muchas veces, estamos haciendo operativos con la policía, con tránsito de la Municipalidad, avisando al aeropuerto, son aviones que tienen prioridades, indudablemente hay un movimiento que nadie conoce. Nosotros sabemos cómo manejarnos dentro de un aeropuerto, vamos con los móviles, el año pasado los choferes de Cudaio hicieron 410 mil kilómetros llevando órganos de todos lados.
-¿Cuáles son los órganos más exigentes en compatibilidad?
-El riñón es uno, es el más difícil de todos porque necesitás compatibilizar el grupo de sangre y concordar ciertos genes que hacen al rechazo.
Operativos de traslado. El año pasado los choferes de Cudaio hicieron 410 mil kilómetros llevando órganos de todos lados. Crédito: Gentileza.
Polémica propuesta
-¿Qué piensa de la propuesta que lanzó Javier Milei sobre que la donación de órganos se convierta en un "mercado más"?
-Hay que aclarar que el tráfico de órganos está penado por ley, hay una Declaración de Naciones Unidas. Se llama declaración de Estambul del 2010, ahí todos los países firmaron un convenio para prohibir absolutamente el comercio y el tráfico de órganos. En el hipotético caso de que la sociedad acepte la idea de Milei, las poblaciones más vulnerables de todo el mundo serían los depositarios de los órganos de los ricos. Hablar de vender órganos es volver a la esclavitud.
-¿Qué significa tener salud pública?
-El mejor ejemplo que puedo darte es la pandemia. Si buscamos la tasa de mortalidad que tuvieron los distintos países que no poseen salud pública y la comparamos con nuestro país, Argentina fue modelo. Nosotros los médicos tenemos una medida estadística que se llama exceso de muertes anual. Tenés 10.000 muertes por año, más o menos entre 10 y 15.000, si se exceden a causa de la pandemia, nosotros tenemos dos veces menos que Brasil o sea, que la estructura de la salud pública en nuestro país es un modelo a seguir. Y hay que recalcar que otro fenómeno más que se dio en la pandemia, fue la integración del sistema de salud privado y público, ya nadie más habla de eso, la pandemia es un ejemplo de qué pasa cuando un país tiene salud pública fuerte.
"La salud pública es la respuesta a todos los millones de personas en la Argentina que no tendrían acceso y que la tienen gracias a las políticas del Estado. Es una verdadera política de Estado la que se pudo generar con la procuración de órganos", remarcó Perichón.
"Hablar de vender órganos es volver a la esclavitud".
Santa Fe pionera en salud pública
En 2022, según las estadísticas oficiales de Incucai, uno de cada nueve trasplantes de órganos efectuados en Argentina el año pasado se hizo con órganos ablacionados a donantes santafesinos. Convirtiendo a Santa Fe en la segunda provincia en ablaciones de órganos.
La tasa de donación provincial en relación con la cantidad de habitantes fue de 20,9 donantes por millón de habitantes (dpmh), mientras que la media nacional fue de 16,2. Esta proporción estadística se utiliza en todo el mundo como referencia de la actividad real de donación en una sociedad.
Al respecto, el director de Cudaio, Mario Perichón, destacó que "no sólo hablamos de cifras sino también de calidad de trabajo de nuestros equipos de procuración. Habiendo sido la tercera provincia en cantidad de donantes, con 75, fuimos la segunda en trasplantes posibilitados (190). Eso se logra con procesos de donación en los que se trabaja para ablacionar la mayor cantidad posible de órganos, lo que muestra un alto profesionalismo y compromiso".
En cuanto a la tasa de donación, Perichón graficó que "si se lo compara con el concierto internacional (en el mundo lideran EE.UU. y España con más de 40 dpmh anuales), Santa Fe con 20,9 supera a muchas naciones desarrolladas, y ocuparía un hipotético 12° lugar comparando con todos los países".
Aunque agregó que "así y todo, no es suficiente. A pesar de que estamos orgullosos del avance con respecto a años anteriores, los tiempos de espera para trasplantarse siguen siendo prolongados para muchas personas de la lista. Como institución y como sociedad no nos queda otra que seguir trabajando por más donantes para que haya más trasplantes".
En cuanto a los efectores en los que se registraron los 75 donantes de 2022, se destacan el HECA, de Rosario, con 31 procesos; y el Hospital Cullen de Santa Fe con 12.
Los hospitales Gutiérrez de Venado Tuerto y Centenario de Rosario tuvieron cuatro donantes; tres el Sanatorio Laprida de Rosario; y se lograron dos donaciones en los Sanatorios Italiano Centro y de la Mujer y en el Hospital Italiano, todos de Rosario, en los hospitales Eva Perón de Granadero Baigorria y Ferré de Rafaela y el Sanatorio Garay de Santa Fe.
En tanto, los Sanatorio Plaza, Rosendo García y Británico y el Hospital Privado, todos de Rosario; los sanatorios Santa Fe de la ciudad homónima y Nosti de Rafaela; los hospitales San José de Cañada de Gómez y Olga Stucky de Rizzi de Reconquista; y la Clínica 10 de Septiembre de Sunchales, concretaron una donación de órganos.
El HECA fue, en 2022, el 2° establecimiento con mayor generación de donantes del país, junto al Hospital Padilla de Tucumán.
Se subraya también que se lograron procesos de donación por primera vez en Cañada de Gómez y Sunchales, al tiempo que se reactivó la procuración post pandemia en Reconquista y Rafaela. Esta ampliación del alcance territorial responde a una política institucional que busca elevar el techo de donaciones incorporando cada vez más efectores a la práctica cotidiana de la procuración. En esa línea, en 2022 se realizaron cursos de capacitación en procuración para el personal de los establecimientos públicos de Casilda, Firmat y Villa Constitución.
Otro logro para destacar fue que en noviembre CUDAIO presentó un récord histórico para la provincia, con 19 donantes de órganos en el mes. El ritmo casi diario de trabajo incluyó el desafío inédito de llevar adelante seis procesos en un solo día en distintos establecimientos de la provincia.
Cudaio
Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos (Cudaio) es un organismo dependiente del Ministerio de Salud de la provincia que trabaja -en articulación y bajo los lineamientos del INCUCAI- en la práctica y la regulación de la Ley Nacional de donación y trasplante en la provincia de Santa Fe.
Desde esta institución, se lleva adelante la promoción de la donación de órganos, tejidos y células para trasplante; realizando la coordinación de acciones relacionadas al trasplante (desde la procuración hasta la fiscalización de la actividad, tanto de las instituciones públicas como privadas); garantizando la accesibilidad de todo paciente a las listas de espera, Se toman medidas para aumentar la disponibilidad de órganos, tejidos y células para los trasplantes y asegurando así el acceso igualitario a todo paciente que lo requiera.